lunes, noviembre 27, 2023

NOTICIA 2274ª DESDE EL BAR: NAPOLEÓN

El sábado pasado fui a ver la nueva película sobre Napoleón, a fin de cuentas, desde que se inventó el cine a finales del siglo XIX el personaje ha aparecido en torno a ciento cincuenta y doscientas películas, dijeron el otro día en la televisión, y temas relacionados con él o sus guerras se multiplican por muchísimo más. Por cierto, en películas relacionadas destacaría varias, como Los duelistas (Ridley Scott, 1977), Master and Commander: Al otro lado del mundo (Peter Weir, 2003), o la ambientada en la Guerra de la Independencia Española, y protagonizada por Frank Sinatra, Orgullo y pasión (Stanley Kramer, 1957). Las películas donde se le nombra, aunque sean comedias de humor del siglo XX, son innumerables. Entre las películas que aparece él o que es el protagonista, la película insuperable, clásico del cine que hizo Historia además porque introdujo varias innovaciones que hoy día son algo común a la hora de rodar, es el experimental largometraje Napoleón de Abel Gance, película muda de 1927 que duraba ni más ni menos que unas cuatro horas y diez minutos. Es una referencia del cine y de su Historia. Gance rehízo la película en 1935 para hacerla sonora y en 1981 fue restaurada para introducirle una nueva banda sonora. Gance volvería a Napoleón varias veces en su producción cinematográfica, destacando ya en su ancianidad Austerlitz (1960). Otra película destacable y muy conocida de Napoleón, aunque fue un fiasco en la taquilla porque no logró recuperar el dinero de la superproducción épica que se hizo ni satisfizo al público como se esperaba, fue Waterloo (1970) de Sergei Bondarchuk, la cual, como la tengo en casa en DVD, me dediqué a verla la noche anterior a ir a ver la nueva película, así que pude comparar... De hecho, se hace evidente que la nueva película coge cosas de manera muy clara de las películas de Abel Gance y de esta otra de Bondarchuk, sólo que quiere ponerlas en un lenguaje de cine del siglo XXI donde prima más el espectáculo de la acción y la violencia.

La nueva película es Napoleón, de Ridley Scott, aunque una vez vista creo que hubiera sido mejor llamarla Napoleón y Josefina, Josefina y Napoleón o Napo, picha brava. La historia se supone que desea contar la biografía de Napoleón desde la Revolución Francesa hasta su muerte en la isla de Santa Elena, que por cierto, me sorprendió mucho y me hizo gracia la gran cantidad de personas un poco más jóvenes que yo que tras decirles anoche que venía de ver la película me pedían, sin estar de broma, que no les contara el final. Gracioso a la par que preocupante. En realidad la historia se centra muchísimo en la historia de amor y desamor de Napoleón y Josefina, por ello quizá hubiera sido mejor plantearla de ese modo y no como de Napoleón y las guerras napoleónicas, que es lo que se ha hecho en la promoción. Una promoción donde un historiador le señaló que la película tenía fallos de Historia y Scott le contestó que se comprara una vida, mientras que en otra entrevista declaraba que a la gente le aburre la Historia y no va a cine a ver Historia, por lo que le da igual si su película cumple o no con la Historia. No hace falte que lo jure. Desde el minuto cero comete errores y no hay minuto sin error de todos sus ciento cincuenta y ocho minutos. 

La cosa es que si alguien rueda una película sobre Napoleón, su público potencial es gente que trabaja con la Historia o que le gusta la Historia, más gente que espera ver cine bélico, no sólo tendrá ese público, pero potencialmente es el que más probablemente irá. La película, errores al margen, no es una película exactamente de Historia, aunque es su eje vertebrador. La vida de Napoleón y la Historia de Francia y Europa es sólo la excusa para presentar una historia de amor y también de lo que sería violencia de género. Una pareja en cierto punto de relaciones tóxicas, tal como se entienden estas hoy día, pero de amor en el fondo. Tampoco es una película bélica. Aparecen un par de batallas, no muchas más, de manera breve y con planos espectaculares. Lo hacen además con la puntualidad de un cronómetro, en el momento justo para que el espectador que iba con esas expectativas no se pregunte por qué está en la sala viendo un romance. Según avanzaba el metraje yo mismo pensé que seguro que cuando quedase una hora empezaría la acción... y efectivamente, a la hora empieza la batalla de Austerlitz, que no dura mucho y que está rodada a modo de confusión, metiendo la cámara en medio de los combatientes y luego con planos aéreos para los bombardeos. Pero dura poco y de vuelta al conflicto amoroso y sexual de Napoleón y Josefina. Pensé que volvería la acción en la última media hora... y así fue, empezó la batalla de Waterloo... que por otro lado copia mucho de la película de 1970 pero con un lenguaje de acción más de ahora. Sin embargo, si uno ve la película de 1970 y la actual de 2023 encontrará que las razones de Napoleón en una y otra no son sólo diferentes, es que son contrarias. ¿Quién lleva razón? La de 1970. 

A ver, para explicarlo bien, no es que tenga pequeños fallos de Historia o alguna anacronía, es que todo el planteamiento que hace de la Historia Ridley Scott está totalmente equivocado. Si fuera un examen de Historia hubiera suspendido de manera clamorosa. Ya te pone sobre aviso el empiece de la película con un cartel que nos ubica en el inicio de la revolución francesa en 1789, cosa que es así, pero te muestra este con el guillotinamiento de la reina María Antonieta... que se produjo en realidad en 1793 precisamente por la evolución que va tomando la revolución, cosa que a los revolucionarios más cercanos a las clases altas burguesas les horroriza, como Napoleón, que venía de una familia de la baja nobleza local y su padre era abogado. Presentarle luego biográficamente como un inculto, obseso, sin pensamientos políticos, ambicioso, maltratador, que no le hace ascos a toda violencia y cita a Maquiavelo, que parece que se le quiere presentar con una tara sexual, etcétera... es otro error. Napoleón era una persona muy leída, de hecho él tenía por modelo político y militar a Julio César, al que llegó a comentar. Es uno de los grandes estrategas militares, pero también es una persona con un pensamiento político muy desarrollado. No era un tonto. España en la película no existe, ni los españoles, ni nada que haya ocurrido en España... a pesar de que fue aquí donde se le derrotó por primera vez y donde Reino Unido empezó el contraataque, mientras Francia declaraba la guerra a Rusia. Aparece uno de los hermanos de Napoleón (tenía cuatro hermanos y tres hermanas). No aparecen más, estuve muy atento toda la película por escuchar el nombre.. pero no se dice. No hay un sólo momento de la película que se diga el nombre del hermano que aparece. No sé si era José, Luis, Luciano o Jerónimo. A Scott le da igual, con que sirva para presentar a los dos hermanos como unos burros que ahora viven en palacios, le vale. De hecho, según Scott, todas las guerras napoleónicas en realidad son un problema personal con el zar de Rusia, Alejandro I. La película es una peleílla entre Napoleón y Alejandro. La realidad europea era más compleja que eso. Los cambios democráticos de la revolución francesa había alterado todo el orden del antiguo régimen, y eso es lo que realmente puso en guerra a toda Europa desde el mismo momento que Robespierre mandó guillotinar en 1793 al rey Luis XVI. Uno de los principales combatientes contra Napoleón será Reino Unido, pero Scott dice que es Rusia... A Reino Unido se le menciona como que está de fondo, pero no le da importancia hasta la batalla de Waterloo. Aparece Austriahungría, pero también la minusvalora. De hecho según Scott, todo este tinglado de guerras napoleónicas eran resultado de los celos amoroso de Napoléon por Josefina. Incluso abandona Egipto por ella, según Scott. Por otro lado, es conocido que el Papado condenó a los revolucionarios franceses y consideraba a Napoleón como el demonio. No es baladí que el Papa en su coronación como emperador no le coronó porque se coronó a sí mismo, pero esto, aunque se ve en la película, no se explica en sus porqués. Pero aquí le presentan como una persona acorde a la Iglesia. En fin, si conoces la Historia, aunque sea de las clases de cuando íbamos al colegio, no hace falta que seas historiador, te darás cuenta que la película no es que tenga algún fallo o alguna cosita, es que toda ella está desacertada. Lo gracioso es que el remate es que al final hay otro cartel donde tratan de poner todo los muertos habidos en las batalla de Napoleón... y las reduce a cuatro o cinco.

Entiendo que Scott viniera con Joaquin Phoenix a promocionar el estreno en España, a fin de cuentas somos el país del mundo que más cine estadounidense consume después de Estados Unidos, dicen. Lo que me parece de cara a España es que se podía haber ahorrado hacerlo en el Museo del Prado junto a los cuadros de Goya de la Guerra de Independencia, mientras Phoenix declaraba que los españoles hicimos un buen trabajo. Se lo podía haber ahorrado porque Scott sabía perfectamente que España no existe en su película y que todo lo que los españoles hicimos es como si no hubiera pasado tampoco.

Como escribió Kahlo, de Dadanoias, en sus redes sociales, a la película le falta contexto histórico para que puedan entender las personas que menos fresco tengan el conocimiento de aquel tiempo, o que o lo conozcan, puedan entenderlo. No es ni medio normal que se presente a Napoleón como una persona que pretende una Europa en paz y todos parece que el quieren declarar la guerra porque sí, porque les apetece o porque le consideran un matón (esto se dice en la película literalmente en la escena en la que le sugieren hacerse rey). A Kahlo la película la dejó sin que le fuera algo que la hubiera motivado, dijo, y no debió ser la única, en la sesión a la que yo fui dos personas abandonaron la sala antes de llegar a media proyección, mientras que al acabar un grupo de jóvenes que tenía detrás y debían haber estudiado todo esto recientemente comentaban la jugada de que no aparecía nada de lo que les habían explicado en clase de Historia. A mí me dejó indiferente. 

Lo mejor de la película, coincido con Kahlo, es el vestuario. El vestuario, la ambientación, la caracterización de varios personajes y algunas escenas. Quizá necesite verla de nuevo con un pensamiento diferente, que no espere ni ver un buen biopic ni nada de las guerras napoleónicas, si no un conflicto humano en las relaciones de pareja de una persona con complejos y tormento que lo puede conquistar todo menos el amor de ella. Porque quizá va de eso la película, de que toda la grandeza del mundo no vale nada si por dentro eres incapaz de conseguir estar a bien. 

Tiene su punto los guiños a otras películas, como las ya citadas sobre el propio Napoleón, pero también a alguna cosa de Stanley Kubrik en ese palacio donde la élite celebra sexo, y de otras historias memorables de parejas míticas, como aquella de un Robin Hood ya viejo al reencuentro con Marion cuando se ve obligado a guerrear por estar con ella.

En fin, lo dicho, quizá hay que volver a ver la película desde un punto de vista diferente al de la primera visión ahora que se conoce el contenido, para poder entenderla o valorarla de otra forma mejor. Dicho esto, si has leído esto y quieres verla, piensa en ello, úsalo de herramienta para tener un buen rato en el cine. Saludos y que la cerveza os acompañe.

domingo, noviembre 26, 2023

jueves, noviembre 23, 2023

NOTICIA 2272ª DESDE EL BAR: SABEN AQUELL

Ayer fui al cine después de trabajar. Era el día del espectador y además había una sesión a una hora que podía ir, nada más acabar mi jornada. Quería ver el biopic que David Trueba ha rodado sobre un humorista que me gusta bastante en su puesta en escena y chistes, Eugenio, ya fallecido desde 2001. De hecho, en algún recital he hecho algún guiño a él o a veces he contado chistes a su modo. Como sea, muchas amistades me dijeron que tuvo un drama de vida. Ellos lo sabían desde el documental que se estrenó en 2018, Eugenio, de Jordi Rovira y Xavier Baig. Lo cierto es que ni lo he visto, ni sabía nada de su vida personal. Me cuidé muy mucho de saber nada de él, aunque tenía curiosidad. Normalmente como historiador tiendo a conocer las biografías, pero en este caso, quizá por ser un humorista de mi infancia y juventud, no me atrajo saber qué le ocurría, aunque intuía una historia. 

La película biográfica, evidentemente ficcionada rellenando aquello que no se puede saber, pues no es un documental, es Saben aquell, de este año 2023, del citado David Trueba. Había querido ir la semana de su estreno, pero en ese momento una amistad me dijo que también quería ir, pero como luego no puso día, al final sólo retrasé fecha para terminar no yendo. La semana pasada quise ir de nuevo, pero justo el día elegido me llamó un amigo que sólo quiere ir de bares. Así que me decidí a ir solo, pues también hice un llamamiento general al que nadie contestó. 

David Trueba me resulta un cineasta más bien de tono amable, que trata de ser siempre correcto con todo el mundo, y eso hace que muchas de sus películas sean éxitos para todos los públicos, pero me resultan muchos poco llamativos. Bien hechos, pero poco llamativos. Como guionista ya estrenó el documental Balseros (Carles Bosch y José María Domenech, 2002), que presentó en Alcine y que yo juzgué como público como ganador y ganó aquello y más tarde los Goya y los Óscar. Como director es destacable Soldados de Salamina (2002), que vi en un cine de verano en Alcalá, pero que de tan amable que quería ser para todos me resultó entonces un intento de blanquear el franquismo y el golpe de Estado de corte fascista en el inicio de la guerra civil. También en un cineclub de Alcalá vi otra de sus películas que me parecen destacables, pero muy suave y tapando también muchas cosas de la España de los años 1960, Vivir es fácil con los ojos cerrados (2013). Así que en general me parece un autor que no está mal de ver, pero muy suave, así que tenía mis dudas sobre cómo sería el resultado de la vida de Eugenio en sus manos. Suponía que sería algo muy suavizado.

Saben aquell está rodada un poco siguiendo los pasos de A propósito de Llewyn Davis (Joel y Ethan Coen, 2013), película que sin decirlo sigue los inicios de Dylan. Tiene algo de esa cultura contracultural que se mueve en los bares entre gente en principio nada o poco conocida. Ambas me recuerdan hasta cierto punto mis propias vivencias. Efectivamente la vida de Eugenio aparece en parte suavizada, en realidad suavizada en lo referente al contexto de dictadura de Franco y Transición política en el que se narra. A Trueba le es inevitable tratar el asunto de la muerte de Franco, pero aunque parece querer mostrar un deseo de libertad, lo hace como que no pasa más que otra noticia más. Cuela algún chiste sobre Franco en voz de alguien que inspiró a Eugenio, pero poco más, y hace un guiño de una realidad de la época que en realidad sirve de mensaje a la actualidad: amnistía para los presos catalanes... de 1976, aunque es evidente el asunto de la amnistía de 2023. Poco más. Como dice el representante de Eugenio, interpretado por Pedro Casablanc, lo suyo no es meterse en nada que ofenda, nada de política, nada de sexo, nada polémico, todo lo más blanco posible. Eso funciona como película para todos, pero no responde a las realidades biográficas e históricas. Aunque es cierto que en la época de la Transición y antes en el tardofranquismo hubo una serie de humoristas que buscaron el humor blanco, no sólo Eugenio, el caso más famoso es el de Gila, que también aparece en la película. Lo rompieron otros más innovadores del momento jugando con la nueva libertad de expresión de 1977, como Pedro Ruiz, que también aparece en la película.

La película es buena película, creo que es la mejor película que he visto de David Trueba, y con creces. A pesar de que le falla las interpretaciones de múltiples actores y actrices secundarios, destaca muy notablemente la interpretación como Eugenio de David Verdaguer, que parecía Eugenio de verdad, incluso en la voz, y la de Carolina Yuste como Conchita, la esposa de de Eugenio y a la vez la principal impulsora para crear el personaje serio de los chistes que fue Eugenio. Muy destacable la dirección artística recreando los ambientes de los años 1968 a mediados de los 1980, la peluquería el vestuario, el uso y costumbres, como que se fumaba tabaco negro a todas horas y en todo lugar... Y muy destacable para lo que es España las caracterizaciones y uso de efectos especiales para traer a 2023 a gente de la época ya muerta, como el citado Gila, pero también Nino Bravo, Chicho Ibáñez Serrador, Mayra Gómez Kempt, Pedro Ruiz, intuyo que Pedro Reyes y otras personas del momento. Algo que el cne estadounidense lleva unos años en ello de manera muy afortunada y en España es un primer acercamiento en cine muy acertado. Recordemos no obstante que en España se ha estado tanteando esto en series de televisión con éxito, por ejemplo sobre Bárbara Rey, Miguel Bosé, la Veneno, Juan Carlos I y otras personas.

 La dirección opta por las secuencias sin acompañamientos musicales, creando atmósferas muy serias y profundas en más de una ocasión en duro contraste con una voz que cuenta un chiste en medio de un contesto de drama personal que se nos está narrando. Cuando aparece alguna música se trata de canciones tristes del mundo cantautor catalán, que son preciosos poemas melancólicos. Y es que la película, aunque tiene momentos de humor a base de los chistes y bromas que se le ocurren a Eugenio, porque de eso vivía y forzosamente debe decirlos, es en realidad un drama, un tremendo drama muy duro. Es la primera vez que una película me ha hecho llorar en el cine. Alguna lágrima se me escapó. En ese sentido, David Trueba ha hecho buen trabajo de dirección al coordinar todo hasta lograr eso: mostrar que tras las risas había un tremendo drama humano.  

Eugenio rompe una promesa de matrimonio sobre 1966 al enamorarse de una chica que canta por los bares canciones de cantautora catalana, aunque ella es en realidad andaluza, ella es Conchita. Se harán pareja, se casarán, tendrán hijos, pero también formarán dúo musical, Los Dos, que Eugenio propuso como Els Dos, que tuvo muy modestos resultados entre finales de la década de1960 y el tardofranquismo de 1970-1975. El surgimiento de un panorama cantautor más potente con Serrat, Raimon u otros les devora, pero también la canción melódica con tintes de canción de autor en voz de Cecilia y Nino Bravo. Ellos están relegados a una vida común de actuaciones en bares de Barcelona, como gente desconocida, salvo entre los que van a esos bares. A la vez, Eugenio cree en el esoterismo y su padre le minusvalora de manera frecuente. Así ocurre cuando la madre de Conchita se está muriendo de cáncer y Conchita fuerza a Eugenio a seguir trabajando en el espectáculo para poder tener ingresos mientras ella atiende a su madre en Andalucía. El dueño de su bar habitual no quiere a Eugenio, porque no sabe cantar y accede a que siga actuando si hace otra cosa. Eugenio, que probablemente había desarrollado un sentido del humor irónico y mordaz como huida hacia delante de una serie de traumas familiares previos que no se narran en la película pero se intuyen, comienza a combatir su miedo escénico contando chistes para romper el hielo con el público, pero cuando quiere cantar el público mismo le pide que no cante, que cuente chistes... lo que termina siendo algo que irá en crecimiento, como es sabido, pues su fama como contador de chistes es ampliamente conocida. Sin embargo, cuando todo empieza a sonreirles, será la propia Conchita la que tendrá un cáncer que la irá matando poco a poco a lo largo de los años, lo que hace de sus vidas un tremendo drama en el que Eugenio está forzado cada noche a hacer reír, mientras él vive un drama junto a su familia. Aquí es donde toma lógica una forma de ser en el escenario que a más de uno nos recordará nuestra vida. 

Así pues la película va de algo más que de la vida de Eugenio. Es toda una lucha contra algo perdido y es una huida hacia delante y toda una exploración psicológica de un hombre en un trauma que, por otra parte, le llevará a una muerte prematura en 2001. Y ese ser algo más que una película biográfica es lo que hace de esta película una gran película. 

Ha sido la primera película que me ha hecho llorar en el cine, pero no es la primera película que me ha hecho llorar. Sólo he llorado con una película más en mi vida. Aunque parezca raro, en mi casa lloré con una película con la que nunca había llorado. Con el final de una película no evidente, Espartaco (Stanley Kubrik, 1960), otro final inevitablemente fatídico después de una gran lucha por evitar algo que era inevitable. Fue la Semana Santa de después de la muerte de mi padre en las primeras horas del día 24 de noviembre de 2003. Hace ya veinte años de esa muerte. También por cáncer.

Mi padre ya entró en fase terminal en el anochecer del día 22. Me tocaba a mí estar esa noche allí. A partir de ahí me reservo para mi intimidad lo vivido, que fueron muchas cuestiones concentradas en unas pocas horas que hubieron de ser protagonizadas, porque la vida requiere que estés en el escenario pase lo que pase. Haciendo un enorme salto en cuestiones de las horas, en la madrugada del 24 moría. Recuerdo todos y cada uno de los detalles de aquellas horas, y las conversaciones. Todo lo más, además, están anotados en mis diarios personales, aunque aún a fecha de hoy me acuerdo sin necesidad de lectura. Han pasado veinte años.

Cuando fui al cine ayer, 22 de noviembre no sabía cuál era el problema de Eugenio en su vida privada. Me reconocí en varias cuestiones de los escenarios de bar y luego en otras cuestiones.

Es buena película. Y valoro más a Eugenio de lo que ya lo hacía antes con su puesta en escena.

Ya veremos cuando la volveré a ver. Me gustaría tenerla en mi colección.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

domingo, noviembre 19, 2023

NOTICIA 2271ª DESDE EL BAR: DESPUÉS EL GOBIERNO

 Ahora sí, de nuevo con permiso de esa fruta exótica que ha desprendido su olor a fruta pasada estas últimas semanas desde la Asamblea de Madrid, hay que comentar uno de los temas que se suelen comentar en esta bitácora cuando toca. El nuevo gobierno de España al fin se ha aprobado con la investidura de Pedro Sánchez, con lo que se renueva la coalición entre Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el actual Sumar, fórmula de coalición de diversas izquierdas cuya principal fuerza se conformó entre Unidas Podemos (que lideraba antes la coalición del anterior gobierno) y personas que salieron de Unidas Podemos, empezando por la misma Yolanda Díaz, que a pesar de que ella no para de decir que viene del Partido Comunista de España (PCE) y de Izquierda Unida (IU) donde este se encuadraba, es evidente que jamás hubiera llegado hasta donde ha llegado como Ministra de Trabajo y vicepresidenta de gobierno primero con Unidas Podemos y ahora con Sumar si no hubiera tenido el apoyo y el impulso de Pablo Iglesias desde Unidas Podemos por muy buena, larga y brillante trayectoria que haya tenido ella en el PCE, ya que le recuerda más y por encima que de IU. ¿O es que yo me equivoco y antes de la existencia de Podemos en 2015 todo el mundo estábamos votando al PCE como locos y este era la tercera fuerza política en España? Seamos serios, el PCE era un partido más dentro de IU, coalición en la cual, aunque él creó IU, estaba en horas bajas, muy bajas. Cierto que Díaz tuvo cargos en Galicia antes de 2015, pero siempre dentro de IU, del ala del PCE, pero en IU. Luego en 2015 se presentó con En Marea, que era una coalición gallega que aglutinó varios partidos, entre ellos tanto IU como Podemos. De ahí dio la evolución lógica a Unidas Podemos y su ascenso hasta ser ministra y vicepresidenta mal que le pese de la mano de Pablo Iglesias. Sin Unidas Podemos Díaz no estaría donde está con Sumar. Eso no le quita méritos a ella, por supuesto, bien merecidos, pero no se corresponde con algunas de las cosas que prefiere destacar ella de méritos únicos. Repito: ¿es que antes de 2015 estábamos todos votando en masa a IU o al PCE en concreto y en solitario? La humildad bien sana es en su justa dosis, pues tampoco es buena en exceso. Esto no quiere decir que Unidas Podemos sea la panacea y se le dé la razón a las ministras que no repetirán cargo en la nueva legislatura. Yo ya lo dije en un análisis anterior de este año, aunque hubieran hecho las mejores de las leyes, en política si quieres mantener tus políticas no vale sólo con eso, tus representantes además deben ser aceptados por sus actos y sus comentarios por la ciudadanía, y está claro que aunque hubiera sido la más acertadísima de las ministras, hay una ministra al menos de Unidas Podemos que más que sumar, restaba a la hora de recabar los apoyos que necesitan para recibir la confianza de la gente en las urnas. Faltó en ese caso un poco de humildad cuando la ciudadanía percibía que su ley estrella era un problema, fuese esa percepción acertada o equivocada, la gente lo vivía así. Por otro lado otra de las ministras levantaba recelos entre otros intermediarios políticos, lo que entorpecía numerosas negociaciones. Y esto va de democracia, por tanto no de egos. Y con esto no digo que se deba expulsar a Unidas Podemos de los cargos que proponga Sumar, pues Unidas Podemos sigue siendo un componente importante de entre los que votaron a Sumar. Repito, ¿o es que todos los votantes de Sumar eran la antigua IU? No, no lo son. De todos modos, Unidas Podemos recogen lo que sembraron, hubo un exceso de procesos internos sospechosos entre su militancia para quedarse sólo con los más afines a la cúpula, no de otro modo nacieron Más País, Más Madrid y otros, a la par que otras izquierdas no terminaron de casarse con Podemos del todo con total compromiso. Tampoco Unidas Podemos puede reclamar todo el espacio para sí.  

En parte no es algo nuevo. En el mismo momento del nacimiento de los socialismos entre el siglo XIX y el XX básicamente las divisiones más básicas, valga la redundancia, está en tres formas de entender el mismo para llevar a cabo una sociedad más justa: la que considera que lo importante es tener las ideas claras y por tanto apostar por el asociacionismo, lo importante es el objetivo común pero sin desatender a cada individuo y lo que pueda aportar, suele tener carácter confederal; la que considera que ese objetivo sólo es posible mediante la organización de un partido político (que no tanto un sindicato, pues el sindicato pertenece más a la primera forma dicho asociacionismo), esta forma con ese partido opta por participar de las instituciones del Estado, por lo que el partido suele ser federal, llegando al punto que a menudo se confunde ponerle más importancia al partido que a las personas asociadas en él; la forma que estando ya asentada en la idea del partido, asocia que el partido y el Estado se identifiquen y, más allá, incluso que el líder en el partido es el partido mismo y por tanto el que marca las ideas del partido, no tanto los asociados en él, aunque estos voten de manera federada, la discrepancia con el líder puede crear expulsiones hasta del partido, esta última forma se asemeja a formas políticas no necesariamente socialistas, desde las monárquicas a las burguesas, las tecnócratas y las fascistas, incluso las formas jerárquicas religiosas.  

Sea como sea, es evidente que si queremos seguir avanzando en políticas sociales y laborales no quedaba otra que apoyar la actual coalición de gobierno, aún cuando esta necesite del apoyo de todo el conjunto de otras fuerzas políticas de izquierdas y democristianas que representan los regionalismos y los nacionalismos en España, de todos modos cuanta mayor representatividad mejor quedarán representados el mayor número de intereses del mayor número de españoles. La otra opción liderada por los democristianos y liberales del Partido Popular (PP) se ha escorado tanto y se ha atado tanto a la extrema derecha de Vox que hace pensar en un peligro real incluso para la integridad de las personas que no piensan igual a ellos. No obstante, desde las elecciones municipales y autonómicas de este año ahí quedan sus gestos y sus medidas contrarios en muchos sitios a la lucha contra la violencia de género, como la retirada de los puntos violetas en muchas ferias y fiestas, contrarios a las leyes de igualdad de género sexual y también por los derechos homosexuales, ahí está la medida que Díaz Ayuso tomaba en Madrid contra esto mismo, contrarios a la libertad de expresión mediante el regreso de la censura en producciones y expresiones artísticas, pero también en medios de comunicación, los ataques a políticas ecologistas, los ataques a los servicios públicos negando con la boca que eso sea real pero tomando decisiones que efectivamente los debilitan, o el alineamiento e identificación con una gran patronal y con la Iglesia en sus posturas más extremadamente políticas y conservadoras. 

Ni que decir tiene que las manifestaciones de cerca de dos semanas venidas en violencias nocturnas frente a las calles con sedes del PSOE son puras alegorías a una dictadura de corte fascista. El PP se comporta tibiamente con esto, cuando no da alas, y eso envalentona a la ultraderecha que apoya un Vox que acusa de dictadura al gobierno legítimo elegido siguiendo las normas democráticas de nuestra Constitución.  

Banderas de España con el escudo monárquico recortado, banderas de España con el escudo de Franco, banderas del Imperio Español en tiempo de los Austrias, cánticos fascistas, vivas a Franco, saludos fascistas, insultos a Pedro Sánchez, al PSOE y a todo lo que sea izquierda y nacionalismos catalán y vasco, insultos al Rey, insultos a la Constitución (que también se han dicho), insultos a la policía que no les ha dejado hacer… aunque seamos serios, en manifestaciones de izquierdas la policía se suele explayar más disolviendo a golpes, aquí, por mucho disturbio que se ha visto es poco en comparación con lo que hemos vivido los de izquierdas pacíficos. Apoyarte en una valla en el 15M ya era recibir dos ostias, aquí las han movido hasta la saciedad y la policía como si nada. Es más, en telediarios hemos visto gente tirando bengalas encendidas a la policía y la policía quieta, en el 15M eso hubiera sido habernos masacrado… incluso en las protestas violentas del proceso independentista catalán por menos la policía se dejó los brazos a ostia limpia. Ahora bien, estos manifestantes de extrema derecha han recibido ostias y ya creen que se ha sido duro con ellos… claro que han tenido que intervenir los antidisturbios, pero cuidado que todo habría que mirarlo con detenimiento y comparando, no olvidemos que cuando después de las elecciones se publican lo que ha votado cada barrio, que eso no es estadística, son datos reales directos, resulta que los barrios donde residen militares y guardias civiles tienen máximos de votos a Vox… que es el partido que está apoyando todo esto. No olvidemos tampoco esos guardia civiles expedientados por decir que están dispuestos a derramar sangre en sentido de apoyo a esta idea de España que tienen estos manifestantes. Tampoco olvidemos aquella lista de gente de izquierdas a matar que se hizo pública en prensa de un grupo de conversación entre personas de los cuerpos de seguridad del Estado. Sí, dado lo delicado de todo, quizá habría que mirar con cuidado cómo está el sentir en policía, guardia civil y Ejército, en previsión de posibles complots. Pensemos que el último intento de golpe de Estado no fue en 1981, fue en 1985, se desarticuló antes de comenzar precisamente porque les controlaron en secreto los servicios de inteligencia de la época.  

No tranquiliza tampoco la postura de los obispos desde los púlpitos, salvo el más conciliador de Madrid, ni que los grandes empresarios de la CEOE entren en tromba en política haciendo como que ellos no son responsables de nada, cuando si ellos hacen sus negocios con normalidad y siguen sus políticas de empleo con normalidad no contribuirán a un malestar social mayor. La CEOE puede llegar a ser responsable del enrarecimiento de España o del apaciguamiento de los ánimos. En un principio parece que quieren intervenir en política alterando la economía a juzgar por sus actos contrarios al gobierno conformado. 

En cuanto a los ataques al Rey, la extrema derecha más pura no es monárquica, a pesar de que en España haya un cacao mental tras el gobierno de Franco. Ni Primo de Rivera era monárquico. De hecho Franco optó por la monarquía en 1947 sólo para intentar simpatizar con las potencias europeas occidentales y Estados Unidos y ante las conversaciones de don Juan de Borbón con el PSOE. Franco no confiaba en los Borbones, a los que culpaba de la Segunda República por haber malogrado su reinado Alfonso XIII. Cuando las cosas se ponen feas para los monárquicos, por mucho que siempre se apoyan en las derechas y el catolicismo y todo esto, cuando todo se pone muy feo, llaman en ayuda a la izquierda, que por cierto, acudió cuando Fernando VII en las últimas les necesitó a pesar de haberles represaliado. Dieron su sangre frente a los carlistas por Isabel II. Evidentemente las izquierdas evolucionan y se dividen. Pero con la Segunda República, a pesar de las represiones, fueron las izquierdas más a las izquierdas las que acudieron al rescate y ayudaron hombro con hombro a los mismos policías y militares que les represaliaron cuando en 1936 estos lo necesitaron. En 1947 ya hemos hablado de don Juan de Borbón frente a Franco. Y ahí estuvimos en la Transición y en 1981 con el intento de golpe de Estado fallido cuando Juan Carlos I lo necesitó frente a la extrema derecha. A ver si ahora, esta policía que nos pegaba el 15M y en otras va a tener que darnos las gracias junto a  Felipe VI si todo se va de madre. Con esto lo que hay que entender que aquí nadie es más y nadie es menos, y que esta estigmatización a la izquierda que ha llevado a la pervivencia perpetua de la extrema derecha y de la derecha más faltona debe acabar. Debe haber un reconocimiento de legitimidad. Debe acabar el repartirse carnets de quien es y quien no es español o como dijo Feijoo, líder del PP, “personas de bien”.  

También es un error que desde la aprobación de las reformas educativas que crearon y dieron cuerpo a la Educación Secundaria Obligatoria y reformas universitarias se haya potenciado los estudios basados en la economía y en lo más netamente técnico y científico, olvidando los humanismos que forman a las personas. Inútil es explicarle que la bandera imperial española de los Austrias, a pesar de que Franco reivindicó el pasado imperial español, representa una forma de política polisinodial donde además no existía el concepto España (que es Borbón) sino Reino Hispánico, compuesto por varios reinos, cada uno con sus propios fueros, consejos, parlamentos, economías, lenguas, tropas, etcétera… Esa política de autonomías y nacionalismos que critican en la coalición y tratos de PSOE con Junts está más cerca de esa bandera que lejos.  

En cuanto al uso de frases como la de Ayuso (“devolveremos golpe por golpe”) efectivamente recuerda a un verso de Machado, pero viene de un discurso de García Oliver, Ministro de Justicia por la CNT durante la guerra civil, mientras que la frase del joven que lleva una pancarta que dice “prefiero morir de pie que morir de rodillas”, efectivamente la usó Ernesto Che Guevara, Dolores Ibárruri y Emiliano Zapato, todo lo contrario políticamente a lo que él defiende, pero cuidado, porque puede que no se deba a una ignorancia total, que puede que algo de ello haya. Cuando la extrema derecha se hizo con el poder en Italia no hace mucho, uno de sus ideólogos alentó al resto de partidos de extrema derecha de Europa, entre ellos Vox, a apropiarse de las frases y las producciones culturales de la izquierda dándoles un uso que les conviniera a ellos, pues, en su razonamiento, funcionan mejor que lo que ellos han venido usando desde los años 1920. Así que yo me lo tomaría con seriedad. En ese campo la batalla sólo se puede dar de un modo: recuperando las humanidades y cultura, cultura, cultura. Luego que cada uno piense como quiera, pero que a la gente no le falte medios para pensar por sí misma. 

Sería útil democráticamente que el PP se haga valer como demócrata y se aleje con rotundidad de estas corrientes neofascistas. 

Por otro lado me cansa la gente que conozco de toda la vida, que sé no sólo no hablan de política, sino que además no saben ni de ellas ni de las instituciones ni de nada, porque es toda una vida conociéndonos, y estos días, alentados por el PP y la Iglesia se han lanzado a poner en sus redes sociales banderas de España y frases propias al prefascismo que me excluyen como español y como demócrata. Nada más antidemocrático y excluyente que todo ese uso de las banderas de España y la españolidad sólo si se piensa como ellos. Ojalá no llegue el día en que nos vuelvan a enterrar en cunetas desconocidas. 

Por lo demás, de la amnistía, ya hablé en la Noticia 2260ª, el arduo camino a la amnistía. Estoy a favor. Otra cosa es que tal como se ha pactado el nuevo gobierno pareciera en un principio que pueda haber ingobernabilidad o un gobierno en exceso complicado de acabar los cuatro años de legislatura. Junts debiera saber que ellos a cambio de la amnistía también deben dar algo, paz social, como mínimo, y saben muy bien cómo se logra eso. También ellos deben hacer sacrificios. No es que renuncien en lo que creen, pero sí que no fuercen con reincidencias peligrosas… las calles ya están demasiado peligrosas. 

Saludos y que la cerveza os acompañe. 


viernes, noviembre 17, 2023

NOTICIA 2270ª DESDE EL BAR: PRIMERO PALESTINA

 Antes de los acontecimientos por los que una fruta exótica ha podido extender su olor a fruta pasada en la Asamblea de Madrid en las últimas semanas, los noticiarios de todo tipo de medios hablaban en España a tiempo completo (con permiso de los extensos espacios dedicados al deporte) de la actual guerra que sostiene el Estado de Israel contra la organización terrorista Hamas en el territorio palestino de Gaza y ataques (especialmente por parte de colonos ilegales de origen judío ortodoxo) en varios puntos de Cisjordania, incluidos campos de refugiados. Se quejaban los periodistas después de una semana o semana y media de matanzas de que la gente se había olvidado de la guerra de Ucrania. Me pareció aquello de un cinismo y una hipocresía sublime. Me lo pareció porque los que eligen las noticias, los espacios que dedican, los enfoques, de lo que se habla y de lo que no se habla son ellos, los periodistas, pero sobre todo los dueños de los medios de comunicación y los directores respectivos de cada medio y de cada sección de noticias de ese medio. No somos nosotros los que tenemos los medios, son ellos. Y ellos decidieron hablar solo de la guerra en Gaza, por lo que está feo afear a su auditorio que no se hable de Ucrania. Si quien habla eres tú, no puedes afear al que oye que no hable de tal o cual, si quien habla sólo eres tú y tú, solamente tú, eliges el tema a hablar. 

Yo, hablando por mí, nunca me he desentendido de nada de todo esto. Lo he venido siguiendo al detalle cada día. De hecho recomiendo la lectura de la versión británica de The Guardian, que sigue ambas guerras día a día con todo detalle y análisis. Por supuesto, siempre complementando con otros periódicos de diferentes países, también en España. 

La guerra en Ucrania está estancada. Todos los medios militares que se le proporcionó a Ucrania por parte internacional no han dado los resultados esperados. La cuestión es que la contraofensiva ucraniana tardó tanto en darse, precisamente por el enorme retraso en la decisión europea y norteamericana en proporcionarle armamento y vehículos, que los rusos tuvieron tiempo más que de sobra en construir toda una fortificación en los límites del territorio que controlaban que no se había visto, sin exagerar, desde los tiempos de la línea Maginot en la Primera Guerra Mundial (1914-1918). Que al comienzo de la contraofensiva una de las dos partes, posiblemente la rusa, hiciera reventar una presa de agua que impidió e impide a Ucrania avanzar hacia Crimea por la parte occidental del frente y a la vez le permitió a los rusos concentrar tropas en la parte oriental fue otro elemento. Además Rusia ha recibido también ayuda de armamento se cree que tal vez de Corea del Norte y de Irán. Rusia se ve beneficiada ahora de la guerra en Gaza, no sólo porque a Estados Unidos se le abre un segundo frente de ayuda militar, a Israel, sino también porque a la Unión Europea y a la OTAN se le abre un segundo foco de poner atención en un por si acaso por una parte y por otra por lo humanitario. Tampoco hay que ignorar que dependiendo de si los aliados muestran más o menos atención a una u otra parte hace que se corra el riesgo de que los países árabes productores de petróleo puedan enfadarse y aliarse con Rusia (de ahí que Estados Unidos haya empezado una normalización de relaciones con Venezuela), o bien que si se condena a Israel este dé un giro y a morro torcido acepte ayuda rusa, siendo que Israel también tiene armas nucleares, o eso se cree, a pesar de que los tratados internacionales le impedía tenerlas, se saltó la ley si las tiene.  

Como sea, dicen los medios británicos que los rusos han acumulado ochocientos misiles en el sur de Ucrania para una ofensiva de invierno, mientras los ucranianos siguen intentando avanzar hacia el Mar Negro para romper en dos el territorio ruso. Lo único cierto es que como en la Primera Guerra Mundial, en esta guerra de trincheras, búnqueres, minas y demás apenas se avanzan unos metros, que luego se pierden y luego se avanzan y así una y otra vez, costando un enorme número de vidas humanas tanto de combatientes como de civiles, pues los bombardeos sobre poblaciones continúan. De hecho, mientras el mundo mira a Palestina, en Ucrania se están viviendo los momentos del mayor número de muertes desde el comienzo de la guerra el año pasado.  

Pero mientras en el mundo internacional se ha condenado y sancionado a Rusia y a gran número de sus dirigentes, líderes, militares y empresarios por saltarse las leyes internacionales y cometer lo que se ha considerado crímenes contra la humanidad, no ha ocurrido así con Israel, a pesar de que el gobierno de Netanyahu también está saltándose las leyes internacionales sobre la guerra y los derechos humanos. Mientras Putin es reclamado por los tribunales internacionales, Netanyahu no, a pesar de que algún país y algún político lo ha reclamado.  

Todo empezó el 7 de octubre, como es más que conocido, cuando un atentado detestable del grupo terrorista palestino Hamas, que yo también condeno, se planeó a modo de asalto bélico a un kibutz israelí. Un kibutz, a modo amplio, es una especie de colonia de judíos ortodoxos en Israel con una organización comunal acorde al Estado y a la religión, pero muy asociativo. En ese kibutz además se celebraba un festival de música electrónica. Hamas planeó el asalto a las puertas de un campo de presos palestinos donde se dice que se producen torturas. En ese asalto, como crimen contra la humanidad también, se mató a familias inocentes, a personas desarmadas, a sus mascotas, a gente común que iba en coche, que estaba en su casa, a los y las jóvenes que estaban en el festival de carácter pacifista, alguno de ellos activistas por la paz, y secuestraron a unas doscientas personas, una parte liberadas, otra asesinada y otra aún raptada. Murieron más de mil cuatrocientas personas. 

 El gobierno de Netanyahu, un ultraortodoxo judío, el equivalente de la ultraderecha en Europa, el cual gobierna Israel desde 2009, cuyo ascenso político tomó fuerza a partir del asesinato del presidente progresista favorable a la paz Isaac Rabin en 1995, a manos de su guardaespaldas que era ultraortodoxo, reaccionó primero convocando un gobierno de unidad nacional incluso con sus oponentes políticos israelíes. A continuación decidió sitiar la franja de Gaza entera y a advertir al norte de la misma que los civiles se fueran al sur a la vez que inició una serie de bombardeos infatigables durante dos semanas que superaron en lanzamientos de misiles a todos los lanzados en Ucrania un año entero de guerra… lo que en un reducido territorio ha provocado una cantidad de muerte y destrucción nunca visto desde los peores momentos de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Mientras la comunidad internacional no se decidía a condenarle, por lo ya citado, alguna voz sí se atrevió a condenar lo que estaba ocurriendo por ser una reacción desproporcionada y deshumanizada, con tintes posiblemente xenófobos contra los palestinos. Una de esas voces fue Antonio Guterres, como representante de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que acusó de criminal de guerra a Netanyahu… no obstante se bombardea campos de refugiados, hospitales, colegios, viviendas de civiles, mercados, se ha cortado el agua, la electricidad, la comida, las medicinas, los medios de comunicación, etcétera… aunque tardíamente se ha dejado entrar de manera anecdótica pero necesaria unos muy insuficientes camiones con ayuda humanitaria. Mueren niños, recién nacidos, mujeres, ancianos, civiles inocentes adultos y jóvenes, etcétera. A fecha de hoy, 17 de noviembre, se calcula unos once mil muertos palestinos y subiendo. Sobre todo después de que dos semanas más tarde del ataque de Hamas, entrara el ejército israelí en Gaza dividiéndola en dos y combatiendo escombro por escombro de lo que queda de las casas, con la excusa de que la gente de Hamas esconde sus armas en los hospitales y colegios, para lo cual enseñan imágenes donde aparentemente el ejército israelí descubre esas armas. Aparentemente, pues no dejan entrar a ningún testigo internacional, a nadie de la ONU ni de la organizaciones de derechos humanos. Así pues, puede ser real o pueden ser montajes, sin negar y sin dejar de condenar la existencia de Hamas y su violencia. 

Antonio Guterres fue acusado de antisemita y se le ha prohibido entrar en Israel. También han sido acusadas de lo mismo varias políticas españolas. Pero en la actual investidura como presidente de gobierno de España, ayer, varios grupos políticos españoles ya han comenzado a hablar de Netanyahu como criminal de guerra y piden que se le aplique las mismas sanciones que a Putin. La baza de acusar de antisemita a todo aquel contrario a las políticas de extrema derecha del gobierno actual de Israel es ya un clásico… y una falsedad. Nada hay contra los judíos, absolutamente nada. Sí lo hay contra los crímenes contra la humanidad, que en este caso se producen en la actual ofensiva militar israelí en Gaza. No tiene que ver con el mundo judío, aunque por fuerza una parte está implicado, sino que tiene que ver con un modo de entender cómo se ha de hacer esta guerra y unas políticas de extrema derecha que vienen ya de lejos. 

En Israel el gobierno de Netanyahu estaba comenzando a ser contestado en las calles y cada vez tenía menos apoyos desde que desde el año pasado, y en concreto desde enero de este 2023, se pretendía llevar a cabo una reforma constitucional que prácticamente dejaba el poder judicial en manos del ejecutivo, o sea de Netanyahu, dándole una impunidad casi total a todas sus acciones. Las manifestaciones eran multitudinarias en Tel-Aviv. Ahora hay descontento por parte de los israelíes que perciben que el gobierno no supo defenderles de Hamas, pero habrá que ver si sale o no reforzado después de esta guerra en Gaza, pues la prensa israelí crítica contra los crímenes contra la humanidad en Gaza han sido censurados. 

A un crimen contra la humanidad no se le puede, no se le debe, combatir con mil más. Es amoral y es una salvajada. A pesar de que Estados Unidos justificó a Israel en su derecho a defenderse, hay que recordar que eso es una rémora de sus propias acciones tras los ataques a New York en 2001 por parte de Al-Qaeda. Abrió una nueva etapa en la política internacional al margen de la ONU y pendiente de lo unilateral con la excusa de la defensa, legítima o no. Israel ya entonces usó de aquello en 2006. De hecho, este mismo año 2023 Israel ya había atacado un campo de refugiados en Cisjordania, en Jenin, donde murieron niños, con la excusa del terrorismo, meses antes de que ocurriera el más que condenable y detestable ataque de Hamas el pasado mes de octubre. Sea como sea, esa política de la defensa fue seguida tras 2001 por varios países, no sólo por Estados Unidos e Israel, también por Rusia, Marruecos, China y otros. 

El gobierno Netanyahu planea ya no tanto eliminar a Hamas y ya estaría, tampoco dividir Gaza en contra de la ONU, sino administrar Gaza en contra de la ONU y de los acuerdos internacionales de los dos Estados, Palestina-Israel, de los cuales España ha sido siempre firme defensor como solución pacífica. Hay que recordar que las primeras conversaciones de paz solidas entre israelíes y palestinos después de aquellas de Camp Davis (Estados Unidos) en 1979 son las de Madrid en 1991, con Arafat y Rabin, y con Felipe González de anfitrión. Hay que fijarse que los dos asesinatos, el de Rabin primero y el de Arafat después, han beneficiado en la prolongación de su gobierno a Netanyahu.  

Así está el mundo ahora mismo. El mundo musulmán además tiene la dicotomía de ver como sus líderes políticos no terminan de condenar del todo a Israel en su desproporción a la hora de responder al brutal y condenable atentado de Hamas, pero a la vez los ciudadanos de esos países apoyan en las calles de manera rotunda a los palestinos. Sólo Jordania se ha atrevido a saltarse el bloqueo israelí lanzando desde avión ayuda humanitaria a los gazatíes. Supongo que contaron con visto bueno de Estados Unidos, con un buque de guerra en la zona, por tanto con visto bueno, mal que le pese, de Netanyahu, que ha hecho grabar por la prensa internacional como sus soldados llevan incubadoras para nacidos prematuros… cuando ya han muerto la mayor parte de ellos desde el comienzo de los ataques. 

Por otro lado, las conversaciones esta semana de Estados Unidos con China han tratado de Oriente Próximo, tampoco a China le conviene problemas ahí ni que se extiendan a Irán o Líbano… no conviene problemas con los productores de petróleo.  

De lo que está ocurriendo en Ucrania en campo europeo y en Israel-Palestina en campo de Oriente Próximo vendrá la configuración del mundo inmediatamente futuro en este siglo XXI y comienzos del XXII en cuanto se resuelvan. 

Entre tanto la gente muere bajo bombas y balas… y por hambre y falta de medicamentos. Ojalá pronto sea la paz.  

Saludos y que la cerveza os acompañe. 

martes, noviembre 14, 2023

NOTICIA 2269ª DESDE EL BAR: ¿POR QUÉ LOS BEATLES? (anexo 5)

Como beatlemaniaco quedaba claro que debía completar el serial donde hablaba de la Historia y analizaba a los Beatles. Al igual que en octubre os contaba que nada más salir del trabajo compré el nuevo álbum de The Rolling Stones, Hackney Diamond, ¿cómo no iba a estar atento también a comprar el nuevo de The Beatles? Llevo meses atento a su creación. A principios de año hablaron de ello en la prensa británica, en verano llegó a mencionarse de pasada en España, fue en otoño cuando los británicos se explayaron y España se hizo de nuevas, siempre envuelto en la polémica. Encargué el single en preventa y lo he podido comprar por 10'40 euros, lo que es caro para un single, pero no si tenemos en cuenta que ya en venta normal hay desde quien lo vende por 15 euros a los que lo hacen por 21 euros, a pesar de que ahora, por las rebajas del Black Friday se puede encontrar por 7 euros. De todos modos el nuevo disco de The Beatles está muy rentabilizado, pues ha sido editado en CD, en versiones digitales para ordenador (MP3 y otras), en cassette y en vinilos de diferentes gramajes y colores que ascienden algunos su precio hasta los 80 euros por su exclusividad material, que no por su diferencia musical respecto a los otros. Toda una jugada económica de la mano principalmente de Paul McCartney, aunque con la complicidad necesaria de Ringo Starr y de los herederos de Lennon y Harrison.

El 3 de noviembre de este 2023 los Beatles sacaron una canción nueva, Now and Then, la cual es la cara A del single, mientras que la cara B pasa a ser la que fue la primera canción que publicaron con éxito, Love me do, de 1962, con lo que unen en un single el principio (ya sabemos que antes de famosos ya habían publicado otros singles en Alemania que se vendieron en Reino Unido) y el supuesto fin. La polémica viene porque supuestamente se ha usado inteligencia artificial para reproducir la voz de John Lennon allá donde faltaba.  

Según McCartney y Starr ellos no han creado la voz de Lennon, la han extraído con inteligencia artificial de una grabación que incluía un piano tocado por Lennon. La han limpiado y han hecho que suenen todas las partes con buena audición y dicción con ayuda de esa inteligencia artificial que ahora permite hacerlo. Luego McCartney grabó de nuevo el piano e incluyó el bajo, Starr la percusión y añadieron una grabación de guitarra que tenían de Harrison. Los más expertos dicen que si hubieran recreado partes de voz sería muy difícil de distinguir, aunque hay partes que les recuerda la voz de uno de los hijos de Lennon. En una primera audición la canción no parece aportar mucho ni ser lo más llamativo de ellos, sólo que una vez más son pioneros musicales en algo, en el uso de inteligencia artificial logrando reunir otra vez a la banda, incluso a los dos muertos. Pero logrado entre polémicas por lo de la voz de Lennon y la guitarra de Harrison. 

La grabación era en realidad una maqueta en cinta magnética (cassette) que Lennon grabó en la década de 1970 y que guardó con la frase "Para Paul" en la caja. Lennon nunca se la entregó a Paul. Para los más dados a lo meloso, se trataría de una reconciliación entre los dos, pero lo cierto es que la realidad es que jamás se reconciliaron, al menos no como para tal regalo. De hecho, jamás se la dio. Lo más probable es que se tratara de una maqueta de Lennon justo cuando llegaron a tener una mínima probabilidad de volver a juntar a los Beatles, cosa que no ocurrió. Como sea, esa y otras muchas maquetas las guardó Yoko Ono, que ha ido publicando algunas en ediciones especiales de álbumes de Lennon, pero su contribución a la creación de nuevas canciones de The Beatles fue en 1995-1996. Yoko Ono entregó tres maquetas a McCartney, Starr y Harrison con las cuales compusieron junto a la voz y composiciones de John Lennon "Free as a bird", publicada en Anthology 1 y "Real love", publicada en Anthology 2. Eran canciones con mucho gancho con un sonido intermedio entre el final de la década de 1960 y aquellos años 1990, aunque eran voces y piano de los 1970. Lograron recuperar toda una corriente de brit-pop y de grupos de aquellas décadas; sin embargo, aunque parezca mentira, Free as a bird lo más alto que llegó en las listas de éxito fue al número 2 en Reino Unido en 1995, mientras que Real love llegó al puesto número 4 en 1996, a pesar de que son canciones ampliamente escuchadas en todo el mundo. Como sea, el Anthology 3 no tenía una canción nueva. Esa canción nueva iba a ser esta Now and then. George Harrison llegó a grabar una guitarra para ese tema, pero la calidad del sonido de la voz y el piano de Lennon era muy mala, y por otro lado era una balada que no le gustaba, tras declarar que era una mierda, negó su permiso para que se incluyera. Pensemos además que probablemente no le gustaron los resultados de éxito de las otras dos entregas y que además George Martin le impidió grabar una guitarra porque deseaba darle más protagonismo a Lennon, algo que le hizo recordar todo su malestar dentro de The Beatles cuando fue ninguneado por Lennon y McCartney entre 1968 y 1970. Así pues, el tema durmió el sueño de los justos mientras se publicaban  copias piratas y versiones sin saberse muy bien de dónde salieron.

Por el camino murió Harrison y también George Martin... y se creó y perfeccionó la tecnología de la inteligencia artificial que permite tanto reproducidos sonidos como voces, como extraer y limpiar la voz de Lennon de la grabación con el piano... Y se hizo con el liderazgo de McCartney, que se puso a la producción junto con el hijo de George Martin, Giles. Así que es una nueva canción de los Beatles, ya que todos han aportado algo, aún contando con lo polémico de que dos de ellos están muertos. Sea como sea, el videoclip que acompaña el single es altamente emotivo reuniendo a los dos Beatles vivos con los dos muertos e incluso mezclando unas épocas con otras.

Aunque el título no es novedoso, lo usaron The Carpenters en un álbum de 1973 y se asemeja a un recopilatorio de The Who con un tema nuevo en 2004, aquel fue Then and now, tendieron a la sencillez de la portada con una escala de azules y grises y el título en diagonal. El nombre de The Beatles sólo aparece en la contraportada, en una especie de campanario construido con metros, botones, una ficha de dominó y otros objetos que pueden dar pie a diversas interpretaciones.

Al principio no me pareció lo mejor. Tras escucharlo varias veces y conocer la traducción de la letra, entiendo que se trata de un sentimiento emotivo y melancólico de alguien que echa de menos la presencia de otra persona a la que quiso mucho o pasó un buen pasado y cuyos momentos jamás se podrán repetir porque es imposible la reunión. Es un total mensaje de cariño que se puede interpretar de recuerdo hacia aquellas personas que se murieron en tu vida, siendo queridas, ya sea la muerte real o una muerte por final total de las relaciones imposibles de recuperar aunque quede un buen poso. De hecho, cuando la escucho desde que me dieron el disco (merece la pena  oírlo en cadena musical) me hace pensar en mis padres, abuelos, tío y algunas amistades que se quedaron en el camino. Tienen un algo melancólico muy potente, pero con un algo positivo y a la vez triste raro que te atrae. No sabría decir que es, pero lo tiene tras pasar la primera escucha y conocer la letra.

La canción no sólo ha sido editada en single, también la han editado en la reedición de los álbumes recopilatorios 1962-1966 y 1967-1970 conocidos popularmente como los álbumes dobles rojo y azul. Estos álbumes se editaron por primera vez en 1973 en vinilo y fueron reeditados ya en CD y cassette en 1993-1994 con la idea de recuperar a The Beatles para las nuevas generaciones e ir preparando el panorama para lo que venía nuevo con los Anthology. Básicamente contenía una selección de grandes éxitos, pero sin caer en la parte ni más dura ni más rockera. Ahora los reeditan con este Now and then al final y ampliando la lista de canciones con canciones más de rock and roll clásico en el rojo y con más psicodelia en el azul. Están remasterizadas por Giles Martin, de hecho el Love me do del single viene de aquí. Ahora bien, los han puesto a treinta y algo euros cada uno... En todo caso se nota que saben que las nuevas generaciones buscan más rock duro, más bailable y más experimental y eso buscan.

Pero seamos serios, ya que el tema está completo, haberlo devuelto al Anthology 3, o bien rescatar otras grabaciones que se saben que existen y darles el mismo tratamiento para sacar un álbum completo nuevo tampoco hubiera estado mal si fuera posible. 

En todo caso, hubiera sido más lógico la reedición del álbum 1, sacado en 2000, que compilaba los veintisiete singles que llegaron a ser número 1 en las listas de éxitos, ya que Now and then, ahora sí desde 1970, ha vuelto a ser un número 1 en apenas una semana... y esta vez, como beatlemaniaco, me siento parte de ello.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

Todo el resto del serial ¿Por qué los Beatles?:   Parte 1, Parte 2, Parte 3, Parte 4, Parte 5, Parte 6, Parte 7, Parte 8, Parte 9, Parte 10, Parte 11Parte 12, Parte 13, Parte 14, Parte 15, Parte 16, Parte 17 (apéndice), Parte 18 (anexo), Parte 19 (anexo 2), Parte 20 (anexo 3) y Parte 21 (anexo 4).

domingo, noviembre 12, 2023

NOTICIA 2268ª DESDE EL BAR: ALCINE 52 FINISHED

Alcine 52 ha terminado hoy, aunque Alcine como Alcine no festival competitivo tiene aíun programadas sesiones de proyecciones de largometrajes más adelante. Como sea, por aquí podéis consultar el Palmarés. Quepa decir que en Pantalla Abierta ha ganado Matria (Álvaro Gago Díaz, 2023), lo que me parece razonable. Está bien.

Como cada año he ido hoy al concierto de clausura que ofrece la Orquesta Ciudad de Alcalá (OCA), con bandas sonoras. Este año es algo un tanto especial, porque han hecho algo que no suele ocurrir, proyectar un mediometraje documental dirigido por Fernando Vera en 2022 y llamado Vivir girando, que reconstruye la vida de Domingo Belled, nacido en 1933 de padre holandés y madre española, el cual se formó como músico desde niño en una iglesia y que emprendió desde entonces una serie de conciertos de piano y órgano que le llevó a tocar por las cafeterías y salas de Zaragoza, Madrid, otros lugares de España, Tánger con Charles Aznavour, ser parte de la orquesta que tocó en las primeras emisiones de televisión española en 1956, de ahí a girar por diez países europeos y tras eso establecerse en Países Bajos, donde formó una familia, se hizo profesor de música, colaboró en otros conciertos, fomentó los sonidos españoles de jazz, intervino en la televisión  holandesa, recibió la medalla Orange-Nassau de manos de la reina holandesa (es el segundo español en tenerla), allí se encontró con Vicente Ariño, director de la OCA y ayudó a esta a tener conciertos internacionales y les compuso e hizo arreglos musicales, y ya muy anciano decidió regresar a España nonagenario para poder establecerse aquí, cosa que no sólo logró con ayuda de los servicios sociales, sino que además le acogió una cafetería de Zaragoza para poder tocar de fondo los fines de semana junto a otros músicos amigos suyos de su pasado. Un documental que repasó así una vida muy desconocida, pero interesante. Lástima que algunos espectadores decidieran salir de la sala a mitad de proyección porque ello sólo querían el concierto. 

El concierto de hecho duró unos treinta a cuarenta minutos. Se trató de la Suite Dansant, compuesta por Domingo Belled en 2006 para la OCA, con arreglos sobre temas musicales de compositores cuyos temas han aparecido en múltiples películas clásicas, como Gershwin, Glenn Miller, Bargoni y Wunderlich. Así que había mucho sonido de jazz de big band tocado en sinfónico. Como propina se tocó "Mi linda cumbia cumbia", compuesta por Domingo Belled en su etapa de giras europeas, con algunas tonalidades de samba y cuyo sonido nos permite identificar un estilo muy propio de las décadas de 1950 ó 1960 mil veces escuchado en películas y en viejas grabaciones musicales.

Un broche de oro muy digno. Fue un buen concierto. Además, nos hace pensar en lo mucho que desconocemos las biografías de las demás personas y tendemos a dar por sentado cosas que no son. Ese señor, por ejemplo, hubiera pasado por un anciano más, desorientado, cuando llegó a los servicios sociales de Zaragoza pidiendo ayuda. Quiso la suerte que alguien comprobara su historia y viera que todo era real. Pero ¿cuantas personas habrá de las que ignoramos lo que hay en su vida?

Saludos y que la cerveza os acompañe.

viernes, noviembre 10, 2023

NOTICIA 2267ª DESDE EL BAR: LO DE ALCINE, PANTALLA ABIERTA

 Y ahora que hemos llegado a la etapa final de la competición en Alcine, os cuento mi punto de vista de lo visto en Pantalla Abierta a Nuevos Realizadores.

20000 especies de abejas (Estíbaliz Urresola, 2023): Es una de las películas preseleccionadas por España para enviarla junto a otras dos como candidata a los premios Oscar de Hollywood a mejor película extranjera. También es una película donde he visto en un público abarrotado en el Teatro Salón Cervantes un montón de consultas de la hora en las pantallas de los teléfonos móviles. Se iluminan. A la salida, de refilón, algún comentario sobre lo largo que se le había hecho el metraje. No es buena señal. ¿Puede ser que sea otra de esas películas que entusiasman a los críticos profesionales y a los cineastas, pero están totalmente divorciadas del público? Puede ser. Se puede dar el caso, aunque intuyo que habrá más de una persona seguidora de la película más por militancia en lo que cuenta la trama, que por el metraje en sí, aunque se niegue la mayor... que de todo habrá, igual que habrá por parte gubernamental un apoyo incondicional más por políticas sociales suyas que por valoraciones artísticas del cine. Puede ser. A mí personalmente me pareció un largometraje excesivamente largo, que se recrea en numerosas cosas alargando los minutos innecesariamente, que algunas de las cosas las deja sin resolver y no terminan de ayudar a ser un complemento para dibujar más la situación, que no aporta ideas nuevas a la idea que plantea, que tampoco es que sea ya algo no hablado ni tratado, que en fin, se podría haber resuelto en 90 minutos en lugar de en los 129 minutos que dura... más todavía cuando una vez terminada la trama aparecen las letras y de repente otra vez una escena extra que parece más un videoclip musical que algo que aporte algo a lo ya narrado. Técnicamente tampoco le ve nada destacable. Luces naturales, algunas escenas cámara en mano, no hay planos atrevidos, sí es verdad que se recrea en los planos medios cortos que nos muestran los rostros... Las interpretaciones tienen un poco de todo, desde un par de personajes que no son creíbles a otros que lo trabajan muy bien, como la niña actriz protagonista, como la tía del niño personaje, por ejemplo. Y digo niño protagonista porque hay que tener en cuenta que aunque lo interpreta una actriz, Sofía Otero, que lo hace muy bien, interpreta a un niño, Aitor-Coco-Lucía, el cual es un niño transexual que tiene un conflicto de identidad de género y evidentemente la película explora la psicología y el problema emocional que él tiene en un ambiente rural más conservador que no lo termina de aceptar, excepto otra niña y la tía del niño transexual, la cual es evidentemente lesbiana aunque no se mencione la palabra, como tampoco se menciona la de transexualidad. La cosa es que el guion se recrea también en los problemas matrimoniales, laborales y de seguridad de la madre, roza levemente un problema generacional con la abuela-madre de la madre, así como un problema matrimonial, roza el problema de la aceptación del propio cuerpo de la hermana adolescente, toca el tema del choque entre la mentalidad conservadora y la más abierta a nuevas libertades y derechos, roza un montón de cosas, no profundiza en nada, eso hace que se alargue la película sin necesidad, pues quiere ahondar en la intimidad mental del niño-niña, y esto hace que se pueda decir aquello de que quien mucho abarca, poco coge. Ese es su problema y es quizá nos hace preguntarnos si el éxito del largometraje está o no está en cuestiones de militancia por los derechos de igualdad en al identidad sexual y de política en políticas sociales, o en otras palabras, ¿está su éxito en cuestiones cinematográficas? Si lo está, yo no he sabido verlo. Me parece una película muy correcta, muy plana, muy larga... con algún acierto, y con algún desacierto del tipo el guion que sabe ver a una madre muy atenta a sus hijos, pero totalmente ignorante de la sexualidad evidente de Aitor-Coco-Lucía. Pero teniendo en cuenta que nadie menciona el lesbianismo de la tía, todo pueda ser que se insinúe que hay un tabú familiar y en el pueblo... Bueno... hace que parte del trabajo lo hagas tú, no tanto los que hacen la película. Lo mejor de la película es la conversación a puerta cerrada entre sobrina y tía cuando la tía le comenta que su hijo se siente ser niña. Si uno se fija, recuerda una de aquellas escenas de conversaciones de la serie Verano azul, donde unas personas jóvenes con hijos hablan con la gente mayor del pueblo más marcada por su peculiaridad, pero que a la vez es la más positivamente abierta a un mundo nuevo y democrático que quiere y logra hacer ver a quien se resiste, todo dentro de un espacio rural veraniego que es ajeno a la vida urbana común de esa persona joven. ¿Podría ser un capítulo largo de Verano azul? Sí, pero muy excesivamente largo y sin tanto gancho como los guiones de aquella serie, salvo alguna cosa, como esa conversación o la búsqueda a gritos del niño-niña por el bosque, que por cierto, recuerda a otro capítulo conocido de Verano azul

La imatge permanent (Laura Ferrés, 2023): Siempre me parecerá curioso que haya algunos espectadores de Alcine que están encantados con películas en su idioma original, sea inglés, francés, alemán, japonés, húngaro o lo que caiga, subtitulado al español, pero que pongan una película en catalán (que por otra parte se entiende meridianamente bien, aunque también tiene subtítulos al español) y se quejen porque les parezca insufrible. Afortunadamente son los menos cada vez más, pero este año también escuché algún comentario de esas quejas a la salida del largometraje. Aunque esas personas nieguen la mayor, ahí hay un prejuicio. Y la cosa es que esta película estaba en español castellano y en catalán. No pudo venir su directora. Creo que Luis Buñuel estaría muy satisfecho con la idea y el guion de esta historia. Es un largometraje altamente surrealista, al menos en el diálogo de su guion. Fue rodada con bajo presupuesto. En cuestión de escenas, imágenes y montaje es surrealista en su primera parte, ubicada a mediados del siglo XX en una Cataluña rural para contarnos la niñez de Antonia, embarazada a los 12 años de edad. La segunda parte, en nuestros días de primer cuarto del siglo XXI, el diálogo sigue siendo surrealista, pero el montaje y las escenas ceden ese espacio a uno más estético, preocupado por la fotografía, para que sea algo muy equilibrado en composición, geometrías y colores. Sin embargo, la iluminación natural falla a veces en varias partes. El equilibrio es algo que se busca constantemente, también en la interpretación, sin estridencias… pero quizá pecó o bien de actrices y actores noveles, o bien de la forma como fueron dirigidos. Los diálogos no suenan naturales, se nota en exceso un algo acartonado y artificial de memorización forzada. Lo mejor de la película es la idea planteada desde un surrealismo mordaz que con inteligencia suelta frases que cuestionan lo convencional y el orden ético, moral y religioso. “La salud está en manos de Dios”, dice un sacerdote mientras fuma, el mismo que afirma que se puede creer en Dios y en el mercado. Pero un guion propio del Buñuel de la década de 1970, en su etapa francesa, queda seriamente tocado por lo artificial que resulta el conjunto final de la realización. En sentido de tragedia griega, una niña de la Cataluña rural más pobre de las épocas del nacionalcatolicismo queda embarazada, cuando ella sólo quería experimentar la libertad, la sexual en este caso. No le gusta la vida materna… y tampoco la vida llena de corsés, ella misma se siente sexualmente atraída por mujeres. Abandona a su hija y el pueblo sin decir nada a nadie, en una escena donde se decide tras consultar sin respuesta a una imagen de la Virgen fosforescente patrocinada por aspirinas Bayern. Décadas más tarde la encuentra en la calle Carmen, que es una publicista contratada para buscar caras comunes para una campaña electoral. Antonia tiene una vida dura, pero libre; Carmen se ve obligada a rescatarla de la calle para conseguir una grabación de ella, dentro de lo que es el choque de una vida convencional con otra de la calle. La directora nos lanzará varias evidencias de que son la madre y la hija, sin que ellas lo sepan, a la vez que se deja caer que tienen una atracción sexual mutua, o al menos por parte de una, de ahí la tragedia griega, con cierto sentido del humor y altas dosis de surrealismo. Los primeros planos y los planos medios cortos de frente de personas que nos miran directamente con miradas planas nos apelan a nosotros mismos. Lo mejor, los diálogos, pero lo peor, todo el conjunto fallido, que terminan malogrando todo. Pero estéticamente la directora tiene algo que se nota que puede prometer si continúa en el cine y contase con más medios. Pero su estilo inicial con esta película no es un estilo fácil para el público general.  

Antier noche (Alberto Martín Menacho, 2023): Fue presentada en los programas como documental, pero no era un documental. Aparte de su director, vinieron a ver su estreno en Alcine varios de sus responsables, entre ellos, una actriz nonagenaria. Podría tener un ritmo de documental, o de falso documental, de hecho en una escena un diálogo telefónico delata la naturalidad sin guion al oírse preguntar al otro lado del teléfono si quien le habla ha hecho ya “lo de la película”. Pero aunque se pueda alimentar del naturalismo de los vecinos de un pueblo de Murcia, se trata de una historia ficcionada sobre una realidad rural, de ahí que coja recursos del documental. Es una película coral donde nos muestran varias vidas de un pequeño pueblo de Murcia donde a veces la dicción no es muy buena, o mejor dicho: es de un murciano muy profundo, y, aún hablando en castellano, no se les entiende. Podemos atender a un joven que cría vacas y cerdos y se hace con un burro perdido que sabe que no es suyo, pero desea quedárselo lo mismo que desea ser un empresario del corcho, a pesar de que completa sus ingresos como mero peón temporero corchero (brillante la escena donde se asocia la tenencia ilegal del burro con lo desproporcionado de las ganancias de un empresario corchero respecto a las de un peón corchero); también podemos atender a un adolescente de pelo largo que caza liebres siempre con el recuerdo de sus abuelos, pero a la vez con dudas sobre su sexualidad cuando se ve a su hermana melliza o gemela que le pinta en secreto de mujer, pero más tarde parece tener deseos hacia otra joven amiga suya; otra historia es la de una dependienta de ultramarinos que a la vez lee el tarot; a esta le sigue la historia de una joven dependienta con ella que a la vez quiere ser cantante y compositora de música trap, que confiesa haber querido ser veterinaria para salvar animales, pero trabaja por necesidad en un matadero y a la vez tiene relaciones secretas con el chico que quiere ser corchero; o la chica que libera a un perro galgo atado a un árbol y se lo queda; y así seguimos en una serie de historias que nos muestran diversas historias de la España profunda y más humilde de los pueblos, unas más desarrolladas que otras (sólo se menciona por ejemplo la del chico aparentemente homosexual que se fue a tener estudios universitarios pero está ligado al pueblo y lo idealiza ante una amiga que, meando, lo que está deseando es salir del pueblo). Brillantes algunas ideas fugaces que nos muestran el mundo rural que nos recuerda un pasado, a la vez que el mundo moderno llegando a él o como lugar a alcanzar; destacable: la escena en la que se están bañando los jóvenes en un río, con bosque de rivera, y de repente aparece un dron volando pilotado por uno de ellos, combinando visualmente dos mundos presuntamente antagónicos, pero también el perro ahorcado que nos recuerda el barbarismo aún presente en medio de un mundo rural ideal o idealizado… Idealizado, pues se habla de la lucha entre los que viven el pueblo y los que saben que el pueblo en sí retiene lo que desean obtener de la vida, sin que puedan salir de ello. Hay una denuncia clasista o de desigualdad social. No está mal, pero en determinado momento se hace larga la película. Le falta algo... algo que nos enganche más aún. Quizá, explorar más en los momentos adecuados esos contrastes visuales que ponen en evidencia las contradicciones de la hipotética igualdad de oportunidades o de cómo es el mundo socialmente.  

Matria
(Álvaro Gago Díaz, 2023): Parece ser que al festival este año le dio por sumarse al fomento de las lenguas oficiales del Estado no castellanas. Eso está bien, aunque no deja de llamar la atención que en los años más recientes suelen ser seleccionadas películas que tienen algún aspecto o argumento relacionado con alguna cuestión de la política social del momento. En todo caso, tampoco está mal escuchar cine español más allá del castellano, tampoco es que sea el primer año que ocurre, de hecho más allá de Alcine varias de las películas más exitosas de España no están en castellano. Véase por ejemplo Alcarràs (Carla Simón, 2022), As bestas (Rodrigo Sorogoyen, 2022) o Irati (Paul Urkijo, 2023). La película se desarrolla en el mundo rural costero de Galicia, por lo que se habla únicamente en gallego. Bien es cierto que en Galicia no sólo se habla gallego, salvo algunos lugares de la Galicia interior, pero se entiende la idea. Se cuenta la historia de una mujer muy independiente, puro nervio, por otra parte, y de temperamento difícil, no exenta de prejuicios o resentimientos hacia los hombres, todo sea que por una parte se insinúa un pasado tormentoso como víctima de ellos y por otra parte se muestra explícitamente una relación con uno en concreto que en principio es su pareja, pero con quien no tiene una convivencia cariñosa ni positivamente afectiva y él es alcohólico, abusador, con un punto de acosador sexual, practicante de la violencia psicológica, avaro y que además tiene una amante que no trata de ocultar aún a sabiendas que le hace daño a su pareja. Así que también se toca el tema de la violencia de género desde la violencia psicológica y las relaciones tóxicas consentidas, pero en un momento en el que ella quiere cortar con todo ello y no termina de hacerlo. Bien es cierto que esta película no sigue del todo la estela donde los hombres son todos un cúmulo de la negatividad humana y de todo lo malo, y las mujeres seres de luz, perfectas y cúmulo de todo lo positivo, que es el camino que muchas obras cinematográficas, bibliográficas y musicales han seguido en los últimos años, cosa que a lo mejor hay que repensar. No sigue esa estela, pero casi está totalmente impregnada de ella. Casi todos los hombres que aparecen, aparecen como el mal para la mujer, incluso los que parecen buenos, y las mujeres aparecen como las auténticas luchadoras centradas en lo correcto. Pero lo innovador en este tipo de historias que aporta Álvaro Gago es que muestra que esto no es del todo así, por un par de resquicios nos muestra una protagonista compleja, con contradicciones, donde se llega a decir muy brevemente que previamente ella ya había estado con otros hombres, frase que es fugaz en el metraje aunque se recree en la expresión facial de ella cuando se pronuncia, o donde se muestra que efectivamente ella tiene serios prejuicios contra los hombres por el mero hecho de ser hombres, como por ejemplo el novio de su hija, que no le ha hecho nada a nadie pero ella le compara con su propia pareja, o bien cuando una amiga suya se pelea con ella tras una noche de juerga juntas y esta le hace ver que es ella la conflictiva por no saber superar sus frustraciones, cosa que le vuelve a recordar su hija en otra pelea cuando le dice que ella misma no le había dado un hogar estable por ser incapaz de establecer una relación estable con un hombre o sin ningún hombre. Sea como sea es un personaje bien construido muy contradictorio, muy temperamental y especialmente lo dicho: muy difícil de tratar, hay que fijarse en el detalle por ejemplo de sus permanentes estados de enfado, especialmente contra los hombres en general pero no sólo contra ellos, en otra escena en la que busca trabajo la podremos ver llamando de manera desagradable al telefonillo de la casa de una mujer que podría tener uno y no lo tiene. Las escenas en el bar, muy matriarcal, y las escenas de ella como jefa de equipo en un trabajo de limpieza de una fábrica de pescado muestra esa personalidad abusiva y de persona machacada por la vida, incluidas las necesidades económicas y de trabajos precarios. No se escamotea los problemas de los trabajos precarios actuales. Hay mentalidad de clase obrera entre los más necesitados. Prácticamente su empresa de limpieza es absorbida por otra que decide rebajar sueldos y aumentar horas, por lo que ella se niega y se va. Así que se ve forzada a buscar otro trabajo de lo que sea, sin que termine de ser ni amable ni persona que acepte cómo funcionan las cosas hoy día, por ejemplo en la oficina de empleo, ni respeta el trabajo de los demás, como el de su amiga, el de la dueña del bar o el de una chica que atiende una tienda de telefonía. Hay lucha social como fina capa que sostiene toda la trama. Todo esto está afectado por sus problemas con su pareja en su vida privada, que transmite a su hija, y el caos de contradicciones y mal humor que acumula, cuando llega a ser empleada de hogar a media jornada en la casa de un jubilado viudo. Como sea, mi vida laboral y ambiente social en mi barrio es similar a mucho de lo que aquí se cuenta y lo que para mucha gente sea un personaje peculiar, para mí es un personaje común y diario. Hay lugares donde ser así es supervivir. Y ese bar refleja bien. Guion, ambientación social e interpretaciones lo mejor de la película, pero sí es cierto que hay un punto de exageración de los extremos. No está mal, porque mueve al espectador a posición y eso ya es hacer parte de un trabajo artístico bien.  

Sobre todo de noche (Víctor Iriarte, 2023): La ya más que habitual actriz en Alcine Lola Dueñas actúa en esta película, pero también Ana Torrent y María Vázquez, a esto hay que sumarle que al día siguiente de la proyección era fiesta en Madrid capital, así que la sala estaba llena casi al completo. La película es muy sobria y seca, casi ausente de banda sonora musical para aumentar lo áspero de lo que cuenta. Casi ausente porque en su segunda mitad los personajes tocan música clásica al piano, ya que una de las protagonistas es profesora de piano. Se divide formalmente en cuatro partes, pero en realidad se divide en dos partes. La primera se narra con voz en off de modo epistolar de una madre a un hijo y de un hijo a una madre, a modo monólogo que se intercala muy lentamente con imágenes que funcionan a modo metafórico, pero en algunos momentos también con un surrealismo poético. La segunda parte contiene ya pequeños diálogos entre los personajes principales. Básicamente a una madre le robaron a su hijo nada más nacer en el hospital para dárselo a otra madre. Ella le busca toda su vida y le encuentra justo cuando tiene una enfermedad degenerativa y terminal. Inician un viaje de España a Portugal, donde se supone que viven los responsables de este rapto. Ella entabla una relación afectiva con el hijo y con la madre postiza, pero a la vez les plantea una venganza robando el dinero oculto que ganaron con todo aquello aquellas personas, el cual se haya debajo de un museo de Oporto. A la vez es una misión suicida. En el fondo ni se ahonda en el asunto de los niños robados en España, ni en la trama conspirativa, ni en el plan de venganza… Tratan de ahondar en el dolor interno de la madre que no pudo ejercer y posteriormente en los sentimientos que les provocan a todos el reencuentro, pero se hace de una manera tan fría y estática que tampoco llama la atención. La película se hace muy larga. Parece un cortometraje que hubiera funcionado bien como tal, de hecho lo más destacable es su estética cuidada en sentido de metáforas visuales, pero como largometraje es algo excesivo y cansa. Es dura de ver. No creo que al director le interesa tanto la trama, que es algo secundario, sino la forma visual de narrar, la técnica de crear cuadros con imágenes en movimiento… y en su segunda mitad con apoyo seco de un piano. En lo surrealista ya hubo una película ya comentada que la supera en este festival. No podría decir mucho más. Depende de si vas al cine sólo en busca del esteticismo visual.  

Matar cangrejos (Omar A. Razzak, 2023): Una película canaria que nos acerca a la realidad de la sociedad canaria de la isla de Tenerife en 1992 en un pueblo costero que vive entre la precarización y los empleos que genera el turismo en el zoológico de aves Loro Parque. Raico y Paula son dos hijos de una de las empleadas precarias de Loro Parque, la cual trabaja vestida con el traje tradicional posando con loros para fotografías de turistas. Ella se queda embarazada de alguien que no se sabe quién es, aunque se intuye que puede ser un turista o un extranjero, a la vez que les ha prometido a sus hijos que ella y ellos recibirán en nombre oficial de Loro Parque a Michael Jackson, quien va a ir a la isla a dar un concierto. Ingenuamente trata de enseñarles pasos de baile tradicional canario para convencer a sus jefes. Sin embargo, es una familia desestructurada, sin padre, donde se insinúa que cada hijo puede ser de un padre, con una abuela que vive resignada con su hija y nietos, pero que vive en una casa de la que carecen de papeles de propiedad, y donde la madre está más tiempo fuera de casa por trabajo o fiestas, que cuidando de la familia. Por ello es Paula quien cuida de Raico en un ambiente en el que los planes turísticos sobre la isla apuntan a la destrucción de un proyecto de hotel malogrado, la posible expropiación de la casa de la abuela (cerca de la playa), un pueblo de pescadores que usan la carne de los cangrejos pero se pasan el día borrachos en vidas destruidas, y un grupo de jóvenes entre el alcohol y las drogas que absorben el tiempo de Paula a la par que sienten xenofobia contra los españoles peninsulares (peyorativamente “godos”) y los extranjeros que vienen como turistas. Es significativa la escena en la que en una sala de espera una amiga de la abuela le dice a la abuela la importancia de conocer más mundo que el simple de Tenerife, a la vez que lanza una serie de ideas nacionalistas aparentemente inocentes, pero que cuando se reflejan en las acciones de los jóvenes cobran presencia de un resentimiento profundo por sentirse por un lado fuera de las oportunidades sociales (el inicio de las Olimpiadas en la televisión no les llama la atención como algo propio) y por otro sentir una identificación canaria que ven amenazada al estar cambiando su propio pueblo por los intereses generados por quienes se lucran con el turismo, pero no ponen las culpas en quienes generan esa industria, sino en los propios turistas. Estamos, por tanto, ante otra película de marcado acento propio con carácter de cine social y de conflicto. No es la única película que trata el tema de la falta de oportunidades y los trabajos y las vidas precarias. Puede ser un reflejo de la actualidad. Personalmente yo visité es isla en 1995 como adolescente y en mi recuerdo creo que queda bien retratada. La dirección artística ha reflejado bien aquellos años en aquel lugar, así como un ambiente social determinado a punto no tanto de desaparecer como de ser desplazado de lugar. Buena intuición, escenas que llegan a intrigar, como el pescador alcohólico y el niño, composiciones del argumento que prometen, pero… pero algo no termina de cuajar. El metraje no termina de rematar nada en concreto, deja botando una pelota del aborto en Londres, cuando en España se podía abortar, así como deja botando muchos otros asuntos, lo que hace que se haga al final como película larga y que tras sus tres cuartas partes el espectador empiece a ver que no se va a ningún sitio no tratado ya. Nos hace preguntarnos si no será otra buena idea como cortometraje, pero mal tratada como largometraje. Tiene cosas que prometen, pero… pero tiene un algo que nos hace quedar a la espera de algo que no termina de llegar. Es un retrato social de esa Canarias previa a la Canarias saturada de turismo… y que aún no conocía en masa a la gente de raza negra, lo que es otra denuncia social, mientras esperan a Michael Jackson, famoso y multimillonario, casi como si ellos fueran otro animal de exhibición del Loro Parque, se extrañan y se apartan ante la llegada de tres negros pobres, que se insinúa que son de los primeros emigrantes africanos. Cuando yo conocí la isla en 1995, bien es cierto que aún no llegaban a las costas canarias las cantidades de emigración africana que llega ahora y casi no había población negra. En general España entera era muy diferente a la España de ahora, se refleja el cambio del mundo.

Heavies tendres (Carlos Pérez-Reche y Joan Tomas Monfort, 2023): Lo mejor de Pantalla Abierta vino justo al final con esta película. Grabada en catalán, sin metafísicas ni trascendencias, presentando un drama sin dramatizar a lo tremendo, con sentido del humor y en unos dibujos animados divertidos y sencillos, de trazo claro, casi näif, sin meterse en complejidades que busquen apelar a una concienciación social que se pueda entender militante, pero sin eludir aquello de lo que te hablan, lo mejor. Buen ritmo, ágil, inteligente, y bien ambientada. Se ubica en 1991, en Barcelona. Justo en ese momento en el que chocan varias culturas musicales en lo que fue el nacimiento del grunge, que revitalizó el punk, el heavy en varias vertientes, que impulso el rock, el hard rock, que hizo reaccionar a todas las tendencias musicales y eso movilizó a todos los que éramos jóvenes en ese momento. Esa década es mi década de juventud. La vi muy bien reflejada, muy bien reflejada en cómo se vivió siendo jóvenes y cómo era el panorama, aunque hay algún detalle que es un tópico actual más que una realidad de entonces. Hablé con otros amigos de la época cuando salimos de la sala y todos coincidimos que era perfecta y divertida, que también se identificaban y que era un acierto reflejar aquel ambiente social y musical sin drama ni trascendencias pesadas. Un chico de familia sin problemas se ve atraído por el heavy, pero no es buen estudiante. De ese modo conoce a otro chico de familia desestructurada con otros gustos musicales pero que se hará amigo suyo cuando este le descubra el heavy. Una chica atraída por el grunge y enamorada de un punk meterá una variante en su grupo de amigos que les hará ir explorando el mundillo de garitos y música de la época y les hará entrar en sus propias contradicciones y descubrir su camino más sólido en su camino de ir siendo adultos. La amistad como valor inviolable, atado por la música, los diferentes ambientes sociales de cada uno, el alcohol, los diferentes gustos, las tolerancias y mentes abiertas… todo, todo es lo que era. Y contado con humor. Es perfecta. Para mí es la ganadora… y es la que hace que el festival merezca la pena este año, pues en todo lo visto hasta este momento, este año para mí lo más alto era una aprobado raspado, abundando los rotundos suspensos por cansinismo condescendiente y trascendente, pero esta, con total justicia, fue la máxima puntuación de. Matrícula de honor. Supo entender una generación que fuimos y somos.