En diciembre de 2013 se alunizó por primera vez desde que lo hiciera por última vez la Unión Soviética en 1976 con una sonda. Lo conté en la Noticia 1279ª. Lo hizo la República Popular China en su recién estrenada carrera espacial que está dándole progresos muy rápidos y revitalizando su industria. En cierto modo se está reeditando la carrera espacial de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética, sólo que esta vez es China quien ocupa el lugar de Rusia. En esta bitácora, desde su inicio, he publicado diversas veces sobre Conquista y exploración del espacio y hacía ya unos años que tenía abandonado escribir por aquí sobre ello. Así por ejemplo, lo que no conté de la misión Chang'e 3 es que al mes y medio, ya en 2014, su robot explorador tuvo una avería seria que le impidió completar misión. Fue reparado con instrucciones que le enviaron desde La Tierra, pero volvió a averiarse de manera irremediable, por lo que la misión había fallado en su intención total, aunque fuera un éxito que China alunizara. Se podría decir que cumplieron sólo media misión. Pero el éxito de alunizar animó a proseguir con su programa espacial, que implicaba, tal como conté varias veces, llevar a La Luna un taikonauta (el equivalente chino del astronauta de los estadounideses y los cosmonautas de los rusos) entre 2015 y 2020, luego desplazada la fecha a 2017-2020. En principio no hay anunciado que este 2019 vayan a mandar a alguien a La Luna, aunque siempre puede haber sorpresas, si cumplen su programa, sería a más tardar en 2020. Lo que sí han reiterado y vuelto a anunciar los chinos es que quieren ser los primeros en pisar Marte en 2030. Teniendo en cuenta las características militares de ese gobierno, es probable que lo pudieran cumplir a pesar de que implicaría la muerte segura de quien eso haga hoy por hoy. Sea como sea, la última vez que un humano pisó La Luna fue de parte de Estados Unidos en 1972.
Me apasiona esta parte de la Historia actual, la de la conquista y exploración del espacio.
Este comienzo de año hemos asistido el día 3 de enero en la madrugada española (que eran pasadas las 10:00 a.m. en China) al alunizaje de la Chang'e 4. Su proeza esta vez es mucho mayor pues ha alunizado donde nunca ha estado el ser humano por su complejidad técnica, su desconocimiento y la falta de presupuestos, sino también de interés en algunos mandatos estadounidenses y rusos. Esto es: en el lado oculto de La Luna, que, como se ha explicado en prensa, no nos es desconocido del todo. Sabemos de sus cráteres, sospechamos sobre lo que podría contener y lo vemos tenuemente cuando es Luna nueva, confundido con el cielo nocturno. Los chinos le han hecho llegar al cráter más profundo del satélite, en busca de muestras geológicas, probablemente también de helio 3, el posible supercombustible del siglo XXI, y de la existencia posible de agua bajo suelo lunar. Para lograr todo esto han usado un satélite que les repite señales que recoge Yutu 2, el robot que transportaba Chang'e 4 para que se dé paseos por La Luna mientras va cumpliendo su misión, que debe superar altas temperaturas bajo cero grados centígrados. Hay que recordar que Chang'e es el nombre de una diosa de la mitología china más antigua, la cual viviría en La Luna junto a un conejo o liebre gigante llamado Yutu. Para los chinos La Luna no tiene forma de cara, sino de conejo.
La cosa es que en 2016 los chinos ya habían experimentado orbitando La Tierra con unos mil cuatrocientos embriones de ratón, cito la cifra de memoria, podría fallarla. Lograron que nacieran unos seiscientos. Era otro hito de la exploración del espacio exterior, pues era la primera vez que se lograba o que se demostraba que no era imposible crear vida pluricelular de un mamífero fuera de La Tierra. Ahora Chang'e 4 lleva en sí capullos de seda, donde los gusanos debieran hacerse mariposas, diversas semillas que deben germinar y demás experimentos biológicos. Lo que buscan los chinos en este sentido es la viabilidad de la creación y supervivencia de la vida fuera de La Tierra, pues por una parte quieren poner una colonia humana en La Luna en la década de 2020, y la posible ida a Marte si es necesario usando varias generaciones. Recordemos ahora que la Estación Espacial Internacional fue lanzada a orbitar La Tierra en 1998, y aunque ahora se está pensando en reemplazarla por otra más moderna, los chinos solicitaron participar de ella en torno a los primeros años 2010, pero los estadounidenses se negaron y los rusos, que tienen un acuerdo espacial con Estados Unidos, les secundaron, por lo que ellos, los chinos, han comenzado a construir su propia estación espacial de la que ahora recelan los norteamericanos, por si esconden allí alguna cuestión que afecte a la seguridad de las naciones o al equilibrio de fuerzas, lo que nos recuerda, como ya he dicho, a una reedición de los recelos de la Guerra Fría. En todo caso, los chinos le han ofrecido a la Unión Europea colaborar en la colonia lunar y el viaje a Marte.
Sea como sea, la exploración del espacio es algo que me sigue apasionando. Es parte evidente de la Historia actual de la Humanidad, pero sobre todo de la Historia futura. Cuando estemos en 2100, y eso no lo veremos nosotros los que vivimos ya con una edad en 2019, será más que evidente que los libros de Historia tendrán que tener un apartado concreto para comprender y explicar la exploración del espacio. En esta exploración se han logrado grandes avances en los transportes, sobre todo aéreos, en las comunicaciones, que a la vez han cambiado a las sociedades y a las relaciones políticas, se ha avanzado aunque parezca extraño en nuevos tejidos con los que nos vestimos comúnmente, en instrumentos de cocina, en comidas, en descubrimientos médicos, o en otras palabras, este apartado de la Historia humana no se queda relegado sólo a lo que pasa en las naves espaciales, ha afectado y mucho a los avances que han habido dentro de La Tierra desde la segunda mitad del siglo XX.
Yo de momento llevo varios años con un acuerdo con un amigo de la Universidad para ver juntos la llegada a Marte si llegamos a verla. Aunque efectivamente todos estos acontecimientos requerirían de un análisis más serio y profundo, ya que los equilibrios de fuerzas y económicos están de fondo en todas estas cuestiones científicas. No es baladí que quien controle una fuente grande de helio 3 probablemente se transformará en la próxima superpotencia del mundo por muchos años. Hace varias décadas, en los años 1970, se decidió que tanto en el espacio como en los polos terrestres todos los avances que se hicieran debían ser en nombre de toda la Humanidad. Fue un acuerdo principalmente entre Estados Unidos y la Unión Soviética para zanjar su carrera espacial, aunque no quedó del todo zanjada. Parece que con la entrada en juego de los chinos en estos años de 2010 volvemos a la posibilidad de que esto no sea del todo así, y puede que la búsqueda del helio 3 pudiera ser como el motor impulsor que fue la búsqeuda de El Dorado o de la Fuente de la Juventud cuando se llegó a América. Sólo que ahora hay naves espaciales.
Saludos y que la cerveza os acompañe.
2 comentarios:
Enhorabuena por tu blog, lo leo de vez en cuando. Lo que se me ocurre leyendo este post:
1- Dudo mucho que los chinos lleguen a Marte antes que los americanos y mucho menos en 2030. Es cierto que la CNSA está avanzando a pasos de gigante y que la NASA lleva años dando palos de ciego. Pero la diferencia sigue siendo abismal en cuanto a tecnología, experiencia y presupuesto.
2- Dentro de miles de años, cuando seamos una especie multiplanetaria, probablemente el único acontecimiento significativo de los que hasta ahora han sucedido será la llegada del hombre a la luna. Todo lo anterior, prehistoria. Ni revolución francesa, ni revolución indistrial, ni Imperio Romano. Nada. Lo único que quedará es que hubo un planeta en el que evolucionó una especie inteligente, desarrolló una tecnología y fue capaz de conquistar al espacio.
3- China no es el primer país en llegar al acara oculta de la Luna. Como todos sabemos, los primeros fueron los nazis que se encuentran ahí en una base oculta esperando el momento de volver para conquistar la Tierra.
La cosa es que China ha saltado de manera muy rápida de no tener ningún proyecto ni posibilidad espacial a tenerlo todo en un tiempo récord comparado con USA, Rusia y UE. ¿Lo harán en 2030? ¿No lo harán? Es difícil, pero si alcanzaran la tecnología necesaria creo que sus militares aceptarían la orden de ir, aunque fuera suicida, en nombre de la República Popular. Sea lo que sea, la exploración del espacio seguirá al ritmo que deba llevar.
Gracias por leer.
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