martes, mayo 28, 2019

NOTICIA 1878ª DESDE EL BAR: INTERIM

Antes de analizar el resultado electoral voy a esperar unos días. Quisiera antes observar que ocurre y cómo ha sido el voto en cada zona. Tengo unas primeras impresiones, que no se desvían mucho de lo que suponía que iba a ocurrir. Pero sí que es verdad que me llama la atención la cantidad de alarmismo que se ha levantado cuando en realidad nada diferente ha ocurrido, y cuando en realidad la alarma no debería estar por quienes no están y por quienes están más o menos representados en las instituciones, si no que debiera ponerse la gente en guardia justo por lo que no lo hace: por lo que predeciblemente está en la cabeza del presumible presidente de gobierno, Pedro Sánchez, una vez que ya tiene todos los resultados electorales aclarados. Pero ya comentaré más tarde, hoy no.

Entre tanto creo que se puede hablar de otras cosas, como siempre. Pero una vez más, tras escribir muy diversos párrafos sobre otros temas que no tienen que ver con las elecciones, más de corte personal, y recurrir a la autocensura de nuevo, quepa de momento simplemente dejar esta entrada así.  Algún día, quizá...

Saludos y que la cerveza os acompañe.

jueves, mayo 23, 2019

NOTICIA 1877ª DESDE EL BAR: MEGA AÑO ELECTORAL: LAS MUNICIPALES

De todo el mega año electoral (y lo que podría quedar) toca ya el turno a hablar de las elecciones municipales, y este año hablar de ello parece algo inquietante, y no tanto por el auge de la extrema derecha (cuya inquietud que genera es de otro orden), sino porque siendo el que escribe una persona abiertamente identificada con los ideales de izquierda y que en lo relativo a la política municipal ha defendido la orientación del voto ecológico, pareciera que este año no estar de acuerdo con algunas cuestiones del actual gobierno te convierte a ojos de algún miembro de los grupos de gobierno actuales poco menos que en enemigo, siendo esa visión irreal y siendo el resultado algo incómodo e ingrato. Izquierda Unida, Los Verdes o Somos Alcalá han sido analizados positivamente en esta bitácora, Noticias de un  espía en el bar, en otros periodos electorales, así como a lo largo de los años hay cuestiones y políticas del resto de grupos políticos que me han podido gustar y por tanto he apoyado, y otras veces pues abiertamente me producen rechazo porque no me parece el modelo social, cultural, etcétera deseable para avanzar. Hasta aquí no he escrito nada que no le pase a absolutamente todos los ciudadanos de todas las diferentes ideas y tendencias, ni que no reflexionen. Lo que varía es que este año parece que de cara a los simpatizantes más activos en las redes sociales si tú, apoyando el conjunto de las políticas de izquierda y sociales de un grupo, muestras dudas o discrepancias con algún punto de su política o con algo de lo hecho, lo que ocurre es que, usando la metáfora del exvicepresidente de gobierno Alfonso Guerra sobre el que se mueve no sale en la foto, pues lo que ocurre es que si presentas algún tipo de duda o discrepancia te echan a empellones de la foto de quién es y quién no de izquierda y poco menos te meten en una especie de complot oscuro y secreto de las derechas complutenses para derribar a los partidos de izquierda que gobiernan. Repito esto es algo que ha ocurrido en las acciones de algunos de los más férreos seguidores de un grupo político. Por ello, si en principio ante estas elecciones yo me planteaba como reflexión de mi voto qué modelo de ciudad quiero y sumarle quién creará mejor política verde, ante esto que ha ocurrido en redes sociales reflexiono en estas elecciones también algo inesperado y no invitado en mi planteamiento de reflexión total, que es: qué modelo de comportamiento político y social quiero.

Creo que en democracia y siendo los individuos libres, el debate es algo sano, y el no estar de acuerdo, o presentar dudas, o no estar del todo de acuerdo, con alguna cosa no es sinónimo de ser adversario político, ni es saludable contemplar como enemigo a derribar a todo aquel que no coincida al completo con uno. De hecho la izquierda es altamente conocida precisamente por los ricos debates entre sus miembros, en cualquiera de las vertientes de la izquierda, cosa que historiadores conservadores han sabido malvender como "división de la izquierda" muy a menudo, no siendo así en muchos de los casos que exponen. Obviamente remarco que estas actitudes de ataque al simpatizante que en algo no coincide con el que lleva la batuta se han dado en determinados usuarios de redes sociales, no específicamente conmigo, pero sí lo he visto reproducido en los espacios de amistades, conocidos y grupos. No ha sido la dinámica de ningún grupo ni partido político de manera oficial y explícita. Podría decirse que puede haber actuaciones de personas a título personal, y así es. Quepa reflexionar que si hubieran existido las redes sociales en los años 1930 y hubiera participado Himmler atacando a los seguidores de Röhm, líder nazi homosexual de las SA, o a los socialdemócratas, ¿se podría decir dónde estaba el límite de su participación a título individual y donde el de su participación como miembro integrado en el partido nazi? Elijo unos personajes tan relevantes para que con la exageración del ejemplo se entienda mejor la idea, no para insinuar equiparación alguna. No insinúo ni digo equiparación alguna.

Nunca he ocultado mi simpatía anarcosindicalista, al igual que tampoco la ecologista, ni que soy de estos que optan por el voto, dentro de las opciones de la izquierda, que son las que creo más útiles a la sociedad bajo mi criterio personal, del mismo modo que defiendo al que desea ejercer su derecho a la abstención activa y lamento la pasiva y la forzosa. Y defiendo el derecho a discrepar quien crea que deba hacerlo siempre con ánimo constructivo. Por eso, soy contrario a la censura política, al señalamiento político y al creer que la política es asentir lo que diga o haga el partido o lo que diga o haga el líder, que es algo sumamente antidemocrático, a pesar de que se venda eso hoy día como democrático desde el mismo momento que, por ejemplo, se usa el concepto de disciplina de voto entre los electos, y el de disciplina de partido entre los militantes de carnet.

Hechas estas reflexiones previas, quepa decir ahora que es muy evidente que en Alcalá de Henares se ha producido una fragmentación de la izquierda de partido en varios partidos y grupos políticos. Esa división no estaba en las elecciones generales, parte de ella está en las autonómicas, pero ya en las municipales es una nueva partición sobre lo ya partido en las autonómicas, lo que complica todo mucho para el elector de izquierdas. Sobre todo porque algunas de estas particiones apenas tienen, por decirlo en metáfora, media hora de existencia y dos segundos en Alcalá, por lo que son grandes desconocidos y en muchos ciudadanos existe el desconocimiento de quién es quién y qué les diferencia y porqué. Es alto el número de personas que personalmente o en escritos privados me han preguntado precisamente por estas cuestiones. Sólo este dato me hace reflexionar que en estas elecciones municipales el gran beneficiado será el PSOE, de Javier Rodríguez, que está indiviso en la izquierda, que ha tenido la alcaldía estos cuatro años y que además la tendencia reflejada en las generales de abril le benefician. El resto de la izquierda al dividirse dividirán el voto y tendrán probablemente menos representación, pero es legítimo que cada cual vote a quien crea que más le representa, la cuestión es: ¿tienen claro quién representa qué para votar?

Antes de valorar cuestiones de los últimos cuatro años o de la actualidad, dado que se han presentado diez partidos y grupos políticos para las elecciones de este domingo, los nombraré, para que al menos se tenga claro qué opciones municipales hay en los comicios alcalaínos. Hay cinco partidos claros de izquierdas, cuatro claros de derechas y uno que no sabría decir y lo consideraré de centro. Procedamos:

PARTIDO HUMANISTA (PH): Siempre son mi gran incógnita. Los conocí personalmente en 1995 ó 1996, siendo yo muy joven, aún ni siquiera tenía edad de votar, cuando algunos de sus miembros estaban en la revista literaria Omnia, en la que publiqué un poema de adolescencia y participé de alguna de sus reuniones. Hace ya mucho de aquello. No suelen tener un número de votantes relevantes, pero los tienen fieles. Pocos, pero existentes. Lo contemplo como un partido de centro político, sus valores son precisamente lo que su nombre promete: los humanistas. Esos valores que empezaron a patrocinar los renacentistas en el tránsito del siglo XV al siglo XVI y que posteriormente se fueron actualizando y perpetuando a la vez en los siglos posteriores, máxime con los masones desde el siglo XVIII y con los ilustrados también desde ese siglo, con Voltaire o Rousseau, o con los positivistas del siglo XIX, con Comte a la cabeza, o bien con todos aquellos de los socialismos utópicos tipo Owen, Saint-Simon, Fourier y otros. La perfeccionabilidad de la persona y el progreso positivo continuo. Personalmente confieso que no sé muy bien cual es su programa este año, ni tampoco en las anteriores elecciones de 2015. Es uno de los partidos veteranos de Alcalá, pero me parece que no han sabido fomentar su programa actual.

PARTIDO SOCIALISTA OBRERO ESPAÑOL (PSOE): Liderados por Javier Rodríguez, actual alcalde. Han gobernado por un pacto tripartito desde 2015, conjuntamente a Somos Alcalá y a Izquierda Unida (IU), en un primer momento, y ante la expulsión de la concejala de IU de la propia IU, como tripartito PSOE-Somos Alcalá-Concejala del Grupo Mixto, aunque a mí me da en la nariz que en los últimos años ha sido más bien PSOE-Somos Alcalá. El gobierno del PSOE en la ciudad ha sido un hecho constante desde las primeras elecciones municipales de la actual monarquía parlamentaria, entre 1979 y 1995, sufriendo incluso un atentado con bomba en el coche de uno de sus alcaldes, Carlos Valenzuela, cerca del Parque O'Donnell por parte presunta y de carácter evidente de la extrema derecha (Noticia 732ª). Volvieron a la alcaldía en coalición con IU entre 1999-2003, donde hicieron su primer intento de peatonalizción del centro de la ciudad, fracasado, y un primer llenado de la ciudad de rotondas y de olivos decorativos. Y ya no volverían a la alcaldía hasta las citadas elecciones de 2015, con el tripartito citado. Actualmente es el partido mejor ubicado para revalidar el gobierno y continuar su labor iniciada en 2015. Luego analizamos más de esto. Con los partidos de la izquierda partidos, y con la derecha clásica debilitada y la extrema derecha dividida en Alcalá, su principal adversario pasa a ser la derecha liberal de Ciudadanos. El principal temor del PSOE local es que sus posibles aliados de izquierda  no saquen votos suficientes para apoyarle en la formación de un nuevo gobierno y que ese camino quede abierto a la unión de todas las derechas complutenses, dejando cabida así a posibles concejalías de extrema derecha. Ahora bien, el PSOE local sale a intentar gobernar por sí sólo, personalmente creo que lo tiene tan fácil por varios factores, que sólo un auge grande de Ciudadanos podría evitarlo, si bien es cierto que si necesitaran una coalición con otros grupos de izquierda necesita que estos otros partidos de izquierda no salgan escaldados de sus propias riñas entre ellas mismas. Ahora mismo el PSOE local es la única izquierda que no presenta fracturas y se encuentra a gusto y acorde entre sí, con un futuro presidente de gobierno (presumiblemente) que es amigo de Javier Rodríguez y un posible presidente de la Comunidad de Madrid también del PSOE. Ellos son socialdemócratas, obviamente, a pesar de que desde la Transición el PSOE ha optado a menudo por políticas que les alejan de esa vía, al menos en lo nacional. Localmente, en Alcalá, esto no es así. Javier Rodríguez ha demostrado su solvencia socialdemócrata y su compromiso con las clases trabajadoras, aparte de su recuerdo y homenaje a todos los que en algún momento defendieron la democracia, labor que lleva haciendo desde antes de que fuera alcalde y en actos tanto pequeños como grandes y sonados, soy testigo físico como historiador en muchos actos y eventos. Ahora bien, cabe la pregunta de si algunas políticas de barrio que ha realizado las hubiera realizado sin tener de socio a Somos Alcalá, del  mismo modo que cabía la pregunta sobre la política social del PSOE en el gobierno de no haber tenido de socio a Unidas Podemos, ya que muchas de las cosas hechas estaban en los programas de Somos Alcalá y de Unidas Podemos respectivamente.

SOMOS ALCALÁ-EQUO:  El Somos Alcalá de 2015 no es exactamente el Somos Alcalá de 2019. En 2015 dentro de Somos Alcalá estaba Podemos y también IU y Los Verdes y Equo, si no recuerdo mal. Ahora estos no están ahí y Equo se presenta con Somos Alcalá con entidad propia, de ahí que se hagan llamar Somos Alcalá-Equo. Somos Alcalá es una agrupación electoral y Equo es un partido ecologista nacido de algunos integrantes que fueron de la organización no gubernamental ecologista Greenpeace. Quizá el llevar entidad propia en el nombre y la organización sea para remarcar el carácter y la voluntad ecologista con la que se presentan en este 2019, siendo en 2015 recogida esta misma voluntad cuando patrocinaban a Alberto Egido, su líder por entonces y actual concejal de Medio Ambiente, como activista de Ecologistas en Acción. Un repaso a hemeroteca o a la propaganda electoral de 2015 nos rescata de la memoria aquello. Ahora mismo Somos Alcalá está liderado por Olga García, teniente alcalde actual y concejala de Infraestructura y Vivienda, Patrimonio Histórico y de la Junta de Distrito III. ¿De dónde viene la ruptura de esta agrupación electoral para que se formen casi todos los grupos de izquierdas que se presentan ahora? Nos tenemos que remontar a 2015. En aquellos momentos el PP estatal, autonómico y local se veía inmerso en acusaciones, investigaciones, procesos judiciales y condenas por corrupción. Además, estaba en marcha la llamada policía política, hoy en los tribunales acusada de ser creada por el Ministerio del Interior para incriminar con pruebas falsas y difamaciones a la nueva izquierda. Ese era el ambiente. Por entonces Somos Alcalá decidió que sus concejales, una buena parte de ellos de Podemos, renunciara a una parte importante de su sueldo para donarlos a causas sociales que realizaran asociaciones de Alcalá. La fórmula que emplearon era correcta, pero a propios y a contrarios les pareció algo tan difuso que el PP local se apresuró a denunciarles por posible delito de corrupción por prevaricación, mientras que su propia gestión del ayuntamiento con Bartolomé González y Javier Bello era investigada por la policía judicial. La cosa hizo mella y Somos Alcalá tuvo que verse acusada de corruptos por prensa local, ciudadanos, los otros grupos políticos, salvo el PSOE, y otros grupos de izquierdas, incluso fueron cuestionados por familiares y amigos. Así las cosas avanzó 2016 y se metió 2017, mientras cientos de miles de euros de sus sueldos se iban recaudando y financiando filantrópicamente causas sociales. Pero se aproximaban las primarias de Podemos y el partido a escala nacional tenía revulsivos y divisiones internas, la más sonadas las de las peleas entre Pablo Iglesias e Íñigo Errejón. Para situarnos, Pablo Iglesias sería el ala más a la izquierda de Podemos, mientras que Errejón representa el ala más moderada o a la derecha de la izquierda de Podemos, si lo preferimos así. Mientras Iglesias ponía muchas líneas rojas para llegar a acuerdos con PSOE, por ejemplo, Errejón tendía puentes al PSOE y ponía pegas a los acuerdos con IU de los que Iglesias está satisfecho. Para diciembre de 2017 el secretario de Podemos en la Comunidad de Madrid, Ramón Espinar, tendente a Iglesias, dijo duras palabras contra sus concejales en Somos Alcalá, demostrando que los dejaba a la deriva, y posteriormente para diciembre los expulsó, negándoles credibilidad y apoyo. El asunto es que estos concejales de Podemos Alcalá no eran tendentes a Pablo Iglesias, aunque no sabría decir si les gustaba alguna otra corriente tipo Errejón, Echenique o si tenían criterio propio, que es posible que sí. En junio de 2018 se celebraron las primarias en Podemos Alcalá, ganó muy evidentemente Luis de Santiago, tendente a Errejón, o aparentemente en sintonía con los postulados de Errejón. Espinar desde Madrid invalidó el resultado alegando un fallo en las formas del proceso y colocó como ganadora a quien en realidad no obtuvo casi votos, Teresa López, tendente a los postulados de Iglesias. Para agosto Luis de Santiago, netamente en Somos Alcalá junto a los otros expulsados, denunció en el Comité de Garantías. Así se fueron forjando divisiones y enemistades, mientras que el caso de acusación en los tribunales seguía su curso. En este mayo de 2019 al fin llegó la sentencia: la causa quedó archivada. No había corrupción, prevaricación, ni nada. Todo era legal y correcto, pero por el camino han habido años de desprestigio y difamación y la ruptura política de Somos Alcalá, aparte de la apertura de ojos de algunos compañeros que, antes de Somos Alcalá, lo fueron del 15M (quien escribe nunca ocultó que fue del 15M, como nunca oculté que yo no formaría parte de ningún partido político ni agrupación electoral, pues creo que el sentido del 15M y del individuo libre es otra, pero ese es otro debate). Como sea, Somos Alcalá ahora mismo se define a sí mismo como municipalista, por considerar que sus propuestas son de índole netamente municipal y social, aunque es innegable, aunque no lo admitan en su programa, que su tendencia es de izquierda y asamblearia. En cuanto a Equo, se presentaron en Alcalá en 2011. Yo estuve en aquella presentación y me generaron varios "peros", sin convencerme varios de sus planteamientos. Hoy por hoy no se ha solventado esto. Lo conté y desgrané en Noticia 991ª. Por otro lado, en un grupo de Facebook llamado Amigos de los Árboles de Alcalá de Henares, se rumoreó por parte de algún participante que había oído a miembros de Equo que no querían árboles en las calles, sino en los jardines y zonas verdes naturales, del mismo modo que otro comentó que el concejal Egido, de Medio Ambiente y miembro que se dijo en 2015 de Ecologistas en Acción, alguna vez dijo que considera los olmos especie invasora por lo que es partidario de que se eliminen de las calles. Llegados a este punto, sería bueno que quedase claro si esos rumores son reales, si de serlo es sólo opinión particular y no de gobierno, y si está afectando o no a decisiones que llevan a talas masivas en las calles complutenses. Luego volveremos sobre el asunto árboles. Sus propuestas en todos los demás campos giran en torno a políticas sociales, para mi gusto en cuestión de empleo se quedan cortos e insuficientes. Sigamos con los grupos que se presentan.

UNIDAS PODEMOS-IZQUIERDA UNIDA (PODEMOS-IU): Narrada de donde viene la división, poco queda que decir de dónde surge. El Podemos actual no cuenta con pesos pesados ya como Suso Abad, que es el segundo de Somos Alcalá. Les lidera Teresa López. El segundo de ellos es David Cobo, un histórico joven de la Historia reciente del Partido Comunista de España (PCE) en Alcalá de Henares y de IU. Está claro que en las disputas de Podemos en Alcalá, al producirse la ruptura entre ellos y luego con Somos Alcalá, la formación de IU en Alcalá de Henares optó por seguir la doctrina de partido que hay a nivel nacional y autonómico para seguir en coalición con entidad propia junto a Podemos, formando lo que se llama Unidas Podemos. Hicieron un buen trabajo todos juntos en Somos Alcalá, pero ya no van de la mano, y esto es quizá lo que más confunda al electorado de izquierda de Alcalá, sobre todo al poco o medianamente informado, que se les escapará muchos datos de todo lo contado y sobre todo cuáles son sus diferencias y postulados. También es verdad que buena parte de ese trabajo juntos lo hicieron los concejales que hoy día pertenecen netamente a lo que en 2019 llamamos Somos Alcalá. Hasta donde a mí me han contado un par de voces directas de Somos Alcalá y algún otro sitio, Somos Alcalá trató de mantener la unidad de 2015, pese a las diferencias, pero Unidas Podemos iniciaron la ruptura y tras esta... las otras. Como sea, sus propuestas y postulados van en consonancia con las ya muy conocidos de Podemos y de IU en torno a aumentar las políticas públicas. Una de las iniciativas que me parecen necesarias es mejorar la comunicación Alcalá-Madrid creando un carril bus-VAO, y a la vez disminuir el precio del abono transporte, o al menos trabajar por ello. No es poco, para los que tenemos trabajos precarios, el B3, que es el abono que nos toca, vale 82€ mensuales, el aumento descomunal fue cosa del PP con Esperanza Aguirre en su día presidiendo la Comunidad. Cobrando sueldos de 800 euros, o quien tenga la fortuna de cobrar ya los 900, quitarle IRPF y estos 82 euros supone una disminución altamente drástica y no se puede ahorrar. Se vive precariamente. El IRPF es necesario pagarlo, pero el abono, ciertamente, debería ser menos lesivo, especialmente para los trabajos precarios que requieren movilidad entre municipios.

LA IZQUIERDA HOY-LOS VERDES (LIH-GMLV): IU Comunidad de Madrid también tuvo su particular ruptura en estos años. Se produjo en el verano de 2015, tras las elecciones. Culparon del fracaso electoral a la decisión de Garzón, secretario general de IU, de ir unidos a Podemos, de ahí el Unidos Podemos de aquella época, hoy: Unidas Podemos. IU Comunidad de Madrid creyó que unirse a Podemos era acercarse a una nueva socialdemocracia y alejarse de los postulados más a la izquierda de IU, normalmente liderados por el PCE. Hicieron duras acusaciones y prácticamente actos de rebelión interna. IU Comunidad de Madrid fue expulsada de IU, al menos una buena parte de sus militantes. Aunque a nivel local en Alcalá IU sigue unida a Podemos, La Izquierda Hoy nace de los expulsados de IU Comunidad de Madrid en 2015. Su programa recoge el clásico programa de IU antes de unirse a Podemos y le aunan el de Los Verdes, que en comicios anteriores (no en 2015) eran cuarta fuerza política. Los Verdes, partido ecologista independiente, estaba integrado en IU hasta que en determinado momento de los 1990 decidieron ir por libre, aunque en algún momento se presentaron con entidad propia junto a IU. Puede que me falle la memoria, pero yo creo que en 2015 iban con Somos Alcalá, puedo errar en esto. Como sea, Los Verdes, otro clásico y veterano de Alcalá, ahora está con La Izquierda Hoy y son los que le aportan todo su programa ecologista, que es bastante amplio y en consonancia con los postulados de los partidos verdes más fuertes del resto de Europa.

MÁS MADRID: Y la siguiente división de la izquierda nos viene importada desde Madrid capital, que la llevó a toda la autonomía y que en realidad tiene parte de sus raíces tanto en las desavenencias entre Errejón e Iglesias en Podemos, como que Ahora Madrid, la agrupación electoral que lidera la alcaldesa Carmena, tuvo un camino de distanciamiento con Podemos no similar al de Somos Alcalá, pero sí con un resultado igual en el que no confluyen. En este caso en Alcalá su líder es María Elena Vaquero. Ya hemos explicado antes las diferencias entre Iglesias y Errejón, y ante el caso de Somos Alcalá como agrupación electoral se puede entender mejor que la orientación de Carmena es también municipalista dentro de este Más Madrid. Ponen el foco en el ciudadano y en la consulta al ciudadano, igual que Somos Alcalá. De hecho uno repasa el programa de Más Madrid para Alcalá y choca que es prácticamente igual que el de Somos Alcalá, por lo que uno desde fuera pudiera pensar que la única razón de ser en Alcalá sea que se quiera reforzar la postura de Errejón frente a Iglesias, o que Carmena y Errejón quieran alimentar una alternativa a Podemos que siempre tenga las puertas abiertas de reentrada en Unidas Podemos que termine haciendo triunfar las tesis de Errejón más moderadas frente a las tesis de Iglesias más cercanas a IU. De verdad que leo su programa, que sí me ha llegado esta vez al buzón, y no le encuentro diferencias al de Somos Alcalá. Eso sí, Más Madrid promete cincuenta mil empleos ecológicos, que no sé muy bien cómo los crearían, la verdad.

CIUDADANOS-PARTIDO DE LA CIUDADANÍA (Cs): No se trata de una confluencia, a pesar de la coletilla de Partido de la Ciudadanía, se trata de eso: sólo es una coletilla, no otro grupo político. No sé, quizá viendo tanta confluencia por ahí querían ponerse apellido. Como sea, Ciudadanos está liderado en Alcalá por Miguel Ángel Lezcano, que ya ha representado a la formación en anteriores encuentros electorales. Precisamente en las anteriores generales de abril superaron en bastante al PP local. Probablemente atrajeron a buena parte de ese electorado conservador. Ciudadanos es un partido netamente liberal, como ya he dicho en otras ocasiones, y por ello sus propuestas giran por ejemplo a promover la creación de suelo industrial, que por otro lado es algo necesario para crear trabajo. En este sentido el PSOE lo que ha dicho es que se propone crear 18.000 empleos con un nuevo plan general de ordenación urbana que aumente el suelo de actividad económica, que no es lo mismo que suelo industrial. De hecho el PSOE en campaña ya ha hablado de crear un nuevo centro comercial, cuando en Alcalá hay saturación de ellos, en Torrejón de Ardoz se está construyendo el más grande de Madrid y el Corte Inglés de Alcalá se ha declarado en quiebra y se ha puesto a la venta. Por otro lado lo más que ha logrado es atraer almacenes de logística, cuya creación de empleo es volátil. En el debate electoral que celebró Cadenar SER el pasado día 20 Lezcano explicó que la industria que él plantea crear es una industria del siglo XXI, que no tiene porqué ser tan contaminante como la vivida en el siglo XX, siendo la industria incluso algo que puede ser tecnológico, aprovechando que está aquí la Universidad de Alcalá, cosa que tambén apoya España 2000 y Podemos-IU, porque la idea no es mala. Como sea, si Ciudadanos vuelve a superar al PP local puede que logre consolidarse los próximos cuatro años como la opción conservadora de los alcalaínos que piensan en esos términos. Por supuesto analizando su programa tiene cuestiones lesivas para las políticas sociales, pero hay que reconocer el discurso de Lezcano en Cadena SER parecía más solvente que el del PP. Pero no olvidemos que la experimentación de recortar horarios de atención sanitaria pública en Alcalá de Henares fue algo votado por PP y Ciudadanos en la Comunidad de Madrid, a pesar de que Ciudadanos Alcalá twitteara en redes públicas apoyando a los que protestamos contra esa medida, Noticia 1855ª.

PARTIDO POPULAR (PP): Los democristianos y liberales de siempre. Desprestigiados y en horas bajas desde el nivel estatal hasta el local. Se presentan a las elecciones tras hacer una criba interna, una remodelación y sufrir una crisis particular y local, mientras que en las generales les superó hace un mes Ciudadanos y, posiblemente, el ala más a la derecha de la derecha que son se les fue a Vox. Además han pasado varios años de investigaciones sobre su gestión. Al menos el PP alcalaíno trata de ser menos intransigente en algunas cuestiones que el PP estatal. La ida reciente de Chacón de su liderazgo es el que ha logrado ese giro, pero ha sido tan reciente que no es perceptible. Ellos están liderados ahora por Judith Piquet, chica joven, de mi generación, cuya campaña se ha basado en el cara a cara, ciudadano a ciudadano por las calles del centro de la ciudad. Ellos, para incentivar la creación de empleos apuestan por bajar las cargas fiscales, imagino que se refieren a los empresarios. Pero lo cierto es que fue con el PP de Bartolomé González en el periodo 1995-2003 en el que el suelo industrial comenzó a aumentar su precio hasta alcanzar el precio más caro de la Comunidad de Madrid, y eso sí que auyenta la inversión empresarial. Esto no se corrigió en años posteriores, e incluso parte del suelo industrial pasó a ser vivienda o centro comercial, al margen del inmovilismo del plan general de ordenación urbana porque el gobierno de al Comunidad de Madrid no mueve ficha. Cuando estalló la crisis de 2008 por ahí comenzó la punta de lanza de la deslocalización empresarial en Alcalá y en el Corredor del Henares. Alcalá era la ciudad que más empleo generaba en el Valle del Henares, más que Guadalajara ciudad. Poco a poco algunas empresas decidieron que mejor irse a Azuqueca de Henares, a Meco, a Torrejón de Ardoz, Coslada, San Fernando de Henares... pero en cuanto les mejoraron los precios del suelo industrial y las infraestructuras de todo tipo se fueron a Getafe, a Alcorcón, a Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Fuenlabrada... y el Corredor del Henares pasó a ser punto negro del desempleo en Europa.  Alcalá perdió Gal, Poliseda, la mayor parte de Roca y de Fiesta, numerosas medianas y pequeñas empresas, etcétera. Todo eso tiene su origen en lo hecho en el pasado por el PP, que subió ese precio del suelo industrial y que incluso llegó a crear urbanizaciones de semilujo en algunos de estos lugares o barrios de chalets, donde en teoría habría potenciales votantes conservadores. Llama la atención además que en su programa hay numerosas propuestas que cuando gobernaron hicieron justo lo contrario o bien ignoraron hacer algo. Y miedo da su propuesta estrella, en torno al río Henares, del que pareciera que quisieran capitalizarlo como si fuera un producto comercial, pero eso sí: disfrazado de programa social y cívico sobre todo para las familias. Todo ello sólo llevaría a la degradación de una zona verde natural. Sea como sea, Judith Piquet, junto a las candidatas de Somos Alcalá, Podemos-IU y Más Madrid son las primeras mujeres de la Historia alcalaína que se presentan a alcaldesas.

VOX: En 2015 apenas les votaron unas trescientas personas en Alcalá. En las generales de 2019, hace un mes, les votaron catorce mil cuatrocientas. Tal vez buena parte de ellas fueran parte de los cinco mil que en 2015 votó a España 2000 y buena parte del ala más a la derecha del PP. Es evidente que son extrema derecha. Su crecimiento viene arrastrado por la política nacional desde las autonómicas de Andalucía. En esto colaboraron y mucho la prensa generalista y en este caso también la local. Hay quien decía que su presencia en la representación gubernamental se debe a los que se abstienen, que los beneficia por la Ley D'Hont, pero la realidad es que si salen elegidos es porque hay gente que les vota. Comete un error quien para contrarrestar a Vox decide atacar a los que se abstienen, en lugar de contestar a los argumentos de Vox con otros argumentos que de por sí tienen. O quizá no se atreven a señalarles tanto como lo hacen a los abstencionistas. Desde luego los partidos que no tienen papeletas o que no tienen papeletas suficientes en las urnas, por mucha Ley D'Hont que haya, no tienen cabida en los gobiernos. Vox ha apostado fuerte por Alcalá, mandando a varios de sus líderes nacionales a la ciudad. No han sido los únicos, PSOE y Más Madrid, entre otros también lo han hecho, pero el caso de Vox es que lo hace de manera constante. Quizá saben bien que Alcalá fue una de las primeras ciudades en tener concejal de extrema derecha, aunque no era de ellos, sino de España 2000, y quizá quieren pescar tanto en caladero del PP y Ciudadanos como en el de España 2000. Podrían sacar concejales, en plural, pero ya se verá. Desde luego en las generales sacaron más de catorce mil votos, pero en las municipales puede que su imagen y su resultado aleje a otros votantes de derechas o bien que España 2000 le rasque lo que por incomparecencia no le rascó en abril. Su programa es ya archiconocido, ultranacionalista, con el foco puesto en una sociedad con valores claramente masculinos, ultraliberal en lo económico, profranquista, etcétera. A mí en muchas cosas me recuerdan a los carlistas clásicos.


ESPAÑA 2000 (E-2000): Llevan en el gobierno local con un concejal desde las elecciones municipales de 2011, este es su líder: Rafael Ripoll, que por cierto, él y parte de su cúpula se dejó ver esta campaña electoral en un conocido bar de rock de la ciudad donde se estaba dando un concierto. En las elecciones de 2015 casi lograron dos concejales. No fue el caso. Sin embargo España 2000 logró concejales en otros municipios cercanos, como por ejemplo Los Santos de la Humosa. Ellos son conscientes del auge de Vox, y tal vez por ello barajan aumentar sus votos confiados en la experiencia que acumulan en las instituciones y en Alcalá misma. No obstante, Ripoll lleva el Consejo de la Mujer en Alcalá. En este sentido una de sus propuestas es que los autobuses urbanos paren a solicitud de las mujeres que se sientan amenazadas o acosadas, cosa que pudiera tener cierta utilidad por las noches. En todo caso, su principal propuesta la recogen en su lema de campaña: protege esta casa, que anteriormente era: los españoles primero. Obviamente pertenecen al ala de la ultraderecha. Nacionalistas, ultracatólicos, con un peso y programa social que recuerda a las políticas sociales propias de la Falange de décadas anteriores, que ponían su atención en las clases populares y trabajadoras y sus barrios bajo sus propios criterios corporativistas, centran su atención en la defensa de lo que consideran la cultura española frente a cualquier otra, la cual hacen coincidir con valores ultraconservadores. Preocupados por la Historia, bajo su propio modo de entenderla, desean extender su visión a los niños, según su programa, acabar con las casas de apuestas de los barrios, disminuir el Impuesto de Bienes Inmuebles y el de tracción mecánica a las motos, eliminar a los okupas y habitantes de infraviviendas y primar en todo a los nacidos españoles con cultura española, castellana y católica, según se lee en una de sus fotos por redes sociales.

Expuesto ya todos los grupos que se presentan y muy por encima algunas de sus propuestas, pasemos a comentar la jugada del actual gobierno de cara a las elecciones. Como ya he dicho el mejor posicionado es el PSOE. La cosa es que estos cuatro años de gobierno en compañía de Somos Alcalá ha hecho que mucha gente cuando habla del mandato que ya acaba parece que refiere a que el gobierno era prácticamente Somos Alcalá, algunos lo hacen con alabanza y otros con rencor. Puede que sea un efecto de los medos de comunicación achuchando contra Podemos, no obstante mucha gente sigue relacionanado Somos Alcalá con Podemos, es parte del despiste general. Sea como sea, Somos Alcalá ha tenido cabida en el gobierno local y ha tenido un peso importante. No así IU, que aunque en principio estaba en el tripartito, al expulsar a su concejala y esta no renunciar a su acta de concejala, perdieron su movilidad política bien ganada en las urnas. Somos Alcalá, como dije antes, probablemente ha hecho que el PSOE local orientara su política a un gobierno más enfocado a los barrios, a lo social y a las asociaciones. Si nos fijamos en los gobiernos del PSOE que hubo en el pasado en Alcalá, no tendríamos algo tan definido de esta manera quizá desde los primeros años de democracia, con aquel Valenzuela, que fue en el pasado del PCE y luego del PSOE clandestino hasta la legalización de este en 1977, o el gobierno breve de Lope Huerta y buena parte de Florencio Campos, aunque no todo ese periodo. También es cierto que teniendo en cuenta de donde se venía políticamente y que Alcalá había sido republicana desde el principio hasta el final de la República, a poco que se hiciera en aquellos años de la primera mitad de 1980 todo era diferente. Somos Alcalá ha ayudado a que el PSOE local afianzara y focalizara su política y esfuerzo a una política socialdemócrata tal como esta se entiende después de la Segunda Guerra Mundial en Europa, no tanto como se entiende la socialdemocracia previamente. Quizá por eso Somos Alcalá, una vez pasada su crisis interna ya explicada, quiere focalizar su esfuerzo en animar la idea de que ellos hacen política municipalista, intentando escapar de la evidencia de una forma de entender la izquierda y la política social. En este sentido PSOE ahora tendría que hacer una política reclamando que el gobierno lo tenía él al tener la alcaldía y la mayor parte de concejales, pero este es un esfuerzo que no necesita, ya que las divisiones del resto de la izquierda le ahorra quemarse en esas explicaciones. Pero ni que decir tiene que toda decisión del ayuntamiento lleva forzosamente la aprobación y el voto del PSOE y de su alcalde.

En estos cuatro años de gobierno han habido grandes aciertos. El principal de ellos es el menos visible, y en buena parte ha sido gracias a ideas e iniciativas de Somos Alcalá: la disminución de la deuda pública que dejaron los ayuntamientos del PP desde que nos nombraron Patrimonio de la Humanidad. De una deuda de trescientos millones de euros que dejó el PP, y que paralizaba el poder hacer ninguna política porque las empresas a las que se les debía dinero se negaban a hacer cambios o esfuerzo alguno mientras no les saldaran lo que se les debía, o al menos una buena parte (hablamos por ejemplo de las empresas de limpieza y de transporte público), se pasó a una deuda inferior a los ciento sesenta millones de euros. Eso no lo logra cualquiera. Se ha repetido esta situación en otras ciudades donde han gobernado agrupaciones electorales, como Madrid, Barcelona o Cádiz. ¿Recortes en las políticas públicas? No, o no tanto. Una gestión más eficiente tendiendo a las soluciones más baratas, prescindiendo de lo que no era necesario, pero siempre gastando en lo social, y recurriendo a las agrupaciones y asociaciones de ciudadanos, por ejemplo en lo artístico, para sacar adelante muchas iniciativas, lo que, ese uso de voluntarios, sí podría poner un "pero" en cuanto al valor del trabajo. Sin embargo todo ha funcionado bien. Lo cultural ha mejorado mucho, si bien es cierto que se ha abusado mucho de grupos alcalaínos, que si bien deben tener siempre cabida, no deben ser los únicos protagonistas, pues eso nos transforma en una isla aislada de otros creadores y artistas que antes llegaban con más frecuencia, y además nos hace caer en un autoconsumo que puede llegar a cansar en algunos momentos. Hasta ahora ha funcionado, eso sí. Otra forma ha sido la participación de empresas para su propia promoción, así por ejemplo se recuperaron los fuegos artificiales con dinero conseguido por esa vía, o El Corte Inglés invirtió en restaurar el kiosko de la Plaza de Cervantes, o bien se instalaron paneles para poner carteles de propaganda que si bien transforman nuestras vías públicas en objeto de mercadeo privado, ha sido una fuente de ingresos al ayuntamiento. Bien es cierto que el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) es excesivamente elevado. Eso lo explicó bien el alcalde, Javier Rodríguez, en 2018 cuando se cumplió el 20º aniversario de nombramiento de Patrimonio de la Humanidad. Las ciudades con ese título tienen la obligación legal de realizar determinadas políticas culturales y de mantener el patrimonio, sin embargo el Estado nunca ha creado partidas presupuestarias para ellas con este propósito, por lo que las ciudades españoles patrimonio de la Humanidad recurren a buscar incrementar sus ingresos para hacer esas políticas elevando el único que claramente controlan, el IBI. Quizá queda pendiente presionar al Estado para pedir partidas presupuestarias para esto y aliviar así el IBI. De otro modo el Patrimonio de la Humanidad es una bendición y una maldición a la vez para unos vecinos que, por otra parte, no ven aumentados sus ingresos en general con tal denominación, aunque sí ven hinchado su orgullo y amor propio. 

Recordemos que en 2015-2016 una iniciativa de Somos Alcalá fue crear una moneda social que en realidad no llevaba a ningún lugar, aunque se planteaba como solución a la población más desfavorecida. Otra solución de por entonces fue potenciar los huertos urbanos que ya la Universidad de Alcalá había ensayado. Entre asociaciones de vecinos, otras asociaciones, vecinos particulares y demás, estos huertos urbanos han salido adelante, aunque desde luego no son una solución al desempleo, ni una alternativa al mismo. Sin embargo son un éxito en otros ámbitos ecologistas, de consumo, de aprendizaje, de retorno a la tierra, de civismo, etcétera. 

La cosa es que el tema del trabajo es un tema que desde algo antes de la crisis económica castiga a Alcalá, como expliqué antes. Ningún gobierno local ha sabido hacer bien los deberes e incluso se han perdido oportunidades. Sólo se puede hablar de suspenso en esta materia a todos. La Comunidad de Madrid no ha colaborado mucho tampoco. No es extraño que todos los grupos propongan sus ideas en esta materia y que varios coincidan en la necesidad de recuperar terreno industrial, o como lo llama el PSOE terreno de actividad económica. Ahí está la clave, ¿qué actividad económica? Se necesita empleo de calidad más allá del turismo. En 2007 teníamos 210.000 habitantes, más o menos, desde 2008 hemos perdido población y empresas y hemos bajado a unos 200.000. A pesar de que el PSOE dice haber generado empleos, esto es algo que si bien en cifras se puede ver así, en las características de esos empleos es algo ilusorio. Se necesita crear empleo y también que este sea de calidad. Un empleo que no te da para pagar todas tus facturas no es un buen empleo. Un empleo que es de corta duración no es buen empleo. Un empleo estacional y dependiente del turismo que sólo beneficia a unos pocos negocios concentrados en el centro de la ciudad tampoco es buen empleo. Tiene cabida, por supuesto, pero se necesita trabajo estable y bien pagado. Y sí, teniendo aquí tantos investigadores en la Universidad, bien pudiera venir empresas atraídas por los posibles sectores que se podrían desarrollar. Y sí, se podría crear innumerable empleo verde. Prefiero mil veces un ejército de jardineros y de separadores de basura, por ejemplo, que un ejército de constructores. La casa se construye y se acabó, agotando el suelo, las zonas verdes pueden perdurar por siempre necesitadas de cuidadores. Pero quien habla de empleo verde habla también de trabajos más complejos que el de jardinero.

Somos Alcalá tenía la concejalía de Medio Ambiente y dice haber plantado 28.000 árboles repartidos entre zonas verdes naturales, jardines y calles, y dice que ha talado menos árboles de los que ha plantado. Sin embargo las talas se han acrecentado en los dos últimos meses de tal manera que de seguir a ese ritmo en breve se tendrían calles sin árboles. Un concejal de Somos me confesaba en privado que el error fue no reponer el árbol en los alcorques. De hecho hay alcorques que se taparon. La tala de más de 30 árboles en el arboreto de avenida de Reyes Católicos hace un mes, seguida de montones de talas masivas  en otros puntos, hizo que al final un gran número de vecinos se organizara en el grupo Amigos de los Árboles de Alcalá, donde yo mismo he contribuido. Entre las voces presentes hay arquitectos, libreros, historiadores, gente de leyes, gente de medio ambiente, entre otros. Se han aportado ideas y leyes y manuales e información de todo tipo. Desde que el problema de que las raíces entren en las tuberías es porque en las averías estas se arreglaron reponiendo tramos de tubo, en lugar de crear encamisados, a otras cuestiones técnicas. Incluso Ezequiel, un histórico de Ecologistas en Acción intervino. Se ha tratado de todo tipo de cosas a varios niveles. Para bien o para mal. Pero desde el principio se ha observado al grupo como grupo con oscuros y encubiertos intereses políticos para derribar y atacar a Somos Alcalá o Egido, el concejal. Por más que se les ha dicho que no y se les ha explicado que se es consciente de que el problema viene de muchos mandatos atrás, adentrados en los 1990 (Ezequiel se remonta a 1987), la acusación es constante. De ahí se ha pasado al desprestigio, a la difamación, al si no estás conmigo estás contra mí, a la falsa acusación, a los evidentes falsos perfiles de los que preferimos hacer como que no nos damos cuenta para que pueda seguir el diálogo pero que son perfiles creados para defender sí o sí todo lo hecho sin autocrítica y de paso arremetiendo contra el que discrepe, a la misteriosa desaparición de un mensaje crítico con el grupo del que nadie asume su borrado, a la politización por parte de algunos participantes de uno y otro lado, a la participación a título personal de gente que muy evidentemente participan a título de su partido que, lo asuman o no, muchos sabemos cuáles son, en fin, un cansancio grande con todo lo ocurrido. Y sin embargo el grupo sólo pretendía llamar la atención sobre algo que ocurre desde hace mucho y que queremos que deje de ocurrir. Se señaló las causas de las talas, como por ejemplo las podas salvajes y a destiempo que ayudan a enfermar a los árboles, los arrancados de raíces en las obras, el no contemplar la posibilidad de agrandar alcorques, de recuperar alcorques, de replantar o de remover ubicaciones. Etcétera. No es esta la entrada adecuada para reproducir y hablar de todo lo que se ha comentado, pero algo ha debido influir, pues de repente las talas se ralentizaron, las podas dejaron de ser salvajes y Somos Alcalá ha salido a la palestra con su concejal al frente para anunciar por todos los medios de comunicación que es el ayuntamiento que más árboles ha plantado, sin autocrítica y a pesar que desde el grupo hubo quienes analizando sus datos le dieron unos cuantos "peros" que se han quedado sin respuesta. El arbolado urbano es necesario en las calles, no sólo en jardines y zonas verdes naturales, el cambio climático lo reclama, y pronto la Unión Europea. Ahora Somos Alcalá promete plantar cien mil árboles si salen elegidos. Al margen de la cifra que dicen, está claro que hay algo que se ha removido por dentro. Queda pendiente también que todo árbol plantado sea cuidado y conservado para que no se seque ni tronche, que se reponga aunque sea con otra especie los talados, y que se cuide de no perjudicar a los ya existentes. Las leyes además así lo exige. Tengamos en cuenta además que el ayuntamiento ha alegado que toda tala (apeo, dicen ellos) está justificadísima con informes técnicos, sin embargo, cuando compareció Egido para hablar del tema anunció la paralización de la tala de cuatro árboles de la Puerta de los Mártires por la que se manifestaron en contra varios vecinos, dijo que pidió segundos informes y estos contradecían los primeros que aconsejaban inevitable la tala. O sea, si esto se ha producido con un caso mediático, ¿quién asegura que todos los informes de tala eran irrevocables? El propio Egido, al reconocer que segundos informes paraban la tala, segundos informes que pidió por la manifestación de la gente, viene a reconocer con esa acción, aunque no lo sepa, que justo lo que se ha criticado tiene razones de poder ser cierto, o sea: talas no justificables porque no se han agotado todas las posibilidades. Si un informe no llevaba razón y no se supo hasta que los vecinos no se movilizaron y el concejal decidió pedir segundos informes, ¿cuántos otros informes que se hicieron efectivos estaban equivocados? Y ante esto, ¿por qué no hay autocrítica? De verdad que no hay nada ni contra Egido ni contra el gobierno actual, sólo que en este punto del arbolado hay diferencia de criterio sobre cómo se lleva este asunto. No se le quita mérito a la repoblación en jardines y zonas verdes naturales, pero el arbolado de las calles cumple unas funciones ecológicas y sociales vitales y no sustituibles. Un árbol adulto además, cumple funciones que un árbol joven no.

Como política verde precisamente se está instalando en Alcalá una empresa de generación de energía por biomasa. Combinará la luz solar con el uso de biomasa proveniente, según dice la empresa, de las podas y talas municipales, que cifran en cuarenta mil toneladas anuales. Esto ha hecho levantar sospechas acerca del gran número de podas y talas de este año. Se supone que la empresa debe empezar a funcionar en noviembre. Dará electricidad a cien mil vecinos y varias instituciones municipales. Por ello mismo se plantea la necesidad de que haya controles de calidad de los informes. ¿Quién vigila al vigilante? Puede que esté todo hecho bien, pero se debe garantizar que no se exageran los informes o no se da la solución fácil de la tala por parte de nadie. La transparencia es algo sano en democracia, no es un ataque a nadie. Sólo es una petición de garantías democráticas. Por supuesto estamos de acuerdo con energías limpias, lo más limpias posibles, que además las reclama la Unión Europea para las grandes ciudades. Dentro de eso se necesita que todo se haga bien.

Otro hito que se anota el actual gobierno PSOE-Somos Alcalá en política verde es la recuperación  de parques como el Parque Madariaga, el Magallanes, el De la Duquesa. Sin embargo estos espacios, donde han agrandado las zonas infantiles y han puesto zonas caninas (no exentas de relativa controversia por parte de dueños de perros y de padres de niños, mientras que los ciudadanos sin perros ni niños simplemente es como si no asistiéramos a los parques), han visto empedrados o suelos de aglomerados de graba. Que sigue la lógica de la remodelación del Huerto de los Leones, hoy mal llamado Jardín de las Palabras a la espera de recuperar su nombre, cosa que se hizo con el PP en el gobierno, o, más allá, con el parque de Sementales. O bien también con el uso y abuso de adoquines y asfaltados con el Plan E de 2009-2010 que venía a "salvarnos" de la crisis falsamente. Se eliminaron numerosas zonas terrosas y a veces verdes, y se taparon alcorques con piedras estando incluso el árbol vivo. Eso cuando no se talaba el árbol alegando que levantaba la acera pero luego no arreglaban la acera, por lo que era mera excusa de tala, pues el peligro viandante pervivía. La cosa es que empezando por esto último, los adoquines dificultan el filtrado de agua a los árboles. Y siguiendo por el otro aspecto, adoquinar y asfaltar zonas de tierra o dónde hubo vegetación (pongamos por caso arbustos decorativos eliminados para crear rotondas como en la calle Alfonso de Alcalá en sus dos extremos), no es algo ecológico. Es altamente antiecológico, y ya no sólo porque se elimine vegetación donde la haya o se la asfixie, lo que llevará a su enfermedad y tala. Lo es porque al eliminar las zonas de tierra en tiempos de calor este no se absorbe y se hace un efecto sartén que recalienta el ambiente. Mucho ciudadano se verá en la necesidad de encontrar equipos eléctricos y se disparará el consumo eléctrico, lo que a la vez aumentará la contaminación,lo que a la vez recalentará el planeta, lo que a la vez ayudará al efecto sartén de nuestras calles. Pero esto, que así dicho pudiera parecer una tontería, puede completarse con algo mucho más evidente. El uso de adoquines requiere explotar canteras, cementeras y graveras. Hay municipios y montes enteros que han cambiado su fisionomía a base de extraer sus piedras. Al hacerlo se han destruido habitats y nichos ecológicos de flora y fauna al completo. El abuso del adoquín es de lo más antiecológico que hay dentro de las prácticas que parecieran no serlo. No crea una ciudad amable, ni tampoco bonita, ni natural, y ayuda a arrastrar a otros lugares en su destrucción ecológica. Una calle adoquinada era un monte con filón de piedra.

La recuperación de algunos kioskos de bebida y comida en parques como el O'Donnell o el de calle Núñez de Guzmán por otro lado ha hecho que recorten parte de la zona verde para poder instalar un terreno para el uso privado del dueño del bar. A todo esto PSOE-Somos Alcalá están satisfechos porque se ha hecho todo con la recuperación de una colaboración fluida con las Asociaciones de Vecinos o con otras, como el CAJE, pero estas asociaciones, por mera cuestión numérica de sus participantes, no son representantes de todos los vecinos, ni cuentan con la opinión de todos los vecinos. En pleno siglo XXI cabe replantearse los múltiples medios posibles que ofrece, tanto desde el pasado como desde el presente, otras vías para conocer lo que realmente quieren los vecinos, y no lo que sin ser elegidos se erigen en su voz, por muy buenas ideas o intenciones que tengan. No hay mejor idea ni voz que las propias, no el de aquella persona que sin consultarte se considera tu voz, independientemente de que se esté luego de acuerdo o no con lo aportado, porque ahí está la cuestión, en ese "luego", que implica un estar de acuerdo o en desacuerdo con posterioridad a los hechos consumados, porque nadie te preguntó con anterioridad.

Por otro lado tenemos el cierre del vertedero de la Mancomunidad Este de Madrid, que durante bastantes años ha acogido Alcalá de Henares. Teóricamente se cumplía la fecha en 2018-2019 para su cierre y el traslado a otro lugar, a otro término municipal que se ofreciera. En su momento hubo quien se ofreció, pero con su prpio cambio de gobierno negó el ofrecimiento. La fecha se cumplió y la Comunidad de Madrid más que mediar en el conflicto lo azuzó, tratando de implicar por medio a Madrid capital por interés político de perjudicar el PP a Ahora Madrid. Javier Rodríguez, el alcalde de Alcalá y presidente de la Macomunidad Este, vio como se aplazó la fecha de cierre, pero está seguro de lograrlo en breve con nuevo gobierno previsible en la Comunidad. Su plan de futuro a medio y largo plazo es crear una zona verde en el espacio del vertedero. Como sea, entre medias se debería planificar comederos para las cigüeñas, gaviotas y otras aves, cosa que no parezca que esté entre los principales debates de este asunto. Sea como sea, a todo esto, Somos Alcalá promete el intento de crear residuos cero mediante otro nuevo contenedor de basura que vaya al compostaje. Este tema de la basura quizá es uno de los temas más delicados y complejos de resolver en los próximos cuatro años.

Volviendo a la Unión Europea, es precisamente la Unión Europea y el Acuerdo de París los que imponen que las grandes ciudades disminuyan la contaminación de sus núcleos. En ese sentido está ocurriendo la peatonalización de multitud de ciudades. A pesar de las críticas recibidas por Madrid o por Alcalá, la verdad es que da igual quien gobernara, tarde o temprano se tendría que peatonalizar. Hay quien ha querido hacer la comparativa con la peatonalización del PSOE en 1999-2003, pero no es tanto así. Esta vez es algo más planificado y además, obligado, por la UE y por la urgencia del cambio climático. PSOE y Somos Alcalá dicen que lo expandirá a la Plaza de Santos Niños. En general estas medidas han sido aplaudidas.

En detrimento se han perdido aparcamientos en distrito centro, porque se peatonalizó sin crear aparcamientos alternativos. Eso ha desplazado los aparcamientos a los barrios colindantes y estos a los suyos respectivos. Hay problemas de aparcamiento y todos los grupos prometen aparcamientos. En realidad, si queremos combatir el cambio climático, lo que hay es un exceso de automóviles. La cuestión es, ¿a costa de qué planean hacerlo? ¿Perderemos más zona verde? ¿Árboles? ¿Zonas peatonales?

Y aquí llegamos a las rotondas. En los dos últimos meses rotondas y talas. Es innegable que el número de rotondas que se están construyendo son excesivas. Dicen que ayudan a fluir el tráfico. Muchos conductores están contentos, pero a la vez otros tantos señalan como los peatones que son excesivas y algunas innecesarias. De hecho en alguna los autobuses tienen problemas para girar y se adentran en las aceras. En otras optan por girar en sentido contrario a la rotonda. Cada rotonda resta espacio a zona peatonal. Cada rotonda es una reafirmación de la ciudad del automóvil, que es algo contrario a la ciudad verde y ecológica. El coche lo tiene más fácil para circular, el peatón debe prolongar en curva su trayecto. Y como ciclista de reparto de prensa mensual aseguro que nunca antes he tenido tantísimas posibilidades de ser arrollado por los coches como en los dos últimos meses. En algún caso ha habido serio riesgo para acabar fatídicamente. No me gusta este modelo de ciudad de la rotonda.

Luego tenemos el asunto de la reforma de las líneas de autobús. Ya escribí sobre ello en la Noticia 1856ª, fui crítico entonces. Me remito a aquel escrito. Se quería una línea circular, no la reforma de todas las líneas y el fin de algunos trayectos. Se aisló algunos barrios. Pero en fin, esto es algo que los ciudadanos con su uso diario pueden darse cuenta por sí sólos. Yo me reafirmo en lo que escribí, tres meses después habiendo usado más el transporte público reformado. Hablé con uno de los concejales, amigo personal, y él sostiene lo contrario, es legítimo. Lo que me llamó la atención es que otros simpatizantes y miembros de Somos Alcalá se me acercaron en diferentes días y me hablaron de lo que escribí, todos afirmaban que ahora se tarda menos y todos me citaban que tardaron diez minutos en llegar a tal sitio. Vayan donde vayan los miembros de Somos Alcalá en autobús tardan diez minutos, eso lo tengo claro. Debo ser el único ciudadano que tomando el autobús unas veces tardo un tiempo y otras veces otros. El Consorcio de Transporte dice que la circular tarda noventa minutos en dar la vuelta, no sé cómo cuadra eso con los diez minutos de algunas de las amistades que se me acercaron. Dicho con humor y cariño. De Nuestra Señora de Belén a los Cines Cuadernillos tardé cuarenta y cinco minutos. A ver, que las líneas pueden tener ahora otras ventajas, aunque me reafirme en lo que escribí en la Noticia 1856ª, pero algo de autocrítica y humildad no viene mal... y por favor, quiero el secreto temporal donde todo trayecto hace que dure diez minutos. Cada vez que algún amigo se me acercaba para hablarme de esto sabía que diría que había ido de tal a cual en diez minutos, era matemático, ocurría. Yo no decía nada, sonreía para mi adentro. Me parece algo simpático. En todo caso, el cambio de las rutas se hizo por el ahorro y pago de la deuda.

Otra cosa lograda con el pago de la deuda es la renovación de los cubos de basura. Sin embargo la UCO puso a Alcalá en el tercer lugar de ciudades más sucias de España. Recuerdo cuando en 2015 se le dijo a Egido en prensa local que Alcalá olía a pises y él defendió que era cosa de la depuradora. Era y sigue siendo evidente el olor a pis en bastantes calles y las evidentes manchas de meado que es meado humano en esquinas típicamente de meado de borracho. En el Polígono Puerta de Madrid, en Nuestra Señora de Belén y el Juncal, por citar un cuadrante, se acumula la basura durante días y días. En las calles principales se ve a los barrenderos, a veces, en las pequeñas puede pasar una semana o dos sin limpieza, y dentro del Polígono Puerta de Madrid, el Lianchi, la basura puede ser de acumulación quincenal. Y también es evidente paseando que los contenedores de basura comprados son pequeños y que muchos vecinos tienen que dejar su basura al lado del contenedor. Además el plástico es más débil que el de los otros contenedores y algunos ya están rotos. La autocrítica no es mala y la crítica no es necesariamente un ataque, es algo que contribuye a buscar y encontrar soluciones. 

Pero es cierto que se han hecho muchas cosas bien, empezando por el pago de la deuda y continuando porque por primera vez se invierta en los barrios y no sólo en el centro de la ciudad. Hay además mucha política social. Ha habido hasta un millón de euros en Servicios Sociales. Se ha trabajado para evitar desahucios e intermediar en vivienda. Se han creado áreas caninas. Se ha creado un portal de participación ciudadana donde todo ciudadano con acceso a Internet puede opinar y ayudar a decidir sobre políticas y presupuestos, que fue una gran apuesta de Somos Alcalá. Se ha abierto la administración electrónica. Se ha recuperado parte de la memoria histórica de la ciudad, cosa esta última por la que trabajó especialmente el PSOE e IU. 

Y en fin, este es el panorama a veinticuatro horas de que se cierre la campaña electoral, empiece la jornada de reflexión y después se vote. Saludos y que la cerveza os acompañe.

martes, mayo 21, 2019

NOTICIA 1876ª DESDE EL BAR: MEGA AÑO ELECTORAL: LAS AUTONÓMICAS

En las elecciones autonómicas tenemos que votar la renovación o el cambio de los gobiernos de las Comunidades Autónomas y de sus provincias. Las Comunidades Autónomas históricas lo harán en otras fechas, ya que ellas accedieron a la autonomía algo antes que el resto y tienen por ello otros calendarios. Así, Cataluña, Galicia y País Vasco tendrán otras fechas diferentes al 26 de mayo para votar. Igualmente, Andalucía, que también es una de las históricas, ya votó el 26 de marzo, porque adelantaron sus comicios, y la Comunidad de Valencia adelantaron igualmente las suyas al pasado 28 de abril. Todas las demás, votarán. Así que ya veis, aún quedan otras citas electorales este año, según les vaya tocando el turno a las históricas entre 2019 y 2020. Lo que sí habrá, aparte de lo dicho para renovar los diferentes parlamentos y asambleas autonómicas, serán elecciones a los Consejos Insulares de las diferentes islas de Baleares, a las Juntas Generales de los territorios vascos, los Concejos de Navarra, el Consejo General de Arán y a las diferentes Entidades Locales Autónomas de Andalucía, y Menores de Extremadura y Valencia, lo que ya entra dentro del ámbito de lo que llamaríamos elecciones municipales en el resto de autonomías.

Cada Autonomía de España tiene sus particulares necesidades y han pasado desde 2008 diferentes procesos. No entraré ahora mismo a hablar de lo que se llama las autonomías pobres y las ricas, ni las diferencias entre las más industrializadas (País Vasco, Madrid, Cataluña), las consideradas administrativas (Madrid o Barcelona), incluso podríamos hablar de las de servicios por empezar a considerarse que buena parte de sus ingresos es el turismo (Valencia, Canarias, Baleares), y las tradicionalmente agrarias (como puedan ser las dos Castillas, Extremadura, Galicia, Asturias, Cantabria, Navarra, etcétera). Podríamos hablar incluso de composiciones mixtas, como Murcia o algunas de las citadas, al combinar dos sectores dentro de su fuerza principal para componer su sociedad y su economía. Es evidente que se podría hablar de muy diferentes modos de composición y de diferenciación de las autonomías, más allá de cuestiones culturales o idiomáticas puntuales.

Tras las elecciones generales del pasado abril casi todo el Estado votó mayoritariamente al PSOE. Aunque en cuestión autonomista se votaría en otra clave diferente a la nacional, lo cierto es que las autonómicas están íntimamente ligadas a la política nacional, por lo que la gente sigue reflejando ahí su voto nacional en términos generales. Por ello se observa a estas elecciones autonómicas como una reválida de lo ocurrido el pasado 28 de abril. El PSOE planea repetir resultados, lo que sería la confirmación de la firmeza del voto de los ciudadanos hace un mes, mientras que el PP y Ciudadanos esperan lo contrario, para demostrar que aquel voto fue algo coyuntural y no una decisión firme. En un mes y habiéndose formado la 13ª legislatura hoy mismo, día 21 de mayo, difícilmente se ha podido percibir absolutamente nada, por lo que en principio no hay excesivas razones para que los ciudadanos cambien su voto, al menos que en cada autonomía ocurran razones de peso pesado, lo que aparentemente no sucede. El descontento con el PP existe y más allá podría ocurrir que quienes votaran a PP creyendo en lo tramposamente llamado voto útil, al ver que Ciudadanos es una opción viable, salgan del PP y vayan a Ciudadanos. O que los que votaran a Ciudadanos para castigar a su partido de siempre, el PP, tras aplicar el castigo en abril y viendo los resultados vuelvan al redil ahora. Ya se verá. Lo único evidente es que aparentemente estas autonómicas más que reválida del PSOE será una especie de plebiscito donde se disputará cual de las dos derechas es la preferida de los españoles conservadores ahora mismo. ¿La tradicionalmente ligada mayoritariamente a la corriente democristiana con tintes liberales, el PP, o la abiertamente liberal hasta casi caer en lo ultraliberal (capitalista o ultracapitalista, en términos de años atrás), Ciudadanos? Como sea, de cara al gobierno, el PSOE lo que se juega aquí es cuánta cuota de poder puede adquirir, pues bien es cierto que dependiendo del número de Comunidades Autónomas y provincias que tenga lo tendrá más o menos fácil para sacar adelante las políticas que quiera aplicar desde el gobierno central.

De cara a otros partidos, quepa decir sólo que se disputan qué modelo de izquierda quieren los españoles. Las elecciones generales habían sido algo fácil, por así decirlo, pero a partir de ellas todo se complica porque han habido tantas divisiones partidarias que parece un laberinto o un puzzle. Es como si se tuviera que estudiar un gordo tomo de temarios de izquierda para descubrir los diferentes partidos y agrupaciones y cuáles sus diferencias. Obviamente, con una fragmentación tal es difícil que la sucesiva fuerza de izquierda que había surgido detrás del PSOE, Unidas Podemos (unión de varias izquierdas pero principalmente de Podemos y de IU), pueda reforzar y mejorar posiciones desde el mes pasado al actual, donde sufrió una importante pérdida de apoyos ciudadanos. Con una fragmentación tan grande como la que ha habido se va a dividir tanto el voto de izquierda que probablemente ocurra que tengan menos representación, ahora bien, podrían conservar cuotas de poder importantes en algunas comunidades, como Madrid (que por primera vez en muchos años se prevé que vuelva a manos del PSOE aunque con apoyo de alguno de estos otros grupos de izquierdas). La cuestión es, ¿cual de todas las divisiones se llevará el gato al agua? A río revuelto mucho voto confuso irá a donde el ciudadano no tenga tan claro que va, y eso si no anima al voto en blanco, al nulo o a la abstención. No tener las cosas claras ahora mismo, ya que la división fue relativamente hace poco, y tener fresco en la memoria que hace un mes todo parecía claro como el agua cristalina, es un  problema para el votante de izquierda. Si entre este tipo de votante hay indecisión sobre qué hará, este año, en estas autonómicas y más aún en las municipales, es su momento más álgido de confusión. La izquierda decidirá en el último minuto, y a todo esto es probable que eso beneficie también al PSOE, igual que le beneficiará que las derechas se disputarán su propio espacio entre ellas. Es como si las elecciones de mayo fueran un camino expedito al PSOE. Si pierden en algún sitio o pierden votos, salvando aquellos donde los fuertes son los nacionalistas, tendrán que reflexionar seriamente porqué teniendo la portería sin portero, por así decirlo popularmente.

Los otros invitados a la comida, la extrema derecha, en este caso digamos Vox ya que irrumpieron en las generales con más de dos millones seiscientos mil votantes, lo tienen un poco más complicado. Por un lado puede que las otras dos derechas, PP y Ciudadanos, reaccionen contra su auge, por otro lado en las autonómicas y municipales compiten con otros partidos de extrema derecha que llevan incluso varios años de experiencia y votos con concejales. Probablemente Vox se beneficie de revote de todo lo ocurrido en las generales, pero es difícil que sean decisivos en los gobiernos autonómicos, salvo sorpresas, como lo que ocurrió en Andalucía. Otra cosa es lo que pase en los municipios, donde probablemente sí tengan más protagonismo. En cuanto a lo autonómico, no sé, quizá se podría mirar a Ceuta o Melilla. Pero en esta bitácora no me gusta escribir como adivino, por lo que saltamos el tema y ya se verá.

En cuanto a la Comunidad de Madrid, que es desde donde escribo, como ya he dicho, hay posibilidades serias de que por primera vez gobierne el PSOE desde 1995, sería Ángel Gabilondo el presidente de ser así. Aunque estaría por ver si lo puede hacer por sí solo o bien necesita la ayuda de alguna otra izquierda. Ante esto el PP debe hacer examen de conciencia. Podrían alegar que tras veinticuatro años de gobierno es normal que se produzca un relevo democrático, por las dinámicas de las elecciones, el cansancio electoral, el desgaste de gobierno... pero es evidente que los diversos casos de corrupción aireados en prensa y juzgados, así como las peleas internas en el PP madrileño han hecho mella. Necesitan una renovación integral y profunda y un examen de conciencia. Las declaraciones de su candidata Isabel Díaz Ayuso tampoco han sido muy afortunadas en las últimas semanas, en consonancia con otras declaraciones desafortunadas de Pablo Casado en las generales. El PP tiene una crisis interna abierta y debe afrontar que deben solucionarlo. Muchos ciudadanos que han sido su apoyo más estable optan por votar a Ciudadanos precisamente por todos esos casos citados y por las declaraciones desafortunadas. Ahora bien, de Madrid han salido muchos líderes populares que han estado en la cúpula central del partido, por lo que no creo que sea tan fácil la victoria del PSOE, y si lo es no será tanto por combate de la izquierda, sino por reflexión interna de la derecha, que decida retirar su apoyo o confianza al PP. La batalla del PP es una batalla de credibilidad entre los suyos mismos, entre sus simpatizantes, digo.

No obstante, aunque se presenta a Gabilondo como una apuesta de fiabilidad en el PSOE y han sabido vender a esta figura como una figura solvente, los que hicimos la carrera universitaria en la década de 2000 sabemos que este hombre, como rector de la Universidad Autónoma de Madrid, fue motivo de controversia en aquellos años, cuando nos manifestábamos los estudiantes contra el Informe Bricall planteado por el PP de manera encubierta, punta de lanza de lo que sería el Plan Bolonia, que empezó en 2007 y que como Ministro de Educación mantuvo desde 2009 a 2011. El Plan Bolonia fue la entrada de las empresas privadas en la Universidad pública y del comienzo de la precariedad y el trabajo gratuito en prácticas y becas. También es cierto que en aquellos años de 2004 a 2011 que gobernó Zapatero con el PSOE, años en los que entró en vigor el Plan Bolonia, los becarios comenzaron a cotizar en la Seguridad Social, los pagados, claro, aunque aquellos que fueron becarios antes de aquella ley tuvieron (tuvimos) que pagar todos aquellos años de cotización de nuestro propio bolsillo, precario de estudiantes, antes de que lo hicieran las empresas y entidades que adquirían becarios con beca económica. Sea como sea, una de las propuestas estrella de Gabilondo es bajar las tasas universitarias, incrementar un 20% el gasto en educación y generalizar la escolarización de 0 a 3 años de edad con carácter gratuito. Otras promesas suyas son más difusas, porque corresponden más al presidente del gobierno que a un presidente autonómico, que como mucho puede presionar al gobierno central para que le sean concedidas, por ejemplo las de ámbito laboral que plantea el PSOE autonómico de Madrid.

Ciudadanos trata de pescar en el río revuelto del PP, como es lógico. Sus propuestas concuerdan perfectamente con los ideales del liberalismo (capitalismo). Su promesa estrella precisamente va dirigida a los empresarios, es crear una Dirección General de Autónomos; más allá, promete no subir impuestos, lo que implicaría un problema para mantener las políticas e instituciones públicas y sociales. Como posible solución a sus propuestas sólo se puede intuir que planean, sin decirlo, introducir a la empresa privada en todo lo posible del sector público. Si no, no me explico cómo pueda ser compatible varios de los puntos de su programa con una política social.

Más Madrid, la marca de Carmena y Errejón, apuestan por la contratación pública de pequeños empresarios, especialmente si están orientados sus negocios a lo ecológico. Su principal promesa es revertir la privatización del sistema sanitario, volviendo a lo público como modelo mayoritario y para ello hablan de que el aumento del 20% del presupuesto ellos lo harán en sanidad.

En cuanto a Podemos me parece interesante de cara a los trabajadores precarios que trabajamos moviéndonos entre ciudades que planeen bajar el precio del abono transporte, actualmente situado en 82 euros en el abono B3, lo que en sueldos ínfimos es un porcentaje muy alto que descontar de los ingresos que jamás se llegan a producir, pues según entran se van. En este caso ellos hablan de hacer público y aumentar lo público en prácticamente todo, y para ello hablan de aumentar los impuestos a las rentas más altas, especialmente para las de más de un millón de euros.

De cara a Alcalá de Henares, conviene un cambio de gobierno autonómico. Lo habitual es que Alcalá no haya tenido mucha fortuna en las políticas autonómicas por falta de consonancia entre presidentes y alcaldes, a veces por ser de diferentes partidos políticos, como actualmente, salvo casos puntuales. El caso más boyante de las relaciones Alcalá de Henares-Comunidad de Madrid fue el periodo que coincidieron Bartolomé González en la alcaldía con Esperanza Aguirre en la Comunidad, ambos del PP, entre 2003 y 2011, por su amistad personal, aunque incluso por entonces sólo fue para casos concretos. Javier Bello (PP) no gozó de esos casos concretos, ni con ella ni con González. El actual presidente de la Comunidad, Garrido, o a mejor decir el en funciones Rollán, ambos una vez más del PP, torpedeó en alguna cosa a Alcalá, actualmente en manos de PSOE-Somos Alcalá, aunque en otras aparentó favorecerla; en general en las de turismo aparenta favorecer, en el resto por verse se ha llegado a ver incluso un lamentable programa piloto de recorte de horarios en la Sanidad Pública que aplicó a uno de los barrios más necesitados de que no se hiciera, aquí en Alcalá (Noticia 1855ª). Si se mantiene un gobierno de izquierda en la ciudad, lo más probable es que lo encabece el PSOE (eso ya lo hablaremos en la siguiente entrada de mega elecciones), y en ese caso hay que recordar que Javier Rodríguez, el alcalde, es amigo del presumible futuro presidente del gobierno, Pedro Sánchez, que incluso le apoyó en sus horas más bajas, si a eso le sumáramos a Gabilondo en la Autonomía sin duda se abriría un periodo en el que podría haber muchas posibilidades para recuperar la ciudad en lo laboral, en lo social, en las infraestructuras de transporte y mejorarla por ejemplo en lo ecológico, y no seguir siendo un simple destino de turismo. Ahora bien, lo dicho antes sobre el PSOE también está ahí para la reflexión. Pero todo esto sólo son cábalas.

Saludos y que la cerveza os acompañe.

viernes, mayo 17, 2019

NOTICIA 1875ª DESDE EL BAR: MEGA AÑO ELECTORAL: LAS EUROPEAS

Pues como ya apunté el mes pasado, este año es el mega año electoral. Como de costumbre en esta bitácora, y a lo largo de mi vida, analizo la política. El asunto de las Generales, donde se vota doblemente a Congreso de los Diputados y al Senado (lo que es el Parlamento que ha de proponer un presidente de gobierno al Rey, para que a la vez proponga sus Ministros al Rey y compongan gobierno) ya fue despachado y analizado en la Noticia 1861ª y la Noticia 1865ª, con un análisis posterior sobre los resultados en la Noticia 1870ª. Como dije entonces, de momento nada indica que no tengamos que volver a votar en este concepto. En principio pareciera que se vaya a formar gobierno del PSOE con apoyo o con coalición de Unidas Podemos, pero ellos por sí solos no son suficientes y necesitan el apoyo o en caso extremo la abstención de cualquier otro grupo parlamentario, y las vistas están puestas en los partidos nacionalistas. Es un gobierno que aunque cuenta con una gran cantidad de diputados del PSOE respecto al resto de grupos no cuenta con una mayoría absoluta ni las cifras como mayoría simple le dan como para gobernar sin sobresaltos. No sólo es que tenga que salvar los escollos de la investidura, que los hay, si no que luego tendrá que salvarlos durante cuatro años para aprobar los presupuestos anuales del Estado o para innumerables leyes y eso siempre y cuando además no le presenten mociones de censura con visos de triunfar si en una carambola confluyeran en un voto idéntico aunque por diferentes razones partidos de derechas y nacionalistas, como ya pasó en la negación a apoyar los presupuestos del Estado de este año que llevó a adelantar las elecciones generales. Todo es complejo y nada garantiza que haya cuatro años de estabilidad, y menos sin resolver el asunto catalán. A todo esto Pedro Sánchez ha decidido no desvelar ni tomar decisión firme sobre cómo tratará de formar gobierno al respecto de sus posibles alianzas hasta que pasen las elecciones europeas, autonómicas y municipales del próximo 26 de mayo. Aunque Unidas Podemos parece lo más lógico, hay gente de PSOE que se siente más cómoda con Ciudadanos. Como sea, dado que ya es costumbre los análisis por deformación profesional y por gusto, y ya que PSOE ha decidido decidir tras ver qué pasa en las elecciones que siguen y en las que estamos inmersos ahora, procedamos por partes. Hoy, del mega año electoral: las europeas.

Las elecciones del Parlamento Europeo son cada cinco años. Puesto que esa bitácora nació en diciembre de 2005, en Noticias de un Espía en el Bar sólo se había analizado hasta ahora las elecciones europeas de 2009 y de 2014, que son los encuentros con las urnas que hemos tenido los europeos miembros de la Unión Europea (UE) desde que comenzó la crisis económica de 2008, y su preludio de 2007. Los partidos políticos nacionales se presentan dentro de las siglas de la unión con otros partidos nacionales de otros países cuyas ideologías son iguales o tienen algo en común. Eso hace que mucha gente se despiste, sobre todo en España, y no sepa muy bien quién es quién en Europa. En 2009 a pesar del estallido de la crisis económica en 2008, la gente no se había enterado muy bien de qué iba la cosa. No comprendieron que las personas del gobierno europeo y sus instituciones que habían tomado decisiones que nos llevaron a esa crisis son las mismas que decidieron reforzar. La mayoría del Parlamento Europeo fue democristiano y liberal, o sea: de derechas, conservador. Dirigía la batuta Alemania. En 2009 la crisis la habíamos empezado a notar severamente los estratos más bajos de la sociedad, pero según avanzó el año los despidos y cierres de empresas se fueron extendiendo hasta hacer comprender a gente que se creía clase media que en realidad no dejaron de ser nunca trabajadores, proletariado, con televisores y coches y vacaciones en avión, pero proletariado del siglo XXI. En 2010 la crisis económica azotó a todos los países del Sur de Europa con gran virulencia, más Irlanda, incluso a Islandia, aunque ellos no son de la UE. ¿Qué hizo el Parlamento Europeo y el resto de instituciones europeas bajo batuta alemana, cuyo gobierno era democristiano y liberal? Reforzar las medidas económicas liberales, privatizar, recortar el gasto social, dejar emprestados algunos Estados como Grecia... y así una serie de medidas que reforzaban justo la dirección económica que había provocado precisamente la crisis de 2008. Como solución a la enfermedad se tomaba reforzar las medidas que habían causado la enfermedad. Se olvidó por el camino a la sociedad para atender sólo el aspecto económico. Las personas pasaban a ser meros instrumentos de trabajo, y no individuos en sí mismos. Pero resultaba que en las elecciones de 2009 la gente había decidido mayoritariamente reforzar esa solución al votar a los mismos que ya estaban cuando estalló la crisis de 2008 por sus decisiones. Para más datos, el análisis de 2009 en Noticia 630ª.

La mayoría democristiana y liberal en las instituciones de la UE viene siendo ininterrumpida desde 2004. Como he dicho las elecciones son cada cinco años. Al ser renovada en 2009, para las elecciones de 2014 llevaban diez años haciendo predominar su visión de la sociedad, la economía y la política en la UE. El preludio de crisis de 2007 fue un azote fuerte, pero la crisis estalló en 2008, a finales de aquel verano en Estados Unidos de América. Rápidamente se expandió al mundo, pero a lo largo de 2009 lo notaron muy duramente los más débiles de la sociedad, tanto trabajadores como pequeños y medianos empresarios, pero aquello fue en crecimiento y se podría decir que la virulencia total llegó a Europa en 2010. Ese es el año clave en el que Alemania impuso los recortes económicos a las políticas y sectores públicos de toda Europa, cuando trató al resto de países como si fueran su patio trasero, y usó las instituciones a menudo a favor de los intereses económicos de ellos mismos. El Mediterráneo e Irlanda lo sufrió tremendamente. Ahora bien, algunas medidas, por mucho voto que se hubiera dado en el Parlamento Europeo, venían de la Comisión Europea, y esa Comisión no es elegida directamente por los ciudadanos. Ahí está el Caballo de Troya que hace que se desconfíe de la UE, porque vote lo que vote el ciudadano, quien manda no son sus elegidos directos y lo normal es que se impongan normativas con las recetas del Banco Central Europeo o de los conservadores en general. Quizá por ello la abstención, el desapego, el antieuropeísmo y el avance de la extrema derecha fue una evidencia notable en 2014 desde que desde 2010 los ciudadanos comenzaron a percibir que los intereses políticos no confluían con sus intereses de vidas comunes y diarias. Algo de eso comenté en el primer análisis de 2014, Noticia 1344ª.

Como he dicho, los partidos nacionales se unen en grandes coaliciones internacionales y a veces ocurren extraños compañeros de cama. En 2014 expliqué quién era quién en esas uniones y a la vez analice lo que suponía aquello, Noticia 1346ª. Este año os dejo el esquema que ha elaborado el periódico ABC y sobre su análisis os invito a que leáis su propia reflexión, ay que son ellos los autores del esquema, me parece justo que si uso su esquema os remita a que leáis de ellos su análisis. Más que nada me parece útil tener claro quien es quien en las europeas para no llevarse a líos a la hora de votar, ni a engaños. Ahora bien, le falta completarlo con quienes son los otros partidos del resto de Europa que están en esos bloques, pero eso los podéis rastrear vosotros mismos por Internet una vez que tenéis los nombres que adoptarán en Europa. Sólo anotaros que analicéis bien el esquema, porque ahí descubriréis esas extrañas uniones de cama, como la que hace que Ciudadanos y EAJ-PNV, por ejemplo, estén juntos en las europeas, o que PACMA, IU y Podemos vayan juntos también a las europeas, pero sin embargo no lo hagan en muchos municipios en las municipales. O que Junts per Catalunya ya no esté en el grupo de Los Verdes, cuando en el pasado, con otro nombre y formación política sí lo estaba. En fin, como sea, os lo dejo a vuestro análisis. Pero, aunque en ABC no salga, buscad el resto de partidos europeos que componen las coaliciones europeas, porque en algunos casos os vais a llevar sorpresas de con quien van de la mano, especialmente en los casos de PSOE y PP. Y sería muy recomendable también que busquéis los programas de las coaliciones europeas, más que nada porque luego los Estados miembros de la UE se ven obligados a legislar acorde a lo que las instituciones de la UE dicten como normativas legales.

Como sea, volvemos a 2010. Las medidas de recortes y "rescates" fueron bastante brutales y perjudicaron a las clases trabajadoras en gran medida, a la par que arruinaron a pequeños y medianos empresarios. El sur de Europa e Irlanda estaban revueltos. Islandia, que no era de la UE, optó por encarcelar a los banqueros que tuvieran culpa de la crisis por malas prácticas, de la noche a la mañana solucionaron la crisis económica con esa y otras medidas. Bélgica se quedó bloqueada políticamente durante un año y pico porque no podían formar gobierno y por tanto no pudieron aplicar las medidas alemanas... les fue bien y no les afectó la crisis. De hecho, Portugal, que sí se vio afectada por la crisis, decidió elegir un gobierno socialdemócrata que se apoyó en nuevas tendencias políticas más sociales, decidió regresar a los ideales socialdemócratas de después de la Segunda Guerra Mundial, ignorando las recetas conservadoras de Alemania y salieron de la crisis de manera rápida y con una mejora en las vidas de sus ciudadanos. Sin embargo tenemos que en Italia se fue de crisis económica a política y de ahí a social. Aumentó la extrema derecha y actualmente gobierna esta misma junto a un movimiento social transformado en partido político que no quiso definirse entre izquierda ni derecha, aunque se perfilaba de izquierda en principio. Del extraño híbrido italiano hay que hacer reflexión y sacar conclusiones acerca de aquellas formaciones que sigan rechazando los términos clásicos de la política. En Grecia se estuvo al borde de la revolución, con actos violentos incluidos hacia finales de 2010. A comienzos de 2011 estalló la misma reacción social en los países musulmanes del Mediterráneo, que no son de la UE, y en 15 de mayo saltó en España. Y de España al resto de países de Occidente. Reino Unido, Francia, Estados Unidos... fue ocurriendo. Las recetas ultraconservadoras llevaban al sistema ultraliberal (ultracapitalista) de la mayoría en las instituciones europeas a la quiebra entre ciudadanos y gobiernos. No obstante, habían sido las instituciones europeas, encabezadas por Alemania, las que habían mandado lo que se llamaba "hombres de negro" con serias amenazas políticas y económicas a los países del Mediterráneo que, además, consideraban vagos y ociosos, a pesar de que su trabajo y su consumo era lo que movía las economías de los países del Norte de Europa. Efectivamente, las deslocalizaciones de empresas y de capitales eran plato del día. Los empleos basura y los sueldos de miseria, otro tanto. El desempleo desorbitado. La migración masiva de unos europeos en países afectados por las medidas tomadas a los países más ricos se transformó en una especie de éxodo y fuga de cerebros y mano de obra que se vivió como exilios por motivos económicos de la gente. Todo temblaba. 

Comenzaron a ascender al gobierno muchos grupos políticos nuevos, como en Grecia, España e Italia. En origen regresaban a las viejas recetas de la izquierda socialista, de la socialdemocracia antigua del siglo XIX y comienzos del XX, pero los conservadores lo llamaron comunismo o populismo, según conviniera, y decidió dar castigos ejemplares con la amenaza de la asfixia económica si no se hacía lo que se quería. Así, Grecia resistió... hasta donde pudo. Y España vivió en 2012 que el nuevo gobierno conservador del PP se aprestaba a aplicar todo lo que le dijeran de Europa y se vivió una era de recortes sociales y civiles sin precedentes en la actual Monarquía Parlamentaria. Así las cosas, la gente en España saltó de las plazas a las asociaciones, grupos y hasta a un partido político, Podemos, que fue demonizado e incriminado por un montaje policial que hoy día está en los tribunales. No olvidemos que Podemos nace en 2014 y se presentan a las elecciones Europeas, ganando ampliamente una gran representación y aumentando votos en 2015, que eran elecciones municipales y autonómicas, y así su escalada y ascenso hasta las generales. Este ascenso no ocurría sólo en España o en Grecia. Los socialdemócratas de Portugal ya he dicho que decidió regresar a sus orígenes e ignorar las recetas conservadoras. En Italia alcanzaron gobierno, aunque juntándose a la ultraderecha. En Francia comenzaron con manifestaciones y revueltas bastante virulentas, la más activa ahora mismo la llamada "los chalecos amarillos". En Reino Unido se votó a favor de irse de la UE. Las recetas económicas de los conservadores estaban extendiendo el descontento. Pero no es la única clave. En Alemania se había ensayado una coalición de gobierno entre democristianos y socialdemócratas. Ese modelo de gobierno quiso ser imitado en otros países europeos como Francia y España. Y donde no se imitaba o no se terminaba de imitar, los socialdemócratas, salvo en Portugal, optaron por hacer leyes y tomar medidas que eran más propias de los liberales, no de gente de izquierdas y socialistas. Recordemos que a finales de 2011 PP y PSOE se unieron para hacer una reforma constitucional sin consulta al pueblo para poder acomodar las necesidades económicas de la UE a nuestra Constitución democrática. Todo eso la gente lo percibía de manera clara. No es casualidad que los partidos socialdemócratas clásicos de Europa, como el francés, el alemán, el español o el italiano, o los laboristas británicos, que no son socialdemócratas pero se aproximan, se derrumbaran electoralmente en todos los sitios. Los socialdemócratas se estaban y están comportando como liberales. La gente de izquierdas se volcó a los nuevos partidos y agrupaciones que, aunque negaran la mayor, tenían y tienen propuestas y políticas de izquierdas netamente. O en otras palabras: las medidas que no se han aplicado desde 2008, salvo en Portugal. 

Y pese a todo lo dicho, en 2014 volvió a ganar en el Parlamento Europeo los democristianos y los liberales. Y eso lo analicé bajo la perspectiva del voto en Europa, en España y en Alcalá de Henares, Noticia 1347ª. Las recetas a aplicar seguirían siendo las ultraliberales comandadas por Alemania, sólo que Alemania esta vez no quería comerse el sapo sola, porque su imagen estaba cada vez más desprestigiada, y el propio Partido Democristiano Alemán, a pesar de ganar elecciones, iba perdiendo más y más votos en sus propias elecciones, y ahora hacen carambolas de coaliciones de gobierno para gobernar. Hasta el punto que algún político conservador de la UE ha reconocido que se excedieron en las recetas ultraconservadoras... y sin embargo: ahí siguen. 

Entre tanto, los primeros en derrumbarse y perder seguidores fueron los socialdemócratas, percibidos como traidores de clase por muchos trabajadores. Los siguientes en derrumbarse, pero más lentamente, son los democristianos y liberales. ¿Quiere esto decir que los ganadores son la nueva izquierda nacida de 2011, acomplejada de llamarse izquierda y acusada por sus adversarios de populismo y comunismo, a pesar de no ser más que meramente socialdemócratas en esencia? No. Los medios de comunicación en buena parte amiga de los viejos partidos y necesitada de los ingresos de grandes empresarios hicieron la campaña de la desinformación y el ataque, y lo apoyos se desviaron. Además, muchos grupos políticos nuevos defraudaron al llegar al gobierno a modo diputados y entretenerse con asuntos menores, también en asuntos menos urgentes para las vidas diarias, en entretenerse con dialécticas o en tomar decisiones que en origen no eran las que se esperaban de ellos, cuando no se metieron en un laberinto de "purgas internas", por llamarlas de algún modo. En otros casos sus cambios iban muy lentos o por caminos que no eran los esperados. Que el Movimiento Cinco Estrellas italiano gobierne con la ultraderecha es el paradigma de todo esto, pero ya antes tenemos que el Syriza griego tuvo que tragar con los hombres de negro  que le mandó Bruselas, o que el Podemos español critique al PSOE y después quiera gobernar con el PSOE y en medio un jaleo de rencillas internas que desvía las fuerzas de los asuntos políticos que más interesan a los ciudadanos de a pie. Por poner algunos ejemplos. 

Uno de los bloques políticos beneficiados en toda Europa fue el de los diversos partidos de extrema derecha. No sólo campan en Italia. En Bulgaria, en Polonia, se hicieron fuertes en algunas zonas de Francia e incluso se infiltraron en los chalecos amarillos, lograron que Reino Unido votara a favor de la salida de la UE, el pasado abril lograron 12 diputados porque les votó más de dos millones seiscientas mil personas, en Alemania son clave para algunos gobiernos de sus Estados federales, en Suecia ponían en jaque al gobierno, etcétera. En buena parte todo lo ya dicho empujó al ascenso a estos grupos, pro hay muchas más razones. La fuerte y masiva inmigración hacia Europa de gente de África y Asia es usada por estos grupos como peligros sociales, tal como usó Adolf Hitler a los judíos, negros y comunistas en los años 1930. Los países del Este de la UE tienen una alta subida de estos partidos de ultraderecha incluida Grecia con Amanecer Dorado. En ellos se combina el rechazo al socialismo por el pasado de la Guerra Fría y sus dictaduras, pero también el miedo a Rusia y su potencial militar actual. El miedo al radicalismo islámico y la asociación de inmigración con delincuencia y pérdida de trabajo o abaratamiento de los sueldos, o que se aprovechan de las ayudas de los países europeos son el tema central de los argumentos de estos partidos. Hubo una fuerte oleada de inmigración durante varios años seguidos por la Guerra de Siria contra el ISIS y también sus complicaciones de Guerra Civil desde 2011. Pero también la hay desde África por hambre y por el avance de la desertización. La UE juega ahí con hipocresía. Deja el trabajo sucio, literalmente, a Turquía, Libia, Argelia y Marruecos, se quejan cuando ocurren graves sucesos de atentado contra los derechos humanos, pero luego no lo pone fácil para asistir incluso en el mar a aquellos emigrantes que están al borde de la muerte. Una idea propuesta es ayudar al desarrollo de los países de origen, incluso a mejorar su ecología, de al que depende el planeta, pero los mecanismos de la UE se mueven con desgana y lentos. Al final sólo se beneficia la extrema derecha con el uso de la demagogia y el desconocimiento, con ideas además fácilmente asumibles y sencillas por parte de muchos trabajadores depauperados por las políticas ultraconservadoras adoptadas desde 2010. Y sin embargo, si se va a Alemania, esa xenofobia no sólo existe contra gente de fuera de la UE, también está contra gente de los países de la UE que son del Mediterráneo. Se ha llegado a hablar de aporofobia más que de xenofobia, o sea de miedo al pobre más que miedo al extranjero, odio, más bien o recelo que cae en resentimiento profundo y acusación constante de ser causa de los males propios.

Desde 2004 a 2019 han sido quince años seguidos de mayoría democristiana y liberal en el Parlamento Europeo. Tiene pinta de que van a repetir cinco años más. Los países del Este de Europa parecen dispuestos a renovarles a ellos y a dar puestos a la ultraderecha, Alemania parece dispuesta a renovarles también. En varios países más ascendió la ultraderecha. Esto es algo que está ahí... y van a crear normas para dirigir la UE hasta 2024 como mínimo. Ahora mismo una perspectiva de izquierdas clara parece darla Portugal, España y Grecia. Los franceses generan duda. Su gobierno es liberal, pero ha causado descontentos profundos, estas europeas son como un plebiscito para ellos. ¿Y la Europa ecologista? Se haya dividida en varios bloques, como veréis en el esquema de ABC, pero se espera que ascienda. Ellos normalmente son de izquierda y también nacionalista. Y quizá las necesidades ecológicas sean las que más urjan a la UE ahora mismo, aunque parezca que no. El peligro del cambio climático es mucho más serio de lo que los grandes empresarios se lo quieren tomar. Pero más allá de políticas ecológicas se necesita un cambio de mentalidad en las personas para que cambien sus hábitos y sus hábitos de consumo... o estaremos totalmente perdidos, según la ONU para 2030. Nos quedan 11 años, más o menos. Un gobierno ecologista fuerte en el Parlamento Europeo podría ayudar a crear leyes que pusieran fin a muchas prácticas empresariales altamente contaminantes y tal vez al consumo eléctrico de millones de europeos.

Claro que otro reto de estas elecciones de 2019 es el asunto de la salida de Reino Unido. Debería haberse producido ya, pero su retraso fuerza a que Reino Unido deba participar de las elecciones, y por tanto tener diputados. Si al final Reino Unido se va sus escaños quedarán vacíos y eso es un problema relativo para el funcionamiento normal de las instituciones europeas hasta 2024, aparte de lo que suponga en dinero, en millones de euros. El tiempo que se queden, ¿cuál será el comportamiento de los eurodiputados británicos? ¿Serán leales a la UE o boicotearán sus debates? ¿Se producirá un bloqueo al estilo del Parlamento catalán, aunque en menor escala? Normalmente los británicos aportan un gran número de eurodiputados laboristas, su salida supondría otro punto a favor para los conservadores y sus medidas. No olvidemos que fue propuesta de los británicos poner sobre la mesa la posibilidad de que los robots coticen impuestos como los humanos por su trabajo. Los empresarios deberían pagar impuestos por cada robot, ya que el futuro nos indica que el trabajo robot anulará millones de puestos de trabajo humano, lo que generará problemas. También, lejanamente, abrieron el debate sobre si debían haber grandes uniones de sindicatos europeos. En fin, si se van o si al final hacen otro referéndum y se quedan es algo que probablemente paralizará y monopolizará montones de debates de las instituciones europeas.

Sea como sea, desde 2004 ha habido mayoría conservadora y no parece que a los europeos en general les haya hecho cuestionarse si sus medidas son las mejores a pesar de estar detrás de la crisis de 2008 y de todos los recortes posteriores. En el conjunto de la UE parece que hay compañeros de viaje que tienen sobre la mesa otras cuestiones para valorar que quieren renovar esa mayoría. Me gustaría escribir que este año sí se producirá un cambio en el Parlamento Europeo y ver cómo se afronta esta situación de crisis permanente con otra perspectiva no conservadora ni liberal, pero todo indica que no será así y que además entrarán un mayor número de diputados de extrema derecha. Quizá, ante todo este panorama, lo que urge en la UE es reforzar a los ecologistas... nos va mucho en ello. Y sin embargo, este mismo mes la UE ha dado vía libre para seguir adelante con el tratado de libre comercio con Canadá llamado CETA, que es más lesivo que el TTIP que tiene programado con Estados Unidos. Se trata de tratados comerciales ultraliberales que dañarán derechos democráticos, derechos laborales y que amenazan los ecosistemas y la ecología, todo a favor de generar más y más dinero a los grandes empresarios con recompensa para los gobiernos, para los políticos de los gobiernos. A los ciudadanos se les dice que es para generar empleo, pero en realidad va en su contra. Gane quien gane en Europa la mera presencia del CETA y del TTIP hace que toda política e iniciativa europea estén condenados a ser ultraliberales y antiecologistas.