El recital de ayer estuvo muy bien, aunque siempre me quedo con ganas de leer más poemas de los nuevos. Sin embargo, fue una noche buena pero con una pequeña nota triste. Lo triste de anoche, que fue una buena noche, es llegar a la Plaza de los Santos Niños, finalizando la celebración del recital con unas amistades que fueron a vernos, y descubrir que un coche a toda velocidad se empotró contra un banco de granito y lo destrozó entero, y aún la inercia hizo que arrancara entero el puesto de helados y se llevara a algunas personas por delante. Hay conductores que se merecen cárcel con creces. Yo vi a la policía, a la gente atropellada, el coche destrozado y la plaza destrozada... habia piezas del motor desparramados por toda la plaza... A qué velocidad iría el conductor, que venía en dirección contraria por la calle colegios. No lo puedo confirmar pero creo que me dijeron que a una mujer o le arrancó o le medio arrancó una pierna.
Si le ponemos humor negro, lo cierto es que un policía, para dispersar a la gente no atropellada que nos paramos a mirar, dijo la frase de: "a ver, váyanse que aquí no hay nada que ver"... Joder, le parecería poco un coche a toda velocidad en dirección contraria que arranca de cuajo un banco de granito, destroza un puesto de helados, atropella varias personas, a una le arranca o medio arranca una pierna, deja restos de motor por toda la plaza y el coche acaba en la punta opuesta de esa misma plaza... si ahí no hay nada que ver no sé qué narices le impresionará a ese tío. Pero es una frase hecha policial, quizá no la más adecuada anoche.
Si le ponemos humor negro, lo cierto es que un policía, para dispersar a la gente no atropellada que nos paramos a mirar, dijo la frase de: "a ver, váyanse que aquí no hay nada que ver"... Joder, le parecería poco un coche a toda velocidad en dirección contraria que arranca de cuajo un banco de granito, destroza un puesto de helados, atropella varias personas, a una le arranca o medio arranca una pierna, deja restos de motor por toda la plaza y el coche acaba en la punta opuesta de esa misma plaza... si ahí no hay nada que ver no sé qué narices le impresionará a ese tío. Pero es una frase hecha policial, quizá no la más adecuada anoche.
Pero el fin de semana no es lo único que nos ha dejado en noticias de las que parece ser no se han hecho eco los medios locales. En la noche del viernes y a lo largo del sábado y el domingo también la policía cumplía órdenes del ayuntamiento, del nuevo alcalde, Javier Bello (Partido Popular), supongo, y fue cerrando terrazas de bar tanto en el distrito centro como en la plaza interior de La Garena. ¿Eran terrazas de bar ilegales? Pues no, no lo eran. Tenían sus papeles arreglados conforme a la ley, y tal como me contaron varios amigos dueños de bar, tenían y tienen pagadas sus licencias de terraza de verano hasta octubre. Aún más, en La Garena el ayuntamiento es dudoso que pueda tener derecho a cerrar las terrazas, y quizá allí cometió un exceso el gobierno municipal, ya que la plaza interior de La Garena es suelo privado, no público, pertenece a los dueños de ese terreno empresarial, no al ayuntamiento.
El lector interesado querrá saber porqué se cerraron terrazas de verano, sobre todo en la Calle Mayor. Pues ni los propios dueños de los bares recibieron explicaciones satisfactorias de la propia policía, que cumplia órdenes del ayuntamiento. Yo llegué a escuchar hasta tres versiones diferentes de esos porqués. Pero desde luego lo que también escuché fue un ambiente entre dueños de negocios y clientes habituales de esos negocios altamente enfadados con Javier Bello y con el Partido Popular de Alcalá de Henares. En principio se decía que estaban ocupando suelo público de modo abusivo. Pero lo cierto es que las licencias de terraza de bar las ha dado el propio ayuntamiento. Sí es cierto que han saturado el suelo público de un uso de suelo de modo privado, y que por algunas calles ni se puede andar. Pero eso es un problema que ha generado el propio ayuntamiento y el anterior alcalde, Bartolomé González, que abandonó el ayuntamiento hace unas pocas semanas para darle la alcaldía a su segundo, Javier Bello (repito). Los hosteleros han pagado unas licencias que les han concedido, el problema no es de ellos, sino de los que les han concedido las licencias, que son los mismos que ahora les quitan las terrazas. Si en todo caso alguien tiene licencia para poner cinco mesas y ha puesto siete, lo suyo es que le quiten las dos que sobran y les sancionen económicamente, pero desde luego no le quitas la terraza entera, porque no es justo, a pesar de la saturación de terrazas de bar en algunas calles, la cual, insisto, la ha provocado el propio ayuntamiento concediendo licencias sin ton ni son quizá por afán recaudatorio.
Pero ayer ya sonaban explicaciones diferentes, tampoco creíbles pero sí más coherentes. Se decía que era porque la presencia de las terrazas impedíría el paso de camiones de bomberos o ambulancias o policía si este paso fuera necesario. Pero esa excusa es muy endeble, y derribable. Para empezar, el impedimento del paso de los bomberos por la Calle Mayor no la provocarían las terrazas, sino los bolardos de metal que hay en una de sus entradas, y para muestra un botón: un caso real. Cuando explotó por accidente una casa de la Calle Mayor el 5 de diciembre de 2008 los bomberos no pudieron acceder a tiempo por culpa de esos bolardos, que tuvieron que ser cortados con una radial porque además los responsables municipales de ellos (que creo que es la propia policía) no encontraban las llaves que los bajan. Se ve perfectamente en imágenes de video. Aún más, la excusa usada no es convincente porque el sábado sí había algunas terrazas de bar que tenían permiso para permanecer abiertas. Si hubiera que usar la calle para que pasen bomberos, policía o ambulancias igualmente esas terrazas les impediría pasar, digo yo, y también debieran haber sido cerradas como las de la gran mayoría de bares del distrito centro. Pero además es que sí podrían pasar aunque estuvieran todas las terrazas puestas, más que nada porque varios furgones de policía nacional ya lo hizo el pasado 9 de junio durante las protestas de la Noche en Blanco, con peligrosidad para los viandantes, porque es una calle peatonal. Pero es que además, algunas de las terrazas retiradas no ocupan el ancho de la calle, sino que algunas sólo son una hilera de mesas, a menudo bajo los soportales, que no es carretera, es acera... ¿O es que policías, bomberos y ambulancias piensan conducir por la acera a toda velocidad?
Muy curiosamente, los ciudadanos sabemos observar y esto también fue un tema muy comentado, los bares que no sufrieron que les quitaran terrazas de bar se rumorea que son amigos personales del alcalde y de algunos concejales del partido que nos gobierna, el PP, aparte de filiaciones ideológicas que se rumorean también y demás. De hecho, hay cierta cadena de bares de la Calle Mayor que no es que sea un rumor... es que tiene varias fotografías expuestas del dueño sonriente con el exalcalde, el alcalde, concejales... En fin... Que ayer se llegó a decir que esto parece que es como un caciquismo de favores, y que parecía que el alcalde le ha quitado la competencia a sus amigos, eso se rumoreaba en esos términos.
Sea como sea, suicidios políticos aparte de Javier Bello, que desde luego no ha comenzado a gobernar haciendo amigos en un distrito que normalmente en lo electoral simpatiza con su propio partido político, yo si fuera uno de los afectados lo que haría sería ponerme en contacto con el resto de afectados y ponerle una denuncia colectiva al ayuntamiento, o bien para recuperar las terrazas pagadas hasta octubre a las arcas municipales, o bien para que les devuelvan el dinero de las licencias, y por supuesto para cobrar indemnizaciones por las pérdidas económicas sufridas estos días. Pero en todo caso, dudo mucho que la situación se prolongue, si lo hiciera sería de locos. ¿Cómo fomentar el turismo alcalaíno y a la vez ponerle trabas a quien ayuda que este se produzca, sobre todo cuando el mismo se ha fomentado en parte en torno a nuestra gastronomía de tapeo? ¿Cómo van a mantener algunos empresarios los contratos a sus camareros de verano si no tienen terraza de verano en la que trabajar? Y sobre todo, cuando el PP quiera hacer sus fiestas, mercados medievales, Noches en Blanco, muestras de tapeo, y demás, ¿con qué cara se acercará a estos dueños de bar para que colaboren organizando actos en sus negocios para desahogar de gastos un poco al municipio y lograr el éxito organizativo en los diferentes programas festivos que monten?
En fin, que Javier Bello acaba de ganarse muchos rumores en la ciudad acerca de acusaciones contra su forma de hacer política que pueden ser ciertas o no... pero desde luego la excusa o razón usada no se mantiene bien en pie. Yo me quedo con que ayer se hizo un buen recital, y cuando tenga alguna foto de él a ver si os la muestro. Saludos y que la cerveza os acompañe.