Ayer tuve un día de dar vueltas con objetivos que en realidad no llevaban a ningún lado. Madrugué para ir a otra entrevista de trabajo más, esta vez en Pozuelo de Alarcón. Sin embargo la chica que me citó se equivocó de combinación de transporte público cuando me la indicó. Así que comprobé que preguntar por la calle General Mola puede irritar a al menos un anciano, no por la calle en sí, sino por el nombrecito al que rinde honor la calle. Hube de coger un nuevo medio de transporte después de llamar a la empresa y corregir el error de dirección, me esperaban tras una hora tarde, comprendieron su error. Pero me retrasé más aún, porque no había nadie en la taquilla de billetes y no tenía monedas para la máquina expendedora, mi billete de 20 era automáticamente rechazado por viejo. Tuve que tomarme un café, pero la camarera tardó en atenderme porque estaba hablando con... las dos mujeres que debían estar atendiendo la taquilla y estaban, las dos a la vez, en su hora del café. En fin, sea como sea, al final llegué para realizar una entrevista para un trabajo que ni cubría mis necesidades ni me interesaba. tiempo perdido de toda una mañana.
La tardé se esfumó, no sé muy bien cómo, pero se esfumó tras acabar de comer en mi casa, en Alcalá de Henares. Asíque me fui al cine para ver "Las 13 Rosas", una película que me interesaba porque mis investigaciones como investigador de Historia me tienen habituado a expedientes de depuración de la dictadura, y quería ver la película por cuanto trata de la represión en los años que he tratado con documentos originales de archivos. Se supone que iría con amistades, pero a la hora de ir unos no pudieron, otros no quisieron, y acabé yendo solo, que es como suelo ir al cine desde hace mucho tiempo, salvo cuando me acoplo al Chico Gris (y hace mucho que no lo hago), pero en realidad cuando voy por iniciativa propia y no acoplándome a iniciativas agenas, no logro que nadie venga conmigo. Visité el Maimónides para tomar una cerveza, prácticamente estaba vacío, cosa curiosa, asíque me fuí al bar de los Cines Cisneros de la Plaza de los Santos Niños. Lo bueno de ir allí es que puedes acceder al cine por una puerta lateral de dentro del local. Además en esos cines, aparte de proyectar la película que quería, así como que es un cine de películas de autor, festivales de cine y a veces ponen versión original, conozco a dos de los que allí trabajan. El taquillero y el encargado. De hecho no estuvo mal lo de ir allí y aprovechar para saludarles. El amigo encargado me regaló un pase gratuíto para dos personas para otro día que fuese. ¿La palabra gratis atraerá a alguien la próxima vez que vaya al cine por iniciativa propia? Tal vez.
Salí del cine y al ser ya de noche me fui a La Vaca Flaca, no había nadie, salvo el Vaquero y una amiga suya. Contamos anécdotas y poco más. De regreso a casa, "Muchachada Nui" y una carta de otra fundación cultural que rechazaba mi solicitud de empleo.
Anoche soñé que vivía en un mundo donde las personas que más me atraían eran dibujos animados... y yo, por otra parte, iba por la calle con Alfred Hitchcock, hasta que me encontré a mi padre y me fuí a atravesar el mar en barco; encontré en el barco a una amiga de la infancia que hace quince años que no veo, literalmente, y me hace hacer el pino a ver quien dura más. Yo pierdo, pero al caer al suelo veo a Mauricio que me insta a defender una calle. Y defendiendo la calle me disparan y Mauricio me dice que todo está perdido. Al despertar esta mañana tengo a la gata maullando para que le dé agua y me levanto para dársela. Pienso que sus maullidos son la mar de útiles.
4 comentarios:
¿viste Muchachada Nui y en tu ensoñación no apareció Kurt Kobain?
Algo apesta en Dinamarca!!!
Vaya tarde más completita, saludos!!!
Después de leer esto, no sé si iré a ver las 13 rosas...
TORTLON: ¿pero por qué Kurt Cobain no atravesaba el suelo hasta aparecer por Nueva Zelanda? Hmmmm... Curtney Love hizo la gran pregunta.
PCBCARP: hombre, ves a verla, peca un poco de abusar del lenguaje cinematográfico, pero es que es una película, no un documental. Igual que le pasaba a la de Salvador Puig Antich. Está bien.
Canichu, te invito a escribir sobre Trece Rosas para kinephilos, ¿te gustaría? A mí, mucho, leerte en mi blog.
Un saludo a tu gata, y otro a ti.
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