¿Será un presagio del futuro como continuidad de la situación presente? No lo sé. La cuestión es que hoy se ha producido esa charla histórica donde los sindicatos CCOO, UGT, CNT y CGT iban a reunirse para defender unidos la necesidad de la huelga del 29 de septiembre que os cité en la Noticia 831ª. Y una vez más citaré mi aportación de razones para ir a la huelga que compartí y os escribí en la Noticia 825ª. Como dije lo organizó el periódico quincenal Diagonal en la Casa de la Salud de Alcalá de Henares, antigua Casa de Socorro (al menos la inauguraron así en 1984, aunque tenía precedentes médicos esa ubicación en los 1970'). Pero la fotografía histórica, sirva como metáfora de la defensa conjunta de estos cuatro sindicatos, no ha sido posible aquí, aunque sí lo haya sido en Madrid y en Parla, y esperemos que el día 23 en Santander. Pero ya digo que en Alcalá de Henares no fue posible. El representante de CGT no acudió al encuentro. En principio se pensó que llegaba tarde, por lo que el acto emepezó con retraso. Pero fue evidente que no llegaba tarde, si no que no fue al acto, un acto que duró desde las 18:30 h. a las 21:00 h. Tiempo tuvo de hacerse presente. Tampoco llamó por teléfono ni se comunicó por otro medio, según los organizadores, para dar explicación alguna, ni él ni la propia CGT, por lo que a falta de saber si se trató de una causa mayor excusable se le habrá de dar un voto de confianza ante ausencia tan sonada en un acto tan promocionado por su sentido inédito (las cadenas de radio SER y la COPE, el quincenal Diagonal, el Diario de Alcalá, las redes sociales cibernéticas, esta misma bitácora, fueron los anunciadores, entre otros).
Si bien más de un asistente confundió el encuentro con un mitín en sus intervenciones (y al militante de CNT con el de CGT, cosa a la que se puso remedio en cuanto se pudo), predominaban, según dijeron varios asistentes, partidarios del Partido Comunista de España (PCE), y digo según dijeron varios asistentes, porque la verdad es que oyendo las intervenciones me parece a mí que había más anarcosindicalistas de lo que se podría creer. Sí que es verdad que la sala tiene capacidad para cien personas sentadas (conté los asientos), y había asientos vacíos. Cada asiento vacío y cada espacio de pasillo sin gente de pie es un fracaso potencial. Pero cada asiento ocupado y cada espacio de pasillo con alguien de pie es un triunfo. Hay que decir que había más gente en el acto de lo que otros actos de esa misma sala, y de otra índole, ha tenido en el pasado. No es un salón de actos muy publicitado. Así que se puede considerar que había bastante gente a la par que, contradictoriamente, se podría decir que faltaba gente, como por ejemplo, como indicó una militante de CCOO (me parece) los sindicalistas liberados de UGT y CCOO en las empresas de Alcalá de Henares, empezando por los de la Universidad de Alcalá de Henares (no sé porqué hizo la referencia universitaria, pero la hizo). El representante de UGT contestó a esta intervención que los liberados del Corredor del Henares se encontraban en esos momentos trabajando por la huelga informando en otras localidades. Me resulta un tanto increible que todos los liberados del Corredor del Henares se encontraran en esos momentos haciendo eso a tiempo completo durante todas las horas de la charla, una charla que por otra parte revestía tanta importancia como para que alguno la hubiera metido en su agenda. Pero hay que dar votos de confianza. Sin embargo sí que es cierto que el asunto de los liberados centró el debate, polémico, de la charla. Hasta el punto que se produjo lo que, por actitudes físicas a mi interpretación, producía incomodidad al representante de UGT y postura defensiva en el representante de CCOO hasta el punto que uno de los asistente llegó a preguntar con sarcasmo que "¿a ver si ahora vamos a ser votantes del Partido Popular [por criticar la figura del liberado sindical]?) A este respecto CNT, al no usar de liberados, ni recibir dinero del Estado, tuvo que explicar su funcionamiento como sindicato, ya que varios de los asistentes de UGT y CCOO intervinieron en un sentido confuso donde no parecían conocer este hecho. Explicación que pareció gustar a alguno de los presentes.
Es de destacar que la asistencia tenía una gran presencia de gente joven en torno a mi propia edad (ya sean años por abajo o años por arriba), y por otra parte una gran presencia de gente con edades que uno diría que iría de los 55 años hacia arriba. Las edades medias entre ambas franjas contaban con gente, pero no eran los más numerosos. Sí que es verdad que también hubo gente de Sudamérica y un francés. Sus intervenciones fueron interesante. Los sudaméricanos aportaron su visión sindical comparativa entre sus paises y España. Coincidían en el sentido de que los españoles habían perdido combatividad. Afirmaban que la gente de aquí critica a los sindicatos por su no hacer y no se dan cuenta de que cada uno es el que debe hacer, que los sindicatos no son seres en sí, si no que lo componen personas y esas personas es cada uno de nosotros, con lo que los españoles tendrían ahí que hacerse una autocrítica de su comportamiento respecto a la lucha obrera, pues esta no se puede delegar, empieza por uno mismo, en torno a los propios problemas y los del compañero de trabajo ("si en Colombia echan a una persona de una fábrica de 200, las 199 se ponen en huelga"). El francés aportó que lo que se da en España es la pérdida de derechos sociales y laborales de los últimos 30 años, por lo que le resultaba absurdo que los sindicatos mayoritarios se plantearan el respeto de los servicios mínimos en la huelga, cuando esta ni siquiera es indefinida. Para él todo era ya el todo o nada, y proponía una huelga a la francesa (eso sobrentendí yo al menos de su discurso). Para él el ejemplo lo dió el servicio de Metro (tren suburbano) de Madrid, que comprendieron que se lo jugaban todo hace apenas uno o dos meses, e iniciaron una huelga como la que proponía.
Pero es cierto que la pregunta quizá más inteligente la formuló de modo breve una joven pelirroja, por cuanto su pregunta era sencilla y directa. Si desde ayer un empresario puede despedir a un trabajador por despido objetivo, y el abanico de posibilidades objetivas se han ampliado hasta el punto que un juez casi no tiene nada que replicar (el caso más escandaloso es que ahora te puedan despedir porque se prevean pérdidas, que no porque el empresario las tenga, así como que sea el trabajador y no la empresa quien deba aportar pruebas ante casos conflictivos, hasta ahora era al revés), ¿cómo ir a la huelga el día 29 si corres el riesgo de ser despedido con cualquiera de las múltiples excusas que ahora tienen de modo legal un empresario (pues sigue siendo ilegal que lo haga por participar de una huelga)? Y ahí está el problema. Que no hay más respuesta que la que uno mismo se dé el 29 de septiembre, cuando llegué el momento. Como dijo el representante de CNT, no hay mayor piquete violento en la huelga que el piquete del empresario, porque usa del miedo, del terror que le produce al trabajador que le puedan despedir por el motivo encubierto de ir a la huelga cuando actualmente debe hacer frente a todas esas deudas que cada vez se nos acumulan más. En el asunto de los piquetes, por cierto, todos defendieron y reafirmaron numerosas veces que serían únicamente informátivos, nada más, no se deben dar de otro tipo bajo ningún concepto.
El representante de UGT fue uno de los representantes más atacados. Lo que era una charla de unidad de los sindicatos, se transformó en eso mismo, pero con numerosa autocrítica y con numerosos reproches de los trabajadores allí presentes. Y las críticas venían incluso de la mano de gente que, creo, eran de la propia UGT. Sinceramente, aunque usó un tono correcto y cordial en todo momento, sosegado, por actitudes físicas yo vi a este ponente como si estuviera incómodo, como si le hubiera tocado defender una papeleta que no deseaba protagonizar. En ese sentido uno de los presentes fue bastante directo cuando citó las palabras del diregente de UGT dándoles en su pregunta una vuelta de tuerca. Era la referencia a que el militante de UGT tenía el carnet de UGT en una mano y el del PSOE en la otra, y que el día 29 meterían en el bolsillo la mano con el carnet del PSOE. En su voz era una pequeña acusación de hipocresía. Lo que ocurre es que momentos antes en las exposiciones suya y el representante de CNT, este último recordó que ahora se tendrán en cuenta los últimos 20 años trabajados para tener una pensión, cuando antes eran 15, antes 8 y antes sólo 2 (hablamos de la pérdida de derechos desde la Transición, los últimos 30 años), así como la necesidad que suscitó las medidas del ministro Boyer (lo fue por el PSOE de Felipe González) de comprar casas, sobre todo casas y no pisos, y marcas caras de coches que se han ido encareciendo y creando grandes deudas a los obreros, de la confusión que se generó en los trabajadores haciéndoles creer que son clase media por medio de determinados eslóganos y fomento de formas de vida, o bien la pérdida de trabajo estable en favor de las empresas de trabajo temporal (iniciadas y fomentadas con las políticas del PSOE de Felipe González). Así que el representante de UGT optó por defender la política del PSOE, que ha gobernado en España de 1982 a 1996 y de 2004 a la actualidad, que son muchos años de estos treinta años. Pero claro, es una contradicción esta defensa cuando ahora mismo la propia dirección de UGT declara que la política del PSOE es errática en lo laboral. El representante de UGT, haciendo de tripas corazón, tuvo una papeleta muy difícil que defender ante una sala muy contraria a él. Tampoco su discurso fue el más fluido, se centró en sus notas previas, y eso no crea afinidad ni reciprocidad en un auditorio. Ante las insistentes intervenciones acerca de que se debía hacer autocrítica, tomar nota de las quejas y renovarse, no dijo que ya se haga, si no que después del 29 ya se verá si se ha de hacer. Obviamente ese no es el camino más acertado que ha de tomar UGT, el malestar con los sindicatos mayoritarios está ahí, deberían empezar ya una labor de renovación y de replanteamiento de sí mismos. Estoy convencido que si lo hicieran ya, si se mostraran sinceros y entonaran el "mea culpa", mucha gente vería la huelga de un modo más predispuesto.
El representante de CCOO, que en su discurso parecía tender puentes a la postura de CNT, parecía más autocrítico con la labor llevada hasta el momento, aunque defendió la táctica de los liberados, él mismo era un liberado, aunque no cobraba del sindicato, si no que cobraba el desempleo porque se encontraba en una situación delicada de su vida laboral. Fue muy didáctico explicando las partes más polémicas de la reforma laboral. Expuso muy bien los nuevos motivos por los cuales uno podía ser despedido. Su discurso coincidía con la postura ya comentada de que ahora mismo estamos en un todo o nada. Y recordaba que ya antes un apoyo mayoritario a una huelga o una manifestación habían tumbado decretos de ley ya aprobados. Que existían precedentes por mucho que se haya dicho que no. Y los citó. Pero más aún con un gobierno como el actual que se ha retirado de muchas leyes y reformas que se han encontrado con el descontento popular mayoritario. Así pues para él realmente puede triunfar la huelga del 29 si se apoya mayoritariamente. Sin embargo, preguntado si después del día 29 ya no hay nada, contestó que ya hay algo, hay manifestaciones de mineros en Asturias y León, huelgas en los medios de transporte, y hasta huelga de guardia civiles. Pero añadió, a título personal, que si después del 29 hay que hacer más huelgas generales, ¿por qué no hacerlas? A lo que el representante de UGT, en su nuevo turno, apuntilló que después del 29 habrá que sentarse con el gobierno de nuevo... El hombre de CCOO no contestó sobre ello, calló.
El representante de CNT, del que ya se ha dicho bastante de su intervención, fue didáctico también, en el sentido de mostrar las diferencias de derechos sociales y laborales en 1977 y los de 2010. Una impresionante exposición de cifras y de leyes y normas que se comparaban a lo largo de estos últimos 30 años... y sí, vamos a retroceder a 1977, el último año previo a la Constitución. Pero no era momento para las diferencias sindicales, aunque remarcó bastante las diferencias de acción entre CNT y las del resto de sindicatos. Quizá tengamos mucho o todo perdido el día 29, pero hay que ir por dignidad, por dignidad propia, aunque no se crea en ningún sindicato. Por dignidad. Porque perder hemos perdido hasta el concepto de salario y el de jornal. Porque, ciertamente, salario es el que se cobra por una semana o por un mes (actualmente ya nadie paga en semanas prácticamente, pero en los 1980' mucha gente cobraba así, como rémora de muchas décadas atrás). Jornal es el que se cobra por un día de trabajo y actualmente se paga por días de trabajo, hay contratos de días de trabajo, algunos incluso por horas de trabajo. Del mismo modo que hace 100 años se logró el descanso dominical, pero los nuevos tipos de contratos hace que haya gente que no tenga un día de descanso a la semana. O bien el hecho de perder la condición de oficio, alguien podía trabajar 20, 30 ó 40 años en un trabajo y ser un trabajador con un oficio, hoy día prácticamente todos los jóvenes pasamos por gran variedad de trabajos con duraciones de meses o a lo sumo de uno o dos años (los afortunados), a veces con grandes lagunas de desempleo entre medias, y además por sueldos infímos y aceptando una gran cantidad de horas. y no sigo más sobre sus datos, porque ciertamente eran desoladores en una realidad que cualquier joven se puede reconocer. ¿Y tras el 29 qué hará CNT?, le preguntan, pues lo de siempre, contestó, seguir en la linea que siempre ha defendido e insistir (y creo que esto iba dirigido a UGT y CCOO) en que se necesita un sindicalismo que vuelva a las raices: un sindicalismo de ideas, de convicción, y eso se logra volviendo a tratar de tú a tú con los trabajadores, trabajando el sindicado con el trabajador, y no en un despacho, sufriendo lo que sufre, y corriendo el mismo riesgo de ir al paro que esa misma persona. Y quizá es eso, hay que volver a la base. Al inicio.
Hay una cosa que queda clara, los sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, deberán replantearse a sí mismos, porque por lo visto en este encuentro, y lo que se oye y lee en varios foros y conversaciones con amigos y conocidos, ya están muy tocados. De hecho, el representante de CNT logró atraer la aprobación de militantes de esos mismos sindicatos mayoritarios. Y eso significa algo. Pero bien es cierto que, como decía el hombre de Colombia, son los trabajadores, las personas, los que toman decisiones y los que hacen cosas. No se trata de la bandera o la sigla, si no de personas, de cada uno de nosotros. Para volver al sindicato de ideas, de convicción, para poder actuar como en Francia o Gran Bretaña, o como en España hace treinta años, no hay que criticar tanto al sindicato de turno, si no preguntarnos ¿por qué no hacer algo nosotros mismos por dignidad propia, por amor propio? Quizá que cada persona sea consciente y concienciada da miedo a los gobiernos, quizá por ello quieren evitarlo, pero esa es la clave para que no nos quiten derechos... ahora hay que volver a ganar lo que se ganó a lo largo de muchos años. Eso sólo se logrará con concienciación responsable, con lucha obrera y con mucho sacrificio, y digo sacrificio, porque el sacrificio y las penalidades son lo que logaron todo aquello que ayer perdimos con la entrada en vigor de la reforma laboral. Quedan, me temo, muchos años de sacrificio, pero quizá esta es nuestra hora, como lo fue la de nuestros padres en los años de la Transición.
7 comentarios:
La respuesta a tu pregunta formulada en el facebook (que era de una chica): Lógicamente, si te pueden despedir por lo que les salga del culo, también te pueden despedir por ir a la huelga, aunque pongan luego otra excusa, por no parecer tan cerdos. En realidad, la misma pregunta se responde. Mantener tu puesto de trabajo no depende de ti (pero antes tampoco, lo que pasa es que ahora es mucho más visible que no), pero mantener las pelotas y la dignidad sí que sigue dependiendo de uno mismo. Si la gente se caga de ir a la huelga por ese motivo y no expresan su opinión, podrán mantener su puesto con más facilidad que el que vaya, ¿pero cuánto tiempo más? ¿Hasta cuándo puede una persona aguantar poniendo sonrisas falsas y dejándose petar el culo y callando todo lo que quiere decir y sometiéndose a todos los deseos de su jefe o empresa? ¿Toda su vida? Pues qué vida más miserable... Si te pueden despedir por ir a la huelga, y tu opinión es ir pero no vas, ¿qué crees? ¿qué crees que en tu trabajo no saben que eres rojillo? Si no te despiden por eso te despedirán por cualquier otra tontería cuando les venga en gana. A mí me suspendieron 2 días de empleo y sueldo cuando no estaba "esto", por tener unos cuantos retrasos de 5-10 minutos en mi hora de entrada al curro. Hoy, según esto, me podrían haber despedido. Otro ejemplo, en la mayoría de trabajos no está permitido navegar por internet si no es por algo que esté relacionado con el trabajo, pero se permite "extraoficialmente"... pues lo mismo, si quieren despedirte te vienen con el cuento de que te han pillado navegando repetidamente por páginas "de ocio"... ¿y qué dirán ellos? ¡Pero si lo llevo haciendo desde que entré! ¡Pero si lo hace todo el mundo! ¿Y qué dirán los otros? Nada. Los otros no necesitan excusarse. Despedirán a quien quieran con la misma excusa, cuando quieran y punto. Así que, ¿hay huevos y dignidad y orgullo? ¿O hay lameculos y cagados, que serán despedidos tarde o temprano igualmente?
Muy buena noticia
COMEDIANTE: la diferencia entre antes y ahora es que antes la mayor parte de los presupuestos para el despido era despido encubibriendo los auténticos motivos, o bien en fraude de ley, como me hicieron amí hace tiempo. Ahora con la reforma casi todos esos presupuestos ilegales han pasado a ser legales, reforzados además con el hecho de que ya no es la empresa la que deba aportar pruebas de que despide realmente por tal motivo, si no que es el trabajador quien deberá aportar esas pruebas, cosa que se hace prácticamente imposible, pues los datos e empresa los tiene el empresario. Esa diferencia es una diferencia importante. El despido por ir a la huelga sigue siendo ilegal si se despide explícitamente por eso, pero al aumentar los motivos legales de despido, y ser el trabajador quien deba aportar las pruebas de un despido improcedente, se hace difícil y complejo no ser despedido encubiertamente por ir a la huelga. De ahí que ahora tengamos que recuperar 30 años de deechos con sacrificio, como con sacrificio nuestros abuelos y padres luecharon por ello. Ya no es la hora de la comodidad, vuelve a ser la hora del sacrificio. Un saludo, buen hombre y que la cerveza te acompañe.
PROFESOR WF: Gracias, aunque hay cosas que se podrían haber explicado mejor. Así por ejemplo añado que la exposición del representante de CNT recordando derechos perdidos de 1977 para acá viene a costa de cuestiones en la actual reforma como el abaratamiento del despido de gente que incluso lleve 20 años trabajando en una empresa. En ese sentido vamos hacia lo que dije en la noticia 825ª, la falta de empleo estable y la falta de profesionalización. Si un empresario gana facilidad de contratar al mismo ritmo que el de despedir, lo que se logra no son más puestos de trabajo, si no que vayan rotando los puestos en trabajo entre los trabajadores, y el caso de que cuando llegue la mejora habrá más contratados, pero ninguno estable, todos temporales. Se recordó así mismo que desde 1977 hasta ahora nunca ha habido menos de un 10% de desempleo en España, y nunca se ha hecho autocrítica desde el gobierno. Un saludo y gracias por comentar.
Anotaré que hay otra visión más en Fraternidad Universal: http://fraternidaduniversal.blogspot.com/2010/09/charla-sobre-la-reforma-laboral-en.html
y otra más por el propio quincenal Diagonal: http://www.diagonalperiodico.net/spip.php?article11865
Da gusto que alguien se preocupe por explicar estas cosas a las claras, para que todos nos enteremos de qué significa lo que nos" venden". Gracias. Aunque tampoco veo mucha diferencia con el modelo de despido anterior... sólo que ahora lo tienen más fácil... Pero no todo es despido en esta vida. Yo me tuve que dar de baja por depresión hace tiempo y si hubiera querido llevar a juicio a la empresa habría tenido las de perder, justamente por lo que tú dices, porque los datos los tiene la empresa y no el trabajador. Yo no guardo los cuadrantes de todos los putos meses en que trabajé allí, ni tengo grabadas las conversaciones telefónicas que tenía con los clientes o con mis jefes, ni tengo acceso a ciertos mails, ni mil otras otras, que no tendría ni porqué tener que molestarme en ir coleccionando... Bastante tenía con intentar hacer bien mi trabajo mientras me jodían a todas horas una panda de hijos de puta. Es una pena que en lugar de mejorar las cosas, vayan a peor... ¿Para eso tenemos un gobierno? ¿Para que nos follen mejor los empresarios? Es decir, ellos mismos y sus familiares y coleguitas...?
Pues me solidarizo.
La incoparecencia del miembro de CGT fue por causas mayores de índole privado. Las supe ayer. Era justificada.
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