Llevo un largo rato delante del ordenador a punto de escribir algo para esta bitácora, de hecho: toda la tarde. Pero no me ha surgido nada realmente. Podría haber hablado del evento de presentación de un libro de Pub O'Malley's al que asistí el domingo, pero lo he dejado para cuando lea el libro, para Las notas de los cíclopes libreros. Otra opción
hubiera sido compartiros como rescaté un mueble de discos, o mejor aún, como
hace una semana rescaté a una cría de vencejo y cómo tomó confianza conmigo el tiempo que pasó en mi casa antes de poder llevarlo a la protectora de animales. Podría haber explicado por acá porque tras medio mes tratando de organizar un recital propio lo cancelé hoy. Pero no lo vi, porque no creo que sea escuchado, al igual que asistí a una conversación donde se hablaba como si fuera una novedad una noticia local que en realidad yo ya les había comentado con detalle un mes y medio antes a varios de los que hablaban. En general ha sido un día de silencio en casa, arañado por capítulos repetidos de una serie de televisión con casos de misterios y crímenes. Apenas leí un par de páginas de un libro creyendo que tal vez leer me entretendría, pero no tenía ganas de leer. Así que aquí estoy delante del teclado sin contar hoy gran cosa, y en el fondo estoy contando algo importante.
Este es un blog de un escritor cervecero que pretende hablar de él, de Historia, de sus ídolos, de sus paranoias propias, mostrar sus escritos... pero en definitiva son informes de un espia en el bar.
lunes, septiembre 15, 2025
NOTICIA 2413ª DESDE EL BAR: ENTRE PALABRAS
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario