sábado, agosto 30, 2025

NOTICIA 2408ª DESDE EL BAR: A DÍA Y MEDIO DE LOS FUEGOS ARTIFICIALES

Las ferias y fiestas de Alcalá de Henares acaban mañana domingo cuando los fuegos artificiales sean lanzados a las 00:00 desde el recinto amurallado del Palacio Arzobispal. Dos hombres mayores hablaban ayer cerca de mí comentando esto mismo y razonando la queja de que los fuegos artificiales sean lanzados los domingos, provocando incomodidad de asistencia a mucha gente que el lunes debe ir a trabajar, pero que desean verlos o que se ven en la necesidad de llevar o acompañar a la familia, especialmente niños. No obstante, este año el fin de fiestas coincide también con el fin de agosto y mucha gente incluso termina también sus vacaciones. Yo incluido, tras tener diecisiete días vacacionales... que han sido como cuando estaba en el desempleo. Han sido unas vacaciones decepcionantes. Lo han sido en cuanto a que no he tenido jornadas laborales, pero prácticamente imposibilitado de viajar o de hacer algo, incluso con las amistades más antiguas desaparecidas, menos una, y con noes, silencios o explicaciones no pedidas ante algunas propuestas mías. 

Pero es cierto lo que razonaban aquellas dos personas. Yo mismo llevo un par de años pensándolo. Las fiestas y ferias de Alcalá de Henares tradicionalmente duraban unos diez días en recuerdo, más o menos, de las ferias de ganado heredados desde la Edad Media. De hecho es uno de los caracteres de la cultura tradicional de la ciudad. Sin embargo, tras la Gran Recesión y precisamente por ella, se decidió desde el ayuntamiento rebajar los diez días oficiales a nueve, pasando el primer día de ferias de un viernes al sábado. No es que ese primer viernes no haya nada, algo hay, pero no está dentro de "lo oficial", entendiendo "lo oficial" con el pregón y los actos previos que lo acompañan. Así pues, yo mismo pienso que dado que las fiestas oficialmente duran ahora nueve días, mejor que desplazar el primer día de viernes a sábado, estaría algo mejor que se dejara el inicio en viernes, pues al fin y al cabo extraoficialmente la gente ya puede ir hasta a la feria ese día. Regresar el pregón a ese primer viernes, con lo que el final de ferias no caería en domingo, sino en sábado, e ir a los fuegos artificiales no supondría un problema a la mayor parte de la gente, pues es más fácil que la gente tenga su día libre en domingo, aunque siempre sería un problema para alguien, los domingos hay quien trabaja. 

Claro que ese desplazamiento es posible que creara polémica o queja, especialmente en los feriantes, pues podrían pensar que aquellos que vayan a carrozas y fuegos artificiales, el tiempo que estén allí, no estarían consumiendo en sus negocios. No es algo menor. 

Las ferias se acaban, y no me han resultado divertidas ni variadas este año, he de decirlo. Me han parecido anodinas, salvo el concierto de Burning, al que acudí solo.  Se acaban mis vacaciones, en las que hice alguna obra menor en casa para descubrir hace dos días que otras habitaciones de mi casa acaban de presentar necesidad de pintura también, como aquellas que pinté. No he estado de suerte. Ni siquiera mi pequeña escapada a Ávila resultó como quería, malcomí, y no he visto el mar, llevaré cerca de quince años sin verlo, aunque creo que en el fondo la morriña que tuve este año fue de un pasado. Paseos de barrio y la compra de unas cintas a un vendedor callejero de plantas. No he podido hacer gran cosa, repito, y más bien me resultó una especie de regreso a los días del desempleo. Si acaso me di el capricho de ir a comer tacos a un euro en un local nuevo que han abierto cerca de la Plaza de Santos Niños, en la calle Cardenal Cisneros, y acompañar a una pareja de amigos y su hija pequeña en lo que iba a ser un aperitivo y se transformó en una comida en restaurante cuyo precio me suponía mucho para mí, pero pensé que, en fin, por ser vacaciones y por estar con gente amiga, un pequeño esfuerzo. 

En los telediarios y radios han comentado los sueldos de los bomberos de los retenes contra incendios en los bosques, con gran indignación algunos comentaristas dijeron que con eso no se podía vivir. Yo estaré unos veinte o cuarenta euros por debajo de ellos. Uno de mis primeros trabajos, a los 18 años, fue ayudando a mi padre en el taller de tornos, roscaba tornillos, pernios de ascensor y varillas de motos. Él me dijo por entonces que hacer tornillos era importante, porque no hay ni un sólo día que las personas no usen cosas con montones de tornillos. Aún recuerdo cuando en la pandemia de Covid-19 el gobierno salió a dar las gracias a las panaderas y a los repartidores, a los tenderos. Nadie sobra, se dijo por entonces. Todos somos importantes, se dijo.

Las ferias y fiestas acaban mañana y los fuegos artificiales son aún uno de mis gustos desde niño. Recuerdo cuando nos llevaba mi padre y al día siguiente él también iba a trabajar, como recordé cuando nos llevaba a la familia a la playa de Cullera. Los fuegos artificiales eran el final de las fiestas, pero también de aquellas vacaciones, que algunos años empezaban en la playa y acababan en las ferias. Iré a verlos y cerraré mis vacaciones de estar en casa. El lunes retomaré el trabajo tras lo que se considerará un descanso y quizá, en el trabajo, alguien me pregunte a dónde fui.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

lunes, agosto 25, 2025

NOTICIA 2407ª DESDE EL BAR: ÑAPAS

Voy a mitad de vacaciones ya con las ferias empezadas y un concierto de Burning gratuito, mientras las amistades, salvo dos, están todas desaparecidas en sus vacaciones. Está claro que están siendo unas vacaciones calamitosas, ya lo dije cuando Ávila (Noticia 2406ª). Es como si no fuera vacaciones, sino como cuando me ha tocado estar desempleado. 

Ayer pasee por la Plaza de Cervantes y me topé con la alcaldesa y buena parte de sus concejales en un evento de una peña festiva. Me crucé con numerosas charangas. Y, en fin, alguna cara conocida de otros tiempos me encontré. En eso las fiestas parecen cumplir en algo.

La cosa es que ya la otra vez, cuando hablé de los problemas económicos incluso teniendo trabajo este año, mencioné que hice unas obras en casa, unas ñapas. Así fue. El primer día de vacaciones me propuse pintar el despacho de mi casa y la cocina. Y ahí se complicó la cosa.

Comencemos con que hace unos años el piso encima del mío estaba ocupado de manera ilegal, aunque en la televisión o la radio haya quien se empeñe en decir que esto no ocurre, que todo es mentira, y lo explican trabucando los términos y llamando a la ocupación de otro modo porque técnicamente es así (y llevan razón), a efectos prácticos y pragmáticos, los pisos se ocupan y a quien le toca la china ya le puedes explicar el diccionario y el código civil que la china le ha tocado y la tiene en el zapato. La cosa es que el piso de encima mía hace unos años, no muchos, creo que en 2018, estaba ocupado ilegalmente y no tengo muy claro que hicieron que tuvieron una avería gigante en sus cañerías que, aunque les pedí que lo arreglaran, tardaron una semana en hacerlo porque, vaya por dios, alguien les alquilaba el piso y ese alguien no quería saber nada. Al final tuve que recurrir en tono serio tirando a enfado a mencionar que si no llamaba al seguro, yo llamaba a la policía, más que nada porque mi baño literalmente no sólo tenía todo el techo empapado, sino que goteaba abundantemente y tenía que estar quitando y poniendo cubos de agua. Fue mencionar el asunto de la policía y reforzarlo llamando luego al administrador para que o se lo dice o le informe que iba a llamar a la policía, que, oh, milagro, la persona que alquilaba llamó a su seguro tras haber estado una semana así, cuando desde el primer momento hubiera sido algo menor. Arreglaron el techo del servicio, las paredes, también el pasillo, pues traspasaba ya estancias, y tuvieron hasta que mandarme un carpintero a que arreglara la puerta, pues el agua hinchó los cercos y maderas. El carpintero mal arregló la puerta, me quejé y volvieron los carpinteros negando la mayor sobre si la puerta cerraba o no cerraba antes de ellos. La puerta cerraba, ya lo aseguro yo, pero como dijeron que si mantenía la queja a ellos los sancionaban, pequé de bueno o de tonto, y les dije que dejen que al menos se cierre entornada y valía. Las cosas no deberían ser así, pero son. Eran gente de MAPFRE.

La cosa es que al final aquella familia que ocupaba la casa terminó siendo desalojada con el tiempo y la mujer que alquilaba la casa decidió venderla a un banco y el banco rápidamente la vendió a nuevo vecino sobre 2020 ó 2021. Este decidió hacer obras de reforma y en esas obras supongo que debió cambiar suelos o algo, porque durante un tiempo largo dio unos macetazos que temblaba toda mi casa. Yo no sé si la gente se da cuenta de si vive en una casa o en un piso, y en este caso, vive en un piso y abajo hay gente, yo en concreto. Sea como sea, le dejé hacer sus obras porque entre vecinos entiendo que hay que llevarse bien y hoy por ti y mañana por mí. Entre golpe y golpe se crearon grietas que yo pensé que eran en la pintura, por lo que no me quejé, pues pensé que era algo tan menor que ya pintaría la casa más adelante, porque además llevaba ya un tiempo sin pintar. 

Un poco más adelante, una avería en la bajante de la comunidad de vecinos en 2023 hizo que se tuviera que abrir por mi servicio para arreglarla y así dejar de calar al vecino de abajo. Cuando se abrió, los fontaneros dictaminaron que mis cañerías de 1974 eran de plomo y estaban mal, por lo que no sólo era avería en la bajante, también lo era en todas las cañerías de mi baño. MAPFRE, que también es mi seguro, no me lo cubrió, pero me hizo precio para contratar a un equipo suyo que lo arreglara. Hice aquella obra. 

Explicado todo esto, cuando retiré los muebles del despacho para pintar en mi primer día de vacaciones, descubrí que aquellos obreros habían atravesado la pared del servicio y derribado parte de los rodapiés, cosa que no vi hasta el jueves pasado porque estaba tapado por una estantería. Los obreros por fuerza debieron verlo, porque se veía hasta una de las tuberías nuevas, pero se callaron. Tras tanto tiempo pasado pensé que era inútil reclamarles nada a estas alturas porque iban a negar la mayor, igual que cuando la puerta. La cosa es que cuando me subí al techo vi que de aquellas humedades anteriores de cuando la familia ocupa, parte del yeso estaba muerto, para caerse, y es que en aquella ocasión a los obreros no les dio por comprobar el estado del despacho, que está dando con el servicio y la bajante. Y cuando me fui al otro lado del techo, aquellas grietas que yo creía en la pintura, eran grietas del yeso también, y esas fueron por los golpes de mi vecino cuando reformó su casa, pero pensé que si yo iba y le comentaba esto, aparte de no enterarse de nada, porque no le dije nada en su día, me iba a tomar por timador. Así que, estoicamente, haciendo memoria de cuando levantaron un tabique en mi casa, por primera vez me puse a hacer algo de albañilería para arreglar la pared en el rodapié y reponer algo de yeso, con la idea de pintar y de que en el futuro, si hay dinero, la próxima vez que pinte llamar a alguien profesional que termine de arreglar todo esto antes de que se caiga todo el yeso del techo.

Y así, las reparaciones las hice al segundo día de vacaciones y pinté y rematé entre ese y el tercero. Al cuarto me puse a pintar mi cocina. Me encontré el mismo problema de yesos muertos que en el despacho, también producto de aquella reforma del vecino y mezclado con años y años de calores y humos propios de la cocina, que en las obras antiguas, como esta casa de 1974, les hace estragos. Saneé una buena parte e igualmente me anoté en la cabeza que en el futuro hay que reponer posiblemente más yeso. Pero en estas estaba cuando al apoyarme en los azulejos, estos estaban ya huecos, pues antes se construía mezclando el cemento con mucha tierra y el paso del tiempo los va desmigajando, así que se cayeron seis azulejos. Reponerlo ya me sobrepasaba y, aunque sé la teoría de cómo hacerlo, pensé que para ser la primera vez que ejercía de albañil con lo del rodapié ya tuve suficiente. Llamé a mi seguro y MAPFRE de nuevo se desentendió, por ser una casa antigua sin reforma, pero volvió a ofrecerme a un profesional que me lo trabajara haciéndome precio. Me puso un metro cuadrado de azulejos, o sea: reparó lo caído, advirtiéndome de que tarde o temprano deberé afrontar una reforma integral, pues el resto de azulejos no parecen estar en mejor estado. Y lleva razón. Además, este hombre trabajó muy bien, rápido y eficiente, y sincero, fue sincero. Hizo lo que le tocaba, eso es así.

También es verdad que pedí ayuda explícitamente para las reparaciones, pero nadie vino, o no contestaron, o contestaron para darme explicaciones no pedidas de excusa de porqué no vienen, Lo gracioso es que una vez hechas las ñapas algunas personas me han preguntado por cómo las hice e incluso me han dicho que ellos me hubieran ayudado... cuando ya está hecho... y no fue porque antes no pidiera ayuda.

¿Por qué pago un seguro que no quiere cubrirme nada (incluido un lavabo roto hace un año) y todos los años me sube cuota? En fin, lo sigo pagando por si hay averías que afecten a los vecinos, pero deberían repensar sus políticas de reparaciones, porque yo supongo que habrá quien deje de pagarles y se vaya.

Sea como sea, pensando en todo esto, también me quedé pensando en todas aquellas persona de mal humor con quejas permanentes o que no se confían de obreros o vecinos. Y pensé que en todas las épocas han existido, igual que en todas las épocas han existido borrachos y ancianos en los bares. Y seguirán habiendo. Y esto no es porque alguien se plantee serlo. Nadie de niño se plantea ser cascarrabias de mayor, o cualquier otra cosa que a veces nos hace gracia. Y pensé que en el fondo esto ocurre porque con el tiempo se aprende a base de palos como estos, de palos a personas que por buenismo han terminado siendo perjudicados, perjudicados por aquellos a los que no se quiso perjudicar. Si cuando ocurren las cosas se hablasen y se arreglasen correctamente sin más, sin entrar en conflictos, ni en recelos, ni en mal estar ni mal rollo, nos evitaríamos mucho. 

Al final todo esto es dinero y no siempre se tiene dinero. Imaginemos que en el futuro, cuando los yesos muertos ya no puedan más y se caigan, yo no tengo dinero para afrontar poner un techo nuevo, de hecho ahora mismo no lo tengo, y pensemos que todo esto se ha debido a lo largo de los años de todos estos problemas comentados. Al final, cuando se malvive imagino que a la gente se le agria el carácter. Y que quizá, por ello, cuando la gente va aprendiendo a base de palos las consecuencias futuras de las cosas termina intentando evitar las por venir y a la más mínima obra del vecino se termina yendo a la puerta del mismo, no para pararle la obra, pero quizá sí para hacerle que se las tome con calma, que abajo de su casa no hay asfalto, hay otra vivienda. O bien gente que a la primera mancha de humedad ya protesta, para que la tomen en serio. O esas personas que cuando vienen obreros a su casa están todo el rato encima de ellos viendo que hacen y que no hacen e incluso comentando aquello que no les convence.

Claro que el mundo puede ser mejor, pero eso se logra no sólo de parte de una sola parte, sino si todas las partes ponen de su parte. O quizá habría que usar el verbo pusieran de su parte.

En fin, que estoy a mitad de vacaciones y que estoy pensando si en REMAR, una asociación de rehabilitación de personas mediante la restauración de muebles viejos que luego se venden muy baratos de segunda o tercera mano, venderán una estantería de determinado tamaño que necesito. Ya de perdidos al río. Estas vacaciones no están siendo la gloria, pero al menos trato de avanzar en algo. No tengo claro si comprar ahora la estantería o esperar un tiempo, quizá con mirar me vale para hacerme una idea de lo que hay y por cuánto.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

jueves, agosto 21, 2025

NOTICIA 2406ª DESDE EL BAR: UN RULO POR ÁVILA

Es la primera vez que tengo vacaciones propiamente dichas en varios años... pero, teniendo trabajo, sin poder viajar ni hacer nada. Vamos, como siempre, pero esta vez incluso trabajando. Así que los primeros días hice ñapas en mi casa... que se complicaron. Luego empezó a darme una cierta nostalgia y una profunda tristeza. Me acordé de mis padres y me entraron ganas de regresar a aquellos veranos de niño yendo con ellos a la playa de Cullera. Así pensé que llevo entre diez y quince años sin ver el mar entre unas cosas y otras de mi vida. Miré precios de trenes y vi que eran algunos excesivamente baratos, pero la habitación más barata una mera y sola noche en cualquier localidad con mar en agosto, por lo que vi, es de un precio tan exageradamente elevado que incluso un viaje para un simple día se hace imposible. En un arrebato de ansiedad, aún a sabiendas de que lo mejor sería quedarme en casa, por mi barrio y como mucho disfrutar de alguna cosa de las fiestas de Alcalá que empiezan el sábado, vi que el viaje a Ávila en tren está a diez euros y pensé que podría ir a pasar un día allí, volviendo en el mismo día, claro. A ver, no entré en ningún monumento y, aunque mi día era comer un menú del día con algo típico de allí, terminé mal comiendo de pincho de bar porque los restaurantes tenían precios altamente abusivos. Sólo espero que este modelo de precios no termine llegando a Alcalá de Henares. Bueno, estuvo curioso el día. Os comparto el viaje. Saludos y que la cerveza os acompañe. 


La muralla de Ávila fotografiada como a mí me da la gana.

Una vista de Madrid
Una vista de Madrid.
Un león sacando culete porque ya no es cachorro y se le queda chica la pilastra.
Una ermita.
Hace buen día.
Foto de la catedral.


Una señora tomando el sol.

Escombros de la obra que no se han llevado.

Típica postal de Ávila.

Adolfo Suárez con cara seria y sin hablarme. Qué viaje me dio.

Terraza de verano.



Detalle de Ávila.

Tienda de ropa para los paseos de domingo.



Punto de fuga.
Gastronomía típica española.

lunes, agosto 18, 2025

NOTICIA 2405ª DESDE EL BAR: VERANO CALIENTE

 Estaban dos personas desconocidas a mi lado y una dijo que los incendios es porque ya no hay cabras ni ganados y que de eso tenía la culpa Pedro Sánchez. Me imaginé a Pedro Sánchez como un ente del universo antes de nacer, entre los años 1940 y 1960 diciendo a la gente que se vaya del campo a la ciudad, y luego de niño en los años 1970 saliendo de la cuna para espantar a la gente del campo, y de adolescente en los 1980 dispersando rebaños para que la gente se mude a la ciudad. Pero en mi ensimismamiento me vi interrumpido cuando el otro le corrige para decirle que no todo lo que pasa en España es culpa de Pedro Sánchez, pero que los verdaderos culpables son los ecologistas, a lo que el otro, tal vez por la mediocridad o cobardía de no discutir en defensa de su tesis, le da la razón y lo desarrollan. Entonces imaginé la gran culpa de los pacifistas en las guerras. Sin embargo, lo cierto es que ambas tesis las han sacado a la luz en prensa desde hace tiempo un determinado partido que da la llave en muchos ayuntamientos a otro partido, y al final, la lucha contra los incendios termina siendo, para algunos, política. Y me imaginé a los bomberos gritando consignas a las llamas para apagarlas.

jueves, agosto 14, 2025

NOTICIA 2404ª DESDE EL BAR: DE LO DE LOS 4 FANTÁSTICOS

Ayer, aprovechando con ese viento que hizo y con que las entradas eran más baratas, fui al cine para ver Los 4 Fantásticos (Matt Shakman, 2025) con la misma amiga con la que vi Superman. Me gustó que el director quisiera mantener la estética y ambientación de la década de 1960 en la que nacieron en Estados Unidos. Incluso se hizo un breve resumen de sus primeras aventuras nada más ser mutados en superhéroes, que correspondía con las primeras aventuras del cómic. En España llegaron más tardíamente, por cuestiones de censura en la dictadura de Franco en el cómic de superhéroes, aunque en el tardofranquismo pudo levantarse la mano muy poquito como literatura adulta, no como infantil y juvenil. Su momento de esplendor en España fue tardío, ellos crecieron aquí más bien en la Transición, desde 1976, cuando se editaron por primera vez la gran mayoría de sus aventuras escritas a principios de los 1960. Yo ya hablé de censura en superhéroes en aquella España en mi libro Superman, Batman y Franco. La censura en tiempos de Franco. La cosa es que los héroes de Marvel eran todo un frescor en la segunda mitad de los 1970 españoles y eso permitió que hicieran aquí la misma revolución que hicieron en su país década y media antes. Se fueron comiendo a los héroes DC. Quienes fuimos niños durante toda (digo toda, desde el principio) la década de 1980 sabemos que en origen los personajes más exitosos de Marvel en España fueron Los 4 Fantásticos, Spiderman y La Masa (posterior Hulk), quizá seguidos luego por Capitán América, Thor y Los Vengadores. A lo largo de esa década cobraron el relevo Iron Man, Conan, Patrulla X (posterior X-Men), Lobezno (posterior Wolverine), La Cosa en solitario, Dare Devil, El Castigador y otros. Pero en un primer momento, Los 4 Fantásticos, Spiderman y La Masa fueron los fundamentales. 

Yo del mundo Marvel tenía mi preferencia de favoritos en Patrulla X y en Lobezno, especialmente, pero estos fueron más relevantes hacia la segunda mitad de la década, dando la mano a los años 1990. Algún cómic propio tuve, pero las cosas... en fin. Luego me gustaba mucho Spiderman, y leí montones de cómic de él, pero estos no me pertenecían, salvo un Spiderwoman antiguo que me compraron, no entiendo mucho la razón en aquella época, hay que ponerse en contexto sociocultural de los 1980. Capitán América no estaba mal para mí en aquel momento, incluso me compraron un cuaderno con él, pero apenas leí cosas de él, la verdad, normalmente aparecía en mis lecturas con Vengadores o con las Secret Wars. Supongo que en aquellos primeros momentos, antes de Patrulla X, me decantaba por Spiderman, leía viejos cómic de La Masa y me gustaban bastante Los 4 Fantásticos, de los que veía sus dibujos animados y de los que fui seguidor de La Cosa en solitario tiempo después. Pero  mis padres nos compraron pocos cómic de Los 4 Fantásticos, normalmente había que topárselos como artistas invitados o como segundas historias en revistas de otros personajes. En Spiderman no, allí lo común solía ser que la historia secundaria fuera de Dare Devil y en ocasiones de El castigador, antes de tener serie propia... por cierto, a comienzos de los 1990 me enganché a este personaje y a alguna cosa de Motorista Fantasma, aunque muy de niño me daba cosa leerle.

Los 4 Fantásticos eran una serie con una cierta dosis metafísica del universo mezclada con un lenguaje pseudocientífico, pero era también una familia que era un grupo de amigos. Uno real, con problemas internos, afinidades y peleas puntuales. Eso se vio bien en la anterior película de los años 2000.

Tengo un viejo amigo que lo leía más que yo. seguro que me corregiría cada cosa que dijera, aunque sólo fuera por llevar él la única palabra posible sobre el grupo.

La película tiene uno de los mayores acercamientos al espíritu del cómic original que se han rodado. Incluso el carácter de héroes populares y queridos un tanto näif. Tiene su música que nos recuerda los años 1960 y, como familia que es, pareciera rodada precisamente para eso: para las familias. 

Cobra el mayor protagonismo Sue Storm, con lo que la heroina principal es ella, empodera a la mujer en este mundo de superhéroes, aún siendo un metraje que equilibra muy bien la aportación de protagonismo de todos. Sue Storm es una heroína en esta película que no necesita imitar a un hombre. Ella es poderosa y empoderada, pero no rechaza tampoco su ser mujer, no necesita sentir, pensar ni comportarse como hombre, tal como hicieron con otras superheroínas, que por desdibujarlas eran incluso la versión mujer de héroes masculinos en nombre y en traje. Ella no necesita eso. Ocurría también en el cómic. Tal vez por eso, en los años 1960, junto a Wonder Woman en DC, eran las dos heroínas femeninas por excelencia para las niñas y jóvenes, y no eran rechazadas en absoluto por niños y jóvenes. Luego vendrían las de Patrulla X, pero eso es otra historia, una más rebelde. No olvidemos que Sue Storm aquí es esposa de Reed Richads y hermana del Hombre Antorcha, que incluso fue madre de un niño y una niña. Y no es que fomentara la convencional madre de familia, ella era algo más, una mujer independiente, que no tiene porqué ser ama de casa y que toma sus decisiones, entre ellas: tener familia.

Galactus, uno de los personajes más malvados de Marvel y ahora mismo, tras esta película, tal vez del cine, aparece aquí en todo su explendor. Estela Plateada, aquí en su versión femenina más reciente, en mis épocas era un hombre, es otro de los grandes personajes del cine Marvel.

Aunque el guion tiene algo en su primera mitad que no terminó de engancharme o de hacerme empatizar con lo que les pasaba, hacia la mitad de la película esto cambia, porque además uno de esos ganchos está no tanto en los personajes, sino en ese tratamiento mediático que de ellos se tienen, y en consecuencia en cómo viven la fama en su vida íntima. La vida íntima de La Cosa aparece en el cómic, pero en esta película también, con su pasión familiar que se ve acomplejada e imposibilitada por esa transformación en hombre de piedra. No me convence su barba en esta película, pero se tolera.

Quizá son sus detalles lo que más me gusta del metraje junto a orientaciones sutiles que, dentro de una historia de superhéroes, nos muestran otros aspectos más mundanos. Ahora bien, como ocurriera en otras películas de superhéroes posteriores al 2001, parece que muy de fondo hubiera un mensaje de desastre bélico inminente e inevitable, por lo que vienen tiempos de sacrificio. Sin embargo, mientras en otras películas del género esta inevitable ida a la guerra, la muerte y la destrucción se resuelve aceptando el sacrificio, en esta otra el mensaje es otro más positivo. Desde el intento de agotar todos los medios pacíficos antes que luchar, a los intentos de evitar muertes, incluso del malo, como de minimizar todos los daños posibles, al menos en cuanto a vidas se refiere. Y ahí hay otra vuelta de tuerca, un mensaje del director en estas épocas de guerras: hay que evitarlas, pero si son inevitables, hay que reducirlas a los mínimos daños posibles... Aún siendo que por aquello del espectáculo en esta película lo mínimo es mucho.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

martes, agosto 12, 2025

NOTICIA 2403ª DESDE EL BAR: O LA BRISA

Trabajar en casa con el ordenador en mi despacho es algo propio de sauna. Esta extensa ola de calor va camino de cumplir dos semanas de extensión y ubica a Alcalá de Henares entre los 39º y los 40º en las horas de máximas, los cuáles suben cuando inciden sobre asfaltos y paredes que hacen que por un lado se tenga mayor número de grados y más sensación de calor, así como crean un efecto horno dentro de los hogares que, como el mío, no tiene más medio de refrigeración que los tradicionales de cerrar ventanas o hacer corrientes de aire (cuando hay brisa). Mis ocho horas de trabajo hacen aumentar más la temperatura en el despacho, por una parte por mi propio calor corporal, que aunque parezca que no suma grados a la pequeña habitación, lo hace; por otro lado por el recalentado del ordenador encendido y su batería. Hace un rato miré el termómetro del cuarto y estaba tres grados por encima de lo que marca el de la calle. 

Una enorme mancha de sudor marca el respaldo de mi silla, al que le he puesto un par de camisetas viejas, por aquello de la higiene y ser más fácil de lavar. La radio da noticias de guerras, de corrupción o, como hoy, de incendios. Ayer hubo una gran cantidad de humo y cenizas sobre Alcalá de Henares por un incendio a últimas horas de la tarde que aún sigue activo esta mañana. Fue en Tres Cantos, a treinta y seis kilómetros de Alcalá. No es el primer efecto de incendio este verano sobre la ciudad este año. Hubo otro en Azuqueca de Henares y aún otro en una fábrica en los barrios de entrada a Madrid desde Alcalá que dejaron sentir sus efectos. Alcalá misma ha tenido sus propios incendios este año, afortunadamente pequeños en comparación con los otros, en la Isla de los García, creo que en la Esgaravita y Los Olivares-La Seda. 

Es un año recalentado en la segunda mitad de la canícula, que está a tres días de acabar. la primera mitad de la canícula fue sorprendentemente más fresca por una inusual y anómala lengua de frío que nos llegó del Ártico. 

Los polos se derriten, eso no es bueno. No hace mucho leí en prensa que la quema de espacios naturales en Europa la está colocando en un punto drástico de posible no retorno. Eso tendría consecuencias catastróficas, pero hablando de esto con un vecino, este, preocupado, dijo que la peor parte se lo llevarían los de la playa, porque se quedarían sin paseo marítimo. La gente sigue sin ser conscientes de verdad de lo que va esto y las consecuencias realmente graves de todo esto. La misma persona es renuente al reciclado y si puede viajar, viaja a todas horas aunque no lo necesite.

A otras generaciones se les pidió morir en las Termópilas, en las playas de Normandía, en Poitiers, sacrificarse en Verdún, inmolarse en Sagunto, caer en Waterloo, a la nuestra se le pide consumir menos y más ecológicamente, no abusar del aire acondicionado, no coger tanto el avión o el coche, ser más respetuosos con el medio ambiente, conservar la Naturaleza, y pareciera que se hubiera pedido un imposible.

Hace calor, es la canícula; sólo que la canícula últimamente va siendo cada vez más brutal, cada año un récord.

Y sin embargo, la primera parte de la canícula tuvo sus momentos frescos. Ay, el Ártico.

Saludos y que la cerveza os acompañe... o la brisa.


lunes, agosto 04, 2025

NOTICIA 2402ª EN EL BAR: DE LO DE SUPERMAN

Una vez vista la nueva película de Superman (James Gunn, 2025) entiendo que, aún siendo una película de acción y superhéroes, contiene un cierto subtexto sobre la política internacional actual. Es indudable que la trama central recurre de lleno a la crítica a los países que invaden territorios con idea de eliminar su población y, aunque uno de los malos es presidente militarista de un país del Este de Europa (o eso hace creer acentos, trajes, arquitectura y hasta colores y diseño de bandera, parece una referencia del caso Rusia y Ucrania, aunque en este caso el invadido no es equivalente a Ucrania), se critica severamente las acciones bélicas de Israel en Gaza, dado el contraste de ejército atacante contra civiles musulmanes pobres que, se ve en la película, tratan de enfrentarse a los tanques incluso con una horca. Por otro lado, la caracterización de aquel líder político invasor, aún a pesar del acento como si fuera del Este europeo, y aún siendo una persona despeinada, recuerda fuertemente a Netanyahu. James Gunn ha negado que este paralelismo exista, y ha negado que haga ninguna crítica política, él dice que la película va de moralidad y bondad... Pero hay cosas en la película tan evidentes que es como si Gunn nos dijera que la leche no es de color blanco. Sea como sea, la película no ha sido censurada en Israel.

En esta ultima semana, incluso hoy, algunas voces políticas y hasta voces que pertenecieron al servicio secreto israelí, comienzan a dejarse oír criticando las operaciones militares de su propio gobierno en Gaza y reconocen y señalan lo que está ocurriendo que otros países del mundo y otras voces llaman genocidio y muestran muertes indiscriminadas de civiles, de numerosos niños y el gran hambre que mata gente. Con estos elementos en la mesa, pienso que la caída del gobierno Netanyahu se dará sin duda y que tarde o temprano va a tener que dar cuentas de sus actos, tal como varios organismos internacionales le piden. Cuando esto ocurra es probable que Israel no deje de tener el apoyo de Estados Unidos, pero sí recibirá serios reveses de parte de Estados Unidos. Más que nada porque Estados Unidos ha construido su idea de identidad nacional como defensores de la libertad y la justicia, siempre bajo su punto de vista. Ese punto de vista a menudo se liga a lo que internacionalmente se pueda opinar de ellos. Por ello, si Netanyahu y todo aquel que haya estado detrás de lo que está ocurriendo en Gaza, desde el puesto más elevado al más raso, finalmente es, son, defenestrado por los suyos mismos, y si los propios israelíes en general deciden que ya no quieren seguir dejando de ver, a Estados Unidos, y muy especialmente Trump, no van a querer ser identificados como los que estuvieron en tal bando de la Historia y de lo que ha ocurrido a decenas de miles en Gaza, por lo que es previsible que, cuando llegue ese futurible, que creo que llegará, es probable que veamos un volantazo estadounidense nada agradable para quienes ahora se creen avalados por su apoyo. O al menos eso pienso yo, me puedo equivocar.

Sea como sea, yo fui a ver una película de Superman que me gustó. Se trata de un Superman muy cercano al de los cómic de finales de la década de 1980 y la década de 1990, que es la de mi niñez y juventud. Muy cercano a los guiones de Jurgens, que ignoró si habrá tenido algo que ver en asesoramiento. Entiendo que las personas más apegadas a u Superman más clásico no entiendan este Superman, que es falible y que tiene un lado humano que deja guiños a otras historias que hemos conocido en los cómic. Pero es también un Superman que regresa al humor que tenía Christopher Reeve, sólo que puesto al siglo XXI. Aquel de Reeve nos mostraba un mundo con problemas que nos eran más o menos cercanos, comunes, mientras que este otro opta por monstruos, mutantes, extraterrestres. El de Reeve siempre será el mejor, y mejor planteado, pero este Superman no es un mal Superman. Es el de los cómic de 1990.

Sea como sea, es verano. Eso es lo que se puede decir realmente desde este lugar en el que escribo. Trabajo y poco me queda para mis fechas de vacaciones. Saludos y que la cerveza os acompañe.