"Macbeth (Justin Kurzel, 2015) es todo un goce visual más cercano al
videoclip que al teatro, es por esto mismo que el poder de la palabra
Shakesperiana queda casi relegada a un segundo plano. Fassbinder
impecable, para variar. No obstante, estamos ante uno de esos films tan
contemporáneos de 'mucha estética y pocas nueces'." Así de contundente era la gente de El Tornillo de Klaus con esa película que el año pasado volvía sobre esta obra de Shakeaspeare. Quizá ese sea el resumen de una gran cantidad de largometrajes del siglo XXI. La entrada en este siglo, quizá marcada un poco antes en los años 1990, significó una reducción de muchas de las historias cinematográficas a simplificaciones argumentales en favor del espectáculo y del vaciado del contenido del guión. Ahora parece que todo debe responder a la estética y a la acción continua, al efecto especial, a la rapidez inmediata, sin preocuparse demasiado en lo principal: la historia a contar, la complejidad de la misma, los personajes, la identificación con los mundos interiores del espectador. La simplificación y el reduccionismo al concepto "buenos-malos / bien-mal", adornado de numerosas cosas ocurriendo a la vez o con gran rapidez sin dar descanso al espectado para que reflexione. Efecivamente, como en un videoclip de música o en los escenarios de un videojuego, se nos lanza la historia entre fuegos de pirotecnia y luces rápidas. Quizá por esta misma razón hay quien ama y quien odia la nueva entrega de La Guerra de las Galaxias: Star Wars VII, el despertar de la fuerza (J. J. Abrams, 2015).
No hace muchos años que Woody Allen dijo algo del cine actual en lo que años después coincidieron en otras entrevistas gente como los hermanos Coen o Quentin Tarantino: mientras el cine norteamericano creado en Hollywood se deshumaniza y se transforma cada vez más en un producto de masas para vender entradas y objetos relacionados, el cine europeo tiende a ahondar en las historias humanas y el guión. Es el eterno debate entre el cine como producto comercial y el cine como Arte, en el que no se termina de encontrar el equilibrio salvo en contadas ocasiones.
Mañana se darán los premios Oscars del cine y precisamente una película de Steven Spielberg con guión de los hermanos Coen regresa a ese cine que trata de ahondar más allá de "buenos-malos". Nos regresa a una historia narrada de forma clásica en pleno siglo XXI donde la estética prevalece sobre la historia. Se trata de El puente de los espías, de la que ya hablé muy extendidamente precisamente en El Tornillo de Klaus. Este largometraje contiene algunas novedades respecto al cine de espionaje, revisa el papel norteamericanos en su Historia reciente en la Guerra Fría, pero de una forma tan sútil que llama a la confusión y casi parece que Spielberg apoyara determinados métodos extrajudiciales. Sin embargo tiene mucho sabor a cine de otra época, el guión prevalece, y también prevalece la construcción de los personajes. La unión de los Coen con Spielberg ha dado una buena película, aunque no es la mejor de Spielberg, pero sí una de las que elevan su listón de buen cine. No obstante, pese a lo que se pudiera creer contrario, al público alcalaíno este largometraje le ha gustado tanto que la ha mantenido en cartelera desde noviembre/diciembre pasado hasta este mes de febrero. La producción del metraje, la ambientación o la interpretación de Mark Rylance como espía ruso encarcelado, puede darle algunos Oscars de la noche de mañana. La banda sonora está muy bien trabajada, aunque a mí se me hace insuficiente en su papel, no llega a la altura que debiera, para mi gusto, quizá le faltó el John Williams con quien siempre suele trabajar Spielberg y con quien no trabaja esta vez. Claro que el premio a la banda sonora probablemente sea más que merecido para Ennio Morricone, quien ha sido sacado por Quentin Tarantino de su jubilación prolongada para su Los odiosos ocho. Otro metraje que sin ser el mejor de Tarantino también eleva su listón de buenos largometrajes. Es impagable esa escena inicial rodada en Panavisión donde un Cristo de madera cubierto de nieve y toscamente labrado es rodeado por la imagen de la cámara mientras suena la música inquietante de Morricone y nos deja descubrir por detrás de Cristo una diligencia que avanza rápida entre el blanco invernal llevando en ella a gente no muy recomendable. Por otro lado, el trabajo de Mark Rylance en El puente de los espías, puede verse contestado por el regreso de otro cineasta del pasado con un metraje secuela innumerable de una de sus obras más conocidas, hablo de Silvester Stallone y de Creed, la leyenda de Rocky (Ryan Coogler, 2015), su personaje más emblemático y probablemene uno de los que mejor interpretara, que ahora regresa desde el paso del tiempo inexorable también para los héroes de ficción. El personaje más humano de Stallone puede darle el Oscar que no se le dió en los años 1970 más que como guionista.
Ahí entramos en el asunto de las revisiones no para vover a contar la historia ya contada, sino para contar lo que ocurrió después de la historia contada. Es el caso de la citada Star Wars VII, el renacer de la fuerza, que para quien la descubrios con ojos de niño a lo largo de la década de los años 1980 ahora nos la vuelven a presentar con ojos adultos, sin fábula, pero con espectáculo. Ahora esa guerra galáctica, como en toda guerra real, existe la sangre y existen los restos de las batallas y las ideologías que nunca terminan de explicar. Pero también de esta hablé en la Noticia 1547ª. Quizá pueda optar a los premios reservados a sonido. Uno podría pensar con facilidad que también a los de efectos especiales, pero en anteriores ocasiones ha ocurrido que a las trilogías las premian en la tercera entrega. No es descartable, de todos modos, al haber hecho adultas las batallas que hemos visto ya en las entregas de finales de los años 1970 y principios de los 1980. Como sea, en esas revisiones entra en juego otra de las grandes apuestas, Mad Max: furia en la carretera (George Miller, 2015) la cuarta entrega de esta trama de ciencia ficción de los años 1980. Personalmente, aún no la he visto. Sé que quienes la han visto están muy satisfechos con ella, aunque la descripción suele ser una persecución a la carrera, con violencia y ritmo de nuevo de vídeo musical ciberpunk. Hay quien dice que no, que contiene historia y que esta es compleja, poque hay que bucear en nuestra memoria y referencias de las anteriores entregas para comprenderla. Historia contiene, parece ser. La cuestión es el ritmo, el modo de contarla. ¿Cine espectáculo en este caso o videoclip acelerado?
La película que parte como favorita en todos los medios es El renacido (Iñarritu, 2015), interpretada por un Leonardo DiCaprio que parece que esta vez sí va a lograr el premio al mejor actor. Se trata de una historia real ocurrida o bien a finales del siglo XVIII o en los primeros años del siglo XIX, en Estados Unidos de América. Un guía de una expedición de tramperos en busca de pieles es atacado por un oso después de haber sufrido su grupo el ataque de los indios. Bastante impedido físicamente, dado por muerto, le mueve la ira y la venganza contra el asesino de su hijo. En este caso el rodaje está en cinemascope, lo que le viene muy bien para las grandes panorámicas del bosque, el río o los paisaje nevados. Es un formato muy clásico para las películas del Oeste precisamente por eso. Es ahí donde la fotografía puede ser totalmente suya en los premios, tal vez también el maquillaje, y unos cuantos premios más. El ataque indio inicial quizá es uno de los ataques indios mejor plasmados en una película. Aún con todo, aquí se trata de una lucha en las relaciones del ser humano con la Naturaleza, la venganza como motivación, la violencia humana del oso y la violencia inhumana de los hombres. La película merece la pena, aunque hay también quien cree que esta película es una mera excusa para mostrar imágenes espectaculares desde la fotografía o el planteamiento. Yo creo que no, creo que sí se trata de un buen largometraje.
Otro viejo conocido, Ridley Scott, también asoma la cabeza este año con Marte, cuyo título real sería El Marciano, siguiendo el relato de ciencia ficción literaria de Andy Weir del que fue sacada esta historia. Fui a verla al cine, como muchas de las mencionadas anteriormente. Tiene una buena producción artística. Realmente parece rodada en Marte, cosa imposible hoy por hoy. Sin embargo compite este año con otras películas con mucho empuje incluso en ese aspecto. Además, esta sigue la estela de otras películas de ciencia ficción sobre accidentes de astronautas ya premiadas en años anteriores como Gravity (Alfonso Cuarón, 2013) o Interstellar (Christopher Nolan, 2014). Eso, creo yo, jugará en su contra.
Por supuesto, compiten muchas más películas, pero yo dejo aquí mi comentario. Id al cine, y que la cerveza os acompañe.
Este domingo serán los Oscars, si alguien quiere jugar a la quiniela de todos los años, estos son los nominados:
ResponderEliminarMEJOR PELÍCULA
La gran apuesta, Adam McKay
El puente de los espías, Steven Spielberg
Brooklyn, John Crowley
Mad Max: Furia en la carretera, George Miller
Marte, Ridley Scott
El renacido, Alejandro González Iñárritu
La habitación, Lenny Abrahamson
Spotlight, Thomas McCarthy
MEJOR DIRECTOR
Adam McKay, La gran apuesta
George Miller, Mad Max: Furia en la carretera
Alejandro G. Iñárritu, El renacido
Lenny Abrahamson, La habitación
Thomas McCarthy, Spotlight
MEJOR ACTOR
Brian Cranston (Trumbo)
Matt Damon (Marte)
Leonardo DiCaprio (El renacido)
Michael Fassbender (Steve Jobs)
Eddie Redmayne (La chica danesa)
MEJOR ACTRIZ
Cate Blanchett (Carol)
Brie Larsson (La habitación)
Jennifer Lawrence (Joy)
Charlotte Rampling (45 años)
Seorsie Ronan (Brooklyn)
MEJOR ACTOR DE REPARTO
Christian Bale (La gran apuesta)
Tom Hardy (El renacido)
Mark Ruffalo (Spotlight)
Mark Rylance (El puente de los espías)
Sylvester Stallone (Creed)
MEJOR ACTRIZ DE REPARTO
Jennifer Jason Leight (Los odiosos ocho)
Rooney Mara (Carol)
Rachel McAdams (Spotlight)
Alicia Vikander (La chica danesa)
Kate Winslet (Steve Jobs)
MEJOR PELÍCULA ANIMADA
(Del revés), de Pete Docter y Ronnie Del Carmen
(Anomalisa), de Charlie Kaufman y Duke Johnson
(When Marnie was there), de Hiromasa Yonebayashi
(Boy in the world), de Alê Abreu
(La oveja Shawn), Richard Starzak y Mark Burton
MEJOR GUIÓN ORIGINAL
Matt Charman, Ethan Coen y Joel Coen (El puente de los espías)
Alex Garland (Ex machina)
Pete Docter, Meg LeFauve y Josh Cooley (Del revés)
Josh Singer y Tom McCarthy (Spotlight)
Jonathan Herman y Andrea Berloff (Straight Outta Compton)
MEJOR GUIÓN ADAPTADO
Charles Randolph y Adam McKay (La gran apuesta)
Nick Hornby (Brooklyn)
Drew Goddard (Marte)
Phyllis Nagy (Carol)
Emma Donoghue (La habitación)
MEJOR PELÍCULA DE HABLA NO INGLESA
El hijo de Saúl, de László Nemes (Hungría)
El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra (Colombia)
A war, de Tobias Lindholm (Dinamarca)
Mustang, de Deniz Gamze Ergüven (Francia)
Theeb, de Naji Abu Nowar (Jordania)
MEJOR DISEÑO DE PRODUCCIÓN
El puente de los espías
Mad Max: Furia en la carretera
La chica danesa
Marte
El renacido
MEJOR FOTOGRAFÍA
Carol
Los odiosos ocho
Sicario
El renacido
Mad Max
MEJOR VESTUARIO
Carol
Cenicienta
La chica danesa
Mad Max: Furia en la carretera
The Revenant
MEJOR MONTAJE
Mad Max: Furia en la carretera
Spotlight
Star War: El despertar de la Fuerza
La gran apuesta
El renacido
MEJOR EFECTOS VISUALES
Ex Machina
Mad Max: Furia en la carretera
The Martian
The Revenant
Star Wars: El despertar de la Fuerza
MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA
Mad Max: Furia en la carretera
El abuelo que saltó por una ventana y se largó
El renacido
MEJOR EDICIÓN DE SONIDO
Mad Max: Furia en la carretera
Sicario
Star Wars: El despertar de la Fuerza
Marte
El renacido
MEJOR MEZCLA DE SONIDO
El puente de los espías
Mad Max: Furia en la carretera
Star Wars: El despertar de la Fuerza
Marte
El renacido
MEJOR BANDA SONORA
El puente de los espías
Carol
Sicario
Star Wars: El despertar de la Fuerza
Los odiosos ocho
MEJOR CANCIÓN
50 sombras de Grey
Racing Extinction
La juventud
The hunting ground
Spectre
MEJOR DOCUMENTAL
Amy
Cartel Land
Look of Silence
What Happened Miss Simone
Winter for Fire
MEJOR CORTOMETRAJE
Ave Maria
Day One
Everything will be Okay
Shok
Stutterer
MEJOR CORTO DOCUMENTAL
A girl in the river: the price of forgiveness
Body team 12
Chau, beyond the lines
Claude Lanzmann: spectres of the Shoah
Last day of freedom
MEJOR CORTOMETRAJE ANIMADO
Bear Story, Prol
ogue
Snjay
Cosmos
World of Tomorrow
OSCAR HONORÍFICO
Spike Lee, Gena Rowlands, Debbie Reynolds
Y los ganadores fueron:
ResponderEliminarMEJOR PELÍCULA
Spotlight, Thomas McCarthy
MEJOR DIRECTOR
Alejandro G. Iñárritu, El renacido
MEJOR ACTOR
Leonardo DiCaprio (El renacido)
MEJOR ACTRIZ
Brie Larsson (La habitación)
MEJOR ACTOR DE REPARTO
Mark Rylance (El puente de los espías)
MEJOR ACTRIZ DE REPARTO
Alicia Vikander (La chica danesa)
MEJOR PELÍCULA ANIMADA
(Del revés), de Pete Docter y Ronnie Del Carmen
MEJOR GUIÓN ORIGINAL
Josh Singer y Tom McCarthy (Spotlight)
MEJOR GUIÓN ADAPTADO
Charles Randolph y Adam McKay (La gran apuesta)
MEJOR PELÍCULA DE HABLA NO INGLESA
El hijo de Saúl, de László Nemes (Hungría)
MEJOR DISEÑO DE PRODUCCIÓN
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR FOTOGRAFÍA
El renacido
MEJOR VESTUARIO
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR MONTAJE
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR EFECTOS VISUALES
Ex Machina
MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR EDICIÓN DE SONIDO
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR MEZCLA DE SONIDO
Mad Max: Furia en la carretera
MEJOR BANDA SONORA
Los odiosos ocho
MEJOR CANCIÓN
Spectre
MEJOR DOCUMENTAL
Amy
MEJOR CORTOMETRAJE
Stutterer
MEJOR CORTO DOCUMENTAL
A girl in the river: the price of forgiveness
MEJOR CORTOMETRAJE ANIMADO
Bear Story, Prologue
OSCAR HONORÍFICO
Spike Lee, Gena Rowlands, Debbie Reynolds