El amigo que me encargó un favor para una investigación de Historia que llevaba en marcha necesitaba de otro favor, aparte de ponernos al día el uno con el otro y darme una buena noticia y una posible mala noticia respecto a la posibilidad que me habló de hacerme comisario de exposición de aquella investigación con la que le ayudé y cuya redacción suya ya está a punto de ser presentada, el 1 de Marzo, a sus solicitantes. Supongo que la presentación del libro, las conferencias y la exposición, serán para el verano. No voy a entrar en detalles ni de estas noticias ni de los porqués, al menos no de momento. Quizá cuando llegue el día lo haga, pero en principio no lo haré en el blog. Aparte de todo esto, me pidió otra vez formar parte con él de un equipo de investigación histórica, sin sueldo, ninguno de los dos, eso también es cierto, porque a todo el mundo le gusta oír historias de Historia, o conocer historias, o que se dé a conocer la Historia y los echos, pero pocos quieren pagar por ello. Y a mí la Historia me gusta, y me gusta la idea de formar con él un equipo de investigación histórica, pero mi estómago y mis necesidades generales también tienen otros gustos a los que dar gusto, como todo el mundo.
Asíque entre la ilusión de algo que me gusta y la frustración de lo estéril de hacer lo que me gusta, estéril en cuanto a lo material de mi vida (y es lo material lo que sostiene lo mental, la mente misma aparte de ideas es materia), me mantengo. Vacío existencial, cansancio vital, y ahora también esfuerzos con ilusión y frustración a la vez.
Pero fijémonos en lo positivo, pues en eso me fijo para poder seguir adelante con todo esto. En la esperanza gratuíta, gratuíta porque hasta ahora sólo ha sido eso: esperanzas, no mucho más. A veces hay que tener mucho humor negro para salir adelante. Ya lo dijo Danaclaudio, un perdedor con carisma simpática, o al menos con sentido del humor.
Pues entre varias cosas que me dijo me pidió un nuevo favor, dentro de ese equipo de investigación que quiere formar conmigo. Parece ser que la editorial anarquista que edita el periódico Tierra y Libertad (creo que son ellos los que hacen la propuesta que voy a decir) quiere aprovechar un aniversario de cierto periodista de principios del siglo XX, que escribía para publicaciones ácratas, para reeditar un o unos libros suyos. Asíque le encargaron la biografía actualizada a mi amigo. Mi amigo está trabajándola, pero una vez más se ha topado con un archivo que abre en horas a las que él no puede ir, por tener que trabajar. Así que me pidió que fuese por él al Archivo General de la Administración (AGA) al cual ya he ido varias veces.
Debía buscar datos de embajadas y de la administración sobre el personaje en cuestión, el cual no puedo mencionar por secreto profesional hasta que no se publique el trabajo, el cual no es mío, yo sólo ayudo.
La cuestión es que el tal tipo fue uno de los encausados por el asesinato del presidente de gobierno Eduardo Dato en 1921. Luego fue absuelto, porque las acusaciones contra él en realidad no tenían un peso auténtico. El AGA es un archivo excesivamente extricto. Muchos números para marcar sus fondos, sólo puedes usar folios sueltos, no se te permite escribir con otra cosa que con lapicero, por razones obvias no puedes ver todos los documentos, porque algunos siguen clasificados y secretos, aunque a veces pasan por tus manos con cintas rojas al estar dentro de cajas que tú solicitas por tener otros documentos, debes consultar con dos archivistas documentalistas sobre tu consulta... Como ya me lo sabía de otras investigaciones hice todo lo que suelen pedir. Pero esta vez ocurrió algo.
Al consultar con los archivistas documentalistas sobre mi consulta dije el nombre que me interesaba y cuáles eran los fondos donde creía podía haber algo de él. "¿Anarquista?", me preguntó el hombre. "Sí", contesté y él añadió un matiz: "¿sobre anarquistas?" Con lo que pienso caí en una trampa. La primera pregunta no preguntaba si mi investigado era anarquista, me temo que jugando con un doble sentido preguntaba si yo era anarquista, y la segunda pregunta lo que quería era saber lo que yo sobreentendí al contestar la primera, si investigaba sobre un anarquista. Sea como sea, nunca oculté mi simpatía al anarquismo, aunque ya digo que no es anarquismo total, pues simpatizo con ideas viejas de Maurín o García Oliver. Pero tengo derecho a no ser preguntado sobre mi adscripción ideológica... cosa que creo se vulneró con un doble juego del lenguaje, o tal vez sólo me lo figure yo y sean imaginaciones mías. La verdad es que hoy tengo una pinta que da asco, parezco salido de la cárcel o a punto de ingresar, por la lluvia y por lo insomne... El archivero hombre me dijo que me iba a dar los inventarios de la embajada de España en París durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera (1923 - 1929) pero que no podía facilitarme nada sobre el proceso a ese hombre por lo de Dato, porque no le sabía facilitar yo a él qué tribunal le encausó. De momento queda aquí mi historia con este documentalista, que por cierto, dijo que le parecía interesante la labor de investigar a los anarquistas.
Los volúmenes que me dió eran cuatro tomos de listado de documentación. No lo tienen en sistema informático, o eso se me dijo. Lo que me vuelve a hacer insistir en que trabajo para historiadores y documentalistas hay, otra cosa es que el gobierno quiera darlo... y que quiera darlo a gente que no sea ni becaria precaria ni trabajadores no cualificados de empresas de trabajo temporal. La de trabajo que habría informatizando todo un archivo general de la administración del estado... por no hablar de otros más, como cuando hablé del Archivo Obrero.
Pasé toda la mañana mirando esos libros. Tengo tres folios enteros con una lista de referencias a cajas donde rebuscar legajos y documentación sobre todos los pasaportes, ubicaciones de residentes españoles en Francia, noticias sobre sus trabajos o actividades, asuntos de los exiliados en Francia, y un largo etcétera de temas donde podría a parecer este hombre. Algo ingente... que se podría abreviar con el mero uso de la introducción de la informática en el archivo.
A todo esto La mujer, una chica joven, que era la otra archivista documentalista, se acercó a mi mesa de investigador y me dijo que sí tenían ubicado el proceso judicial por el asesinato de Eduardo Dato y que lo podía localizar yo su signatura desde los ordenadores de la sala... en otras palabras, que es uno de los procesos a los que han dado la suficiente importancia como para informatizar su ubicación y notas sobre su contenido. ¿Por qué se me dijo que no me lo daban por no saber yo de su ubicación , si lo tenían ubicado? Gracias a este acto de solidaridad o piedad de la archivista chica hacia mí, pude soliticitar las dos enormes cajas donde está toda la instrucción judicial y notas policiales que se llevaron a cabo en 1921 a costa del asesinato del Primer Ministro (Presidente del Gobierno) Eduardo Dato el 8 de Marzo de aquel año por unos anarquistas radicales, con los que no tenía tanto que ver mi investigado particular.
Solicité las cajas... pero cuando me las trajeron me trajeron otras de procesos judiciales a criminales comunes en los 1930' (por cierto uno era un ladrón de la caja de la fábrica de chocolates Suchard). Fuí al despacho de los archiveros documentalistas, y les dije que tenía esas cajas y su contenido no correspondía con el que pedí. El archivero hombre dijo, "¿has encontrado las cajas?, pues si están bien signadas esas son las que buscas, ¿no será que no has mirado bien?" La chica se acercó y me pidió mi solicitud y confirmó que las cajas no correspondían. El archivero hombre llamó por teléfono a unos subordinados y les rectificó las cajas que debían subir, como enfadado con ellos por el error cometido. Y es posible que su enfado y el error fuesen reales. Asíque, creyendo con buena fe que todo se debió a una confusión accidental de cajas, al fin me trajeron el proceso del asesinato de Eduardo Dato. Y en esa gran colección de documentos propios del proceso por magnicidio que era supongo que estaré unos días investigando, pues efectivamente he localizado ya algunos papeles sobre la detención de mi investigado, mañana posiblemente encuentre interrogatorios y actas del juicio, cosas así. Luego tengo para un tiempo largo con la documentación de la embajada española en Paris desde 1923 a 1929... aunque no creo que logre gran cosa de aquí... sólo mirando los pasaportes tramitados o las localizaciones de españoles en Francia pueden pasar por mis manos miles o millones de papeles... que podría ahorrarme de pasar si nos contrataran a historiadores para pasarlos a ordenador, en acces o en excel. Lo tecleas, ves si aparece el dato clave que tecleas, te aparece su ubicación y lo solicitas ver... Además, así se ahorrarían parte del deterioro que sufren los documentos al ser toqueteados, algo inevitable si tienes que mirarlos físicamente uno por uno hasta encontrar el que buscas, si es que aparece. Pero no parece que haya interés en crear este fondo informático que daría trabajo para varios años a historiadores y archivistas y documentalistas.
En cuanto a otros procesos judiciales a este hombre deberé solicitar conocer los tribunales por los que pasó.
Y sin embargo, no cobro dinero por nada de esto, ni mi amigo tampoco. Cuánto se quiere saber de Historia y qué poco se quiere pagar por ello. Sarna con gusto no pica, dicen. Y es verdad, pero que te rasquen de vez en cuando pagándote no vendría mal. A fin de cuentas investigamos las mismas horas o más que las horas de cualquier otro trabajo que goce de contrato laboral.
Bueno, me he prolongado más de la cuenta por hoy con este tema, del cual no quería prolongarme. Esta tarde noche me toca ver a mi amigo para unos detalles y para conocer a uno de los supervivientes de la represión que investigué anteriormente para él. Luego, por la noche, concurso de trivial en el café irlandés Whelans con Chico Gris, Txingurri, Zepezlin y Baron Kaos.
Psicodelia y rock en mi mente. Después de todo, aunque a alguien le pueda sonar este post a tono pesimista, en realidad no lo es tanto, lo afirmo en serio. Que la cerveza os acompañe.
Bienestar para todos.
5 comentarios:
Este post tiene la queja presente, pero la sobrepasa el amor que sientes por tu profesión. Eso sí se nota. Por lo tanto, no transmite ninguna onda depre.
Que descubras lo que buscas.
Cada día que pasa me doy cuenta de lo mal que está este país en cosas como las que describes... Está claro que no somos Uganda, pero aún así, deja bastante que desear un país que no cuida de sus profesionales. Me alegro que no estés depre. A ver si nos tomamos unas birras para celebrarlo
Salud y bienestar!!!
Peripecias de un historiador en los archivos.
Estoy con Liliana q transmites amor por tu profesión. Y por otra parte en ningún momento me ha dado la impresión de depresión sino de protesta.
El día que compartamos unas cervezas reales....
a la gente le cuesta mucho pagar por intangibles en españa. Aqui es ccasi inconcebible, que alguien te page por una idea, cosa que si ocurre en otros paises como por ejemplo usa. vease la diferencia entre ambos paises.
a veces hablas de que tienens una novela pendiente, que te cuesta a cabar y eso.. pues cuando hablas de temas de historia, a mi me engancha.....no se si la tienes enfocada como novela historica o no, pero con la capacidad de escribir que tienes deberías tener ya por lo meenos tres..... a ver si te animas a hacer una novela historica que yo la compro.
Impresionante crónica de los trabajos de un investigador en los archivos.
Ojalá se informaticen los archivos y puedan ser consultados sin tántas penalidades.
Por cierto apasionante tema el del asesinato de Dato. El tema daría para un libro, creo que interesante. Saludos.^.
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