viernes, enero 27, 2006

NOTICIA 22ª DESDE EL BAR: EL INFORME NO AL CHIPIRÓN CUANDO LO TENGO MACARRÓN


Abro la prensa hoy y leo que Mick Jagger se va a casar por tercera vez. Bueno, hay famosos que se han casado más veces. Ahora bien, la elegida es Wren Scott, una chica de 25 años a fecha de hoy. Carajo, si es un año más joven que yo. Ahora dirán que el amor es ciego, pero yo aún no he visto en mi barrio a ninguna joven de esa misma edad que se case con alguno de los jubilados de mi calle con 63 años, que es la edad de Mick. De hecho, aparte de lo que veo y escucho por la televisión, aún no he conocido a una chica veinteañera en carne y hueso que diga: "oh, sí, ese tipo de 63 años que juega a la petanca todas las tardes en el parque me pone la almeja húmeda y palpitante". Claro, que habrá alguien que diga, que el amor con esas edades se fijan en otras cosas, en el cariño, el afecto... hombre yo le tengo cariño y afecto hasta a mi gata y no he decidido casarme con el animalito. Mucho me temo que Wren Scott lo que quiere es el dinero y la fama, y Jagger querrá seguir follando con jovencitas y mantener su leyenda alta hasta última hora. Ay, lo que hace el dinero... y los dientes tan largos que se nos ponen a algunos... Aunque este caso entre un nacido en 1943 y otra en 1978, ¿no da un paso más allá de la pederastia? ¿No sería nietarastia o algo así? Pues nada, que lo disfruten, es su vida y en eso nadie mejor que ellos para decidir lo que quieren y lo que les gusta, como cualquier otra persona. Después de todo, Jagger es esa persona cuyos rumores afirman que ya ha probado toda clase de sexo porque quiso experimentarlo en sus épocas de gloria en las décadas de 1960' y 1970'.
Entretanto, yo di clases del CAP en el instituo sobre la independencia de la América Española, fui a MAdrid a una entrevista de trabajo que acabó en la más absoluta nada miserable (como siempre), y regresé a Alcalá para ver a mi camarera favorita en la Vaca Flaca y acabar con Manowar Kenobi en el Tic Tac viendo un concierto homenaje a Nirvana, el cual lo daban unos tipos conocidos que llevan haciendo el mismo repertorio nirvanero desde antes de que muriese Kurt Cobain. Joder, si llegó un momento que uno de los chavales del grupo decía: "esta es la última" y seguían más y más. Tocaron hasta las caras B de los singles... y menos mal que este año no sacaron un disco de rarezas. Si sólo les quedaba por decir: "uy, era la última pero nos hemos dado cuenta que nos faltaba una de las ciento cincuenta y pico canciones que..." Por suerte que no se les ocurrió homenajear a The Rolling Stones, aquello hubiera sido un festival de varios días. Al menos fue un concierto animado y de reencuentros extraños de las buenas épocas del Boisán.
Ronnie: "Te voy a meter todo lo gordo".
Sheena: "Sí, qué bien, yo también te veo como a un hermano".





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